Luke era un niño de 14 años que vivía en un pueblo alejado de la ciudad dentro de un bosque, era un niño bastante especial podía ver fantasmas, aunque no lograra diferenciarlos de las personas normales. La gente decía que tenía problemas mentales o que estaba loco. Su madre solo le seguía la corriente porque no quería hacerlo sentir mal, aunque no ayudaba en mucho ya que todos le hacían burla o le decían raro o loco, en otros casos demente. Luke tenía únicamente dos amigas, las cuales no lo juzgaban, se llamaban Tessa y Theo eran mellizas, pero tenían un triste pasado. Resulta ser que ambas habían sufrido hace un par de años un accidente automovilístico el cual por desgracia acabó con la vida de Tessa. Ella no sabía que había muerto, ella pensaba que era la única sobreviviente, así que tanto Theo como Tessa no podían verse mutuamente, ya que estaban en diferentes dimensiones.
Luke al poder verlas a ambas pero ver que nunca se dirigían palabras ni miradas pensaba que de estaban ignorando o estaban peleadas. Así fue como un día se armó de valor para preguntarles que sucedía, sin saber la sorpresa que se llevaría.
— Theo, Tessa... ¿Por qué se odian?— preguntó Luke sentado debajo del árbol en donde solían sentarse a hablar.
— Luke...— respondieron ambas mientras lo miraban con confusión pero tristeza al mismo tiempo— ¿No lo recuerdas verdad?— El susodicho negó con la cabeza mientras las miraba a ambas.— en el accidente Tessa/Theo no logró sobrevivir... ya no se encuentra aquí Luke.
Él quedó aún mas confundido de lo que estaba, ¿Como es que creían que la otra había muerto? ¿Le estaban gastando una broma? si esra así, esta broma no era para nada divertida.
— Están bromeando ¿No?— Les dijo directo, no le agradaba que bromearan con ese tema.
— Luke...— Habló Theo esta vez mientras su melliza miraba al césped con el ceño fruncido— En primera ¿por qué bromearía acerca de eso? y segundo, ¿Por qué hablas en plural siempre?
Claro que Luke hablaba con ambas, solo que cada una lo miraba algo raro cuando hablaba con su contraria, nunca se habían atrevido a decirle algo pero Theo aprovechó el momento para preguntarle. En cambio ahora él estaba más frustrado al no comprender, ¿como podían decir esas tonterías si estaban literalmente a hombro con hombro? en un acto e desesperación tomó a ambas de las manos
— Chicas sé que sonará confuso pero, si una de ustedes murió en el accidente hace dos años... ¿por qué puedo verlas a ambas entonces?— preguntó a ambas sin saber lo que venía por delante con la respuesta a su pregunta.
Fin?
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Ideas para Historias
RandomEste libro se basa en ideas para libros futuros, pero esas ideas están desarrolladas a modo de historias cortas. Si les gusta mucho una de las ideas, o recibe mucho apoyo. Pensaremos en agregar una segunda parte o hacerla una historia propia. Hola...