« Con vino »

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E—
04071987

Son cerca de las once de la noche cuando mamá llega a la casa; no hace falta saludarla, tampoco esperarla para la cena.

Llega siendo el nombre del huracán en vida.

Hago oídos sordos cuando golpea la entrada de mi cuarto y entra casi derribando la puerta con el filo de sus palabras.

Trato de tomarla en juego cuando tira de mis cabellos y me grita lo horrible que soy esa noche.

Son efectos del alcohol y una noche llena de sexo y drogas.

Ella no es este monstruo que se convierte en serpiente y veneno arroja.

Me derrumba en el piso y no dejan de florecer insultos de su garganta; espero que esta noche no sea tan larga y que ella pare hasta cansarse o yo deje de escuchar por caer dormido.

No digo nada cuando arroja mis dibujos a la basura.

No hace falta.

Gracias por leer
Leeren

La necesidad de un Chocolate.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora