Miles Morales: El nuevo y mejorado Spider-Man

#5 La Hora de Bombshell

Lana Baumgartner, probablemente la chica peor criada que puedas conocer, o al menos una de ellas. Sus poderes datan desde antes de su nacimiento, cuando su madre se ofreció de voluntaria para un experimento que desconocía, fue entonces que este mismo explotó dejando a la señora Baumgartner en medio de todo, siendo ella la que había generado la explosión. Minutos después fue informada de que el experimento fue un éxito, pero había algo más, la mujer estaba embarazada. Usando poco y nada de su imaginación, nombró a su hija exactamente igual que ella, por lo que se podría decir que era el equipo de Las Lanas. ¿No? ¿Fue muy malo? Esa es la razón por la que soy narrador y no comediante. En fin, la pequeña Lana fue entrenada por su madre para convertirse en su ayudante, cometiendo grandes delitos que serían detenidos prontamente por Spider-man, Peter Parker. Por tener catorce años y por haber sido controlada por su madre, Lana quedó en libertad condicional y fue puesta en Midtown High, la misma escuela que Peter, da la casualidad de que también el mismo salón. Sin quererlo, ella se volvió bastante popular, por lo que tanta atención de repente la abrumó e hizo que dejara prontamente la escuela. Así es como Lana vivió un año como Bombshell para subsistir, al menos hasta que la misma empresa que le dio a su madre sus poderes empezó a cazarla sin razón alguna. Es entonces que Lana conocería al nuevo Spider-man, Miles Morales, y otra persona araña más. ¿Quién era esa persona? Esa pregunta revolvió el cerebro de Lana una y otra vez desde su llegada a este nuevo universo, la pregunta resonaría cada vez más, luego de la confesión de Miles.
Esa misma noche, Lana llegó a casa y trató de recordar, puso todo su empeño en ello, pero nada pasó. Fue entonces que, frustrada, Lana tomó su teléfono y empezó a revisar lo primero que se la pasara por la pantalla. Entonces apareció.
LOS VENGADORES VUELVEN A SALVAR EL DÍA
Recientemente, los vengadores detuvieron al poderoso demonio Mephisto de destruir Manhattan por decimocuarta vez consecutiva. ¿Qué haría el mundo sin el capitán América, Black Widow, Iron Man, Thor, Hulk, Falcón y Visión?

Fue entonces que Lana retrocedió. ¿Black Widow? Ese nombre se le hacía tan familiar y no tenía ni idea de por qué, pero sabía que eso era lo que estaba buscando. Continúo divagando por los artículos relacionados. "Ultimates" "Spider-Woman" "Jessica Drew" Fueron los nombres que más familiares le resultaron. Anotó todo eso en su bloc de notas y se dispuso a salir en busca de respuestas, lo que la guió a el departamento de Jessica Drew AKA Spider-Woman. Tras golpear la puerta, Lana fue recibida por un hombre obeso de barba frondosa y cabello naranja. -Yo... Eh... Perdone, creo que me equivoqué, estoy buscando a Jessica Drew- Dijo Lana algo decepcionada. -Roger, ¿Quién es?- Una voz proveniente del interior del apartamento se escuchaba cada vez más, dando a entender que alguien se estaba acercando a la puerta. Entonces Roger se hizo a un lado y una mujer que no le sonaba de nada apareció con un bebé en brazos. -Esta niña te buscaba a tí- Dijo el hombre mientras se hacía a un lado. -¿Tú eres Jessica Drew? Creí que podrías ayudarme a encontrar respuestas- Lana sonaba como una niña que había perdido a su madre. -Ya no estoy en el negocio de los detectives, niña- Dijo Jessica mientras le daba unas palmaditas a su hijo para que éste dejara escapar un eructo. -¿Tienes alguna conexión con los Ultimates?- Dijo Lana evitando que le cerraran la puerta. Fue entonces cuando Jess soltó un gruñido y se llevó la mano a la cara. -Ay, otra fan loca. Escucha niña, no te presentaré a Carol Danvers, lo lamento, como puedes ver no soy el hada de los sueños- Refunfuñaba Jess mientras cerraba su puerta. Fue entonces que Lana dejó caer su cabeza en esta y suspiró. Se tomó un momento para luego gritar "Soy del mismo universo que Miles". Su voz resonó en todo el pasillo y se podría decir que todo el edificio. Al escuchar esto, Jessica dejó a su bebé en manos de Roger, tomó su chaqueta junto con sus lentes, y salió del departamento. Al salir, se encontró con Lana quien se hallaba sentada frente a la puerta abrazando sus rodillas. -Deja de dar lastima niña, vamos a hablar con Peter, él es un experto en esta porquería- Dijo Jess mientras se acercaba a las escaleras. -Tú sabes algo- Susurró Lana. -¿Cuál es mi conexión contigo? ¿Por qué razón el simple hecho de escuchar tu nombre me produce tanta tristeza?- Agregó. La mujer no respondió, solo se quedó mirando a la nada hasta que decidió acercarse a Lana y mostrarle una foto de Peter Parker desde su teléfono. Cuando ella vio la foto, sus ojos se llenaron de lágrimas, ella no estaba viendo a un hombre, estaba viendo a una chica unos tres años mayor que ella. -Él es Peter Parker. Lamento decirtelo, pero no sé dónde está la persona que buscas. Pero, si quieres empezar por algún lado, búscalo a él- Sugirió. En ese momento, Jessica entendió que Lana debía averiguar esto por su cuenta, por lo que le anotó la dirección de Peter en un papel y le dio indicaciones de cómo llegar. Fue así que llegó a otro complejo de apartamentos en Queens, al cual no fue capaz de entrar. "Mientras más cerca estoy de quien quiera que sea ella, más sufro" pensó Lana antes de siquiera poner un pie en la entrada, desistió completamente y se marchó a casa. Al llegar, se sentó en un rincón de su habitación y estuvo apunto de enviarle un mensaje a Miles, hasta que recordó que está enojada con él. Entonces fue que recordó por qué le daba tanta importancia a sus recuerdos, a la persona que no conocía, porque sus recuerdos le fueron arrebatados por una decisión egoísta. En su indecisión, Lana se fue a la cama para poder levantarse a primera hora del día siguiente. Fue a visitar a su madre a las 7AM y le narró toda su aventura nocturna, ahí es donde su madre le revela que recordaba a Spider-man mucho más joven, "el original, no el otro", palabras de la señora Baumgartner. El horario de visita terminó rápido por lo que no hubo mucho más tiempo para platicar. Así acabó parte de una mañana normal en la vida de Bombshell, ¿O no? Al salir de la prisión Lana se encontró con Miles, quién estaba sentado en las escaleras de fuera con los auriculares puestos.
-¿Qué haces aquí?- Preguntó Lana.
-Quería verte- Respondió Miles.
- Miles, de verdad que no necesito esto ahora.
- Solo escúchame, luego puedes odiarme todo lo que quieras.
-Miles... No te odio...
- Lana, lo que hice no fue fácil...
- Lo sé.
- No podía saber cuáles eran las consecuencias, no podía saber a quienes perdería, no podía. Simplemente no podía saber nada de nada.
- Miles, lo entiendo. Es solo...
- Entonces aquí estoy parado sin recordar a todos los que amé, pero a la vez sí, es tan confuso.
- Miles...
- Anoche estaba mal, aún lo estoy y no creo poder superar esto jamás. Pero tú te mereces respuestas y yo creo ser el único que puede dartelas- Miles continuaba hablando mientras buscaba algo en su bolsillo. Sacó una foto de los Young Ultimates, su primer equipo en el cual estaban él, Lana, Jessica Drew (Clon de Peter Parker), Kitty Pryde, Cloak y Dagger. Al ver esa foto, Lana no pudo evitar que varias lágrimas se le escaparan, por lo que entre lágrimas levantó la mirada hacia Miles y dijo -Comienza desde el principio-

CONTINÚA EN: LA VIDA DE BOMBSHELL