Esa mañana Effie se sentó en su sillon favorito de terciopelo rosa con cojines peludos y suaves. Bebió de su té de hiervas mientras miraba distraidamente su carpeta de trabajo. La nueva revista de Fabolous está a días de publicarse y debía revisar los últimos detalles. Sin embargo, su mente estaba en otro lado, tenía problemas para prestar atención a una revista que podría costar el futuro de su empresa.
La casa se encontraba en silencio, sus hijas estaban dormidas e igual que Haymitch y decidio no levantar a nadie para el desayuno como solía hacer en todas las mañanas porque... bueno, tenía un espacio para ella misma, estaba en paz y en silencio. Privacidad, que hermoso era tener privacidad al menos un momento. Por esa razón, le había pedido a Octavia que tomara el día libre y a su asistente que cancelará cualquier compromiso de hoy.
Se levantó de su asiento y arrastró el sillon hacia la ventana que abriría después. Tomó un cigarro de su escondite y lo encendió. Esperaba tener un poco más de tiempo sola porque las niñas, el trabajo, su madre y ahora Haymitch le habían quitado completamente su tiempo a solas. Ni siquiera en el baño tenía privacidad, su esposo entraba sin importar sus protestas.
Ahora tenía tiempo para fumar y pensar pero no habia espacio para concentrarse en su trabajo.
Sus pensamientos estaban concentrados en Haymitch. ¿Que iba hacer con él? Todo esto era complicado y confuso.
Tóxico, esa era la palabra perfecta para definir su relación. A veces se preguntaba si lo que sentía por Haymitch era amor o deseo. Se inclinó más por el deseo porque... él era bueno para que ella se sintiera segura y cómoda. Se conocen hace años, él como ella saben lo que les gusta, lo que les molesta, lo que divierte, lo que duele y lastima, lo que realmente les hace feliz.
Pero, también recordaba que eso es normal en una ruptura. Por esa razón los divorcios son complicados y que algunos vuelven con su pareja cuando se dan cuenta que estaban cómodos en esa relación.
Esta de ejemplo su relación con Leandro que fue un desastre. No porque se haya enterado que probablemente él es el estafador que estuvo a punto de llevarse una buena cantidad de dinero de su empresa. Si no, que el transcurso de su relación no habia esa conexión como la tuvo con el padre de sus hijas. No porque no fuera bueno en la cama, aunque, si habia veces que tuvo que fingir y usar su mano para ella cuando él se quedaba dormido. Pero pese a eso, él era muy servicial, atento y bueno con sus hijas, lo cual le es muy dificil pensar que él tuvo algo que ver con el casi robo.
Sin embargo, sin salir del tema, fue difícil conectarse con Leandro y cualquier otro hombre después de Haymitch. No era lo mismo sensación cuando él toca su piel, araña y estruja, o su mirada oscura, su sonrisa, su respiración. La barba. Odió el dia cuando rasuró su barba y cortó su cabello pero estaba feliz que el pelo de su pecho y la línea delgada de vello por todo su abdomen quedaran intactos.
Ella amaba su cuerpo y sus sentimientos. Y es contradictorio porque tal vez su sentir no era el deseo sino amor.
Pero las heridas en la piel estaban ahí y en sus hijas, en Katniss y Peeta y todo su alrededor...
- Oh, basta, Effie -dijo en voz alta.
Fijó su vista hacia las fotos de su carpeta, tratando de prestar atención de nuevo. Inspeccionó los vestidos de novia para esta temporada. Los diseños de Phil Jackson eran increibles y las fotografias captaban felicidad. Ella realmente creía que la joven novia estaba feliz de casarse y no solo una modelo que finjia excelente en su boda falsa.
La puerta de su oficina se abrió y vio a Haymitch asomarse mientras buscando algo en específico.
- Aquí estas -entró sin solicitar su permiso. Y realmente no lo esperaba- Desperté y no te vi. Pense que te habías ido pero vi a las niñas dormidas en su cama y la niñera no está en ninguna parte. Supuse que estarias aqui, preciosa -dijo mientras hacía una mueca de desaprobación al ver el cigarro en su mano.
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Les Debo Mi Amor (Hayffie)
FanfictionSeis largos años después de la Guerra, lo que podría decirse que los más felices tiempos en la vida de Haymitch Abernathy, lo convirtió en ceniza de nuevo al abandonar a su familia que le ha costado tanto mantener. No hablamos de su madre ni su herm...