¡Alerta Rosa! °•°•°Kookgi°•°•°

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—HIP HIP HURRRRRAAA ¡NOS LIBRAREMOS AL FIN DEL ABUELO!
gritaba demasiado eufórico y borracho Kim Taehyung,  uno de los pocos  amigos míos a los que les permití sí,  permití básicamente a que destruyeran mi pobre casa,  mis padres van a matarme. Tae veía cualquier oportunidad que se le presentase como escusa para fiestas que siempre terminaban raras,  porque sí es un borracho empedernido... Y los demás no son muy diferentes que digamos...
Y bueno aquí estoy sentado en un sofá que no se cuántos dólares habrá costado a mis papás pero que trajeron de San Francisco,el maldito lugar a donde nos iríamos a mudar. Por eso la fiesta, era cómo una especie de despedida. Rara y loca despedida. ¿Qué se podía esperar como Tae de organizador,  he?
Escuché detrás de mi espalda a Tae gruñir y gritar de dolor seguido de un golpe seco contra el suelo.

Al voltear mi cuerpo, no me sorprende mucho lo que veo...  acostumbrado ya a este tipo de momentos raros cojo mi botella de cerveza y sigo tomando como si nada. Tae estaba tirado en el suelo para poder alcanzar una pizza que se encontraba por debajo del sofá, mí sofá. Así que di tremendo respingo cuando sentí la mano de Tae pellizcar mi culo.

—¡Miren que encontré en el armario de la madre de Suga!  Rió fuertemente Hoseok y haciendo acto de presencia en nuestro campo de visión con una peluca negra con corte hongo. 
Taehyung aún reía por el pellizco que me había dado así que aprovechó su pocision y lo golpeó fuertemente en sus lonjitas.

—¡Oh,  yes Daddy!  ¡Quiero más! Ahah ¡Exijo más Suga!

Por un raro lo que me faltaba.

Maldito masoquista.

Sólo gruño a como respuesta y me dirijo a Hoseok para arrebatarle de un manotazo la peluca de mi madre.

—Oh, vamos Suga, relaja la raja. Responde haciendo un... sexy movimiento de su pelvis. 

—Cállate imbécil. Lo empujo fuerte, se tambalea y cae al suelo... ay por favor, ¿en serio?  Que gay,  tenía que caer justo sobre las lonjitas de Tae.  Y después tener que  yo verlos besarse, DUI.
Desaparezco de esa habitación cuando aquel beso se vuelve algo intenso.  Espera... ¿Hoseok no era hetero?

No sé porqué lo hice pero supongo porque los tragos ya me habían hecho algo de efecto y...  llevaba demasiada sangre en el alcohol. Alv.  Me coloque la peluca y pose en el espejo del vestíbulo.

—¡Ay! ¡Me veo divina!  Mi voz se oyó algo aguda. Así que me arrepentí de inmediato y mis mejillas se arrebolaron violentamente.

—¿Queeeé?  ¿Qué acabas de decir...yoon...  Yoonji?  ¡Acá sólo hay lugar para una sola diva!  Te acusare con Jimin.  No me dio tiempo a retenerlo que salió a lo raio maquin corriendo. Berga. Vali berga.

—¡NO!  JIN POR FAVOR VUELVE TÚ ERES LA ÚNICA DIVA AQUÍ.
si aquel ridículo acto concluyó arrojandome al suelo con una pose demasiado dramática y me arrepentí al instante de no haber corrido en lugar de haber perdido de esa forma la  dignidad.
Oh no, ¡Jimin se aproxima!  HOSEOK,  TAE,  ¡ALGUIEN SAVE ME!
 
—¿Yoon... ji? Detiene su andar y me mira con una ceja alzada.  —Queeeé mi macho Alfa pecho peludo de minotauro con yoongiconda de acero no puede ser ¡PASIVA! 

Me levantó e ignoró al enano mocoso y me aproximó a la mesa para tomar una cerveza para que la bestia no sospeche y en cuanto menos se lo espera salgo corriendo imitando al Jin de hace momentos.
 
Me escondo en el primer lugar que encuentro sí, abro la puerta de una habitación a oscuras y me escondo en el armario hasta que la tortura pase. Es increíble pero desde aquí se puede escuchar a Jimin buscarme desesperadamente entre llantos gritando Fake Love.

—¡LIEEEE!

Maldito.

De seguro Jin lo invito aunque yo le haya dicho que no lo hiciera. Ya que son mejores amigos y Jin también es mi amigo no podría decirle que no venga aunque invitar a Jimin es pasarse de pinche lanza. Eso no se hace ¡la traición la decepción, hermano!