Felix no puede evitar sobresaltarse cuando siente un peso extra sobre sus hombros y el suave pero firme toque de las manos de JeongIn presionando allí. Su corazón se acelera y voltea bruscamente intentando no ser demasiado obvio sobre los sentimientos que se arremolinan cálidamente en su pecho. Carraspea nerviosamente y voltea el rostro para intentar hablar con el pelirrojo en un pequeño susurro.
—Jeongin-ah, ¿qué...?
Sus palabras se atoran en lo más profundo de su garganta cuando sus miradas se cruzan y JeongIn le sonríe suavemente desde su espalda, restándole importancia a sus acciones.
—Es el único que no tiene abrigo, hyung —JeongIn se mueve frente a él para acomodar mejor su propio abrigo sobre el menudo cuerpo del rubio, sin quitar la dulce sonrisa de sus rosados labios—. No queremos que pesque un resfriado, ¿verdad?
Entonces Felix se siente morir. Porque una persona no podía ser así de dulce. Debería ser ilegal. Debería ser arrestado por alterar el orden dentro de su corazón y cerebro. Le devuelve la sonrisa tímidamente mientras torpemente sostiene la prenda prestada desde la parte delantera de la misma.
JeongIn, satisfecho con su trabajo cubriendo al australiano del frío viento invernal, estira las mangas de su chaleco térmico hasta que estas cubren por completo sus manos y luego las frota entre sí, más por costumbre que por sentirlas heladas.
Felix siente el rubor subir desde su cuello hasta las orejas ante tan tierna acción y teme que todos los presentes puedan escuchar el fuerte latido de su corazón. Si JeongIn no deja de ser tan lindo, acabará comiéndoselo a besos ahí mismo.
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| So Sweet | Jeonglix |
FanfictionUna persona no debería poder ser así de dulce. 🚫Historia mía de mí. 🚫JeongIn x Felix 🚫Prohibida cualquier tipo de copia o adaptación. 🚫Simple ficción.
