Primer día de clases

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Suho se miró en el espejo y casi se desmaya.

-Hey, Suho, tu...SANTO KIMCHI!- Taeyeon miró a su hijo-quien-ahora-era-una-linda-chica.

Suho tenía una larga y ondulada cabellera rubia con flequillo marrón. Sus cejas eran gruesas como de costumbre pero sus ojos tenían delineador. Tenía BB cream dos tonos más oscuros que su tono original, y brillo labial color rosa. Su ropa consistía en Una camisa manga larga blanca, una corbata azul que hacía juego con su chaqueta, una falda negra y blanca cuadriculada, calcetas negras largas con sus zapatillas blancas nuevas.

Taeyeon solo miró a su hijo y suspiro con admiración. Observo sus afeitadas piernas y casi tiene una hemorragia nasal al verlas; eran de un brillante color crema. Pero la mejor parte eran sus muslos; delgados, mucho más delgados que los de ella.

-Uh...mamá- Suho agitó sus manos-Mis ojos están aquí-

-Huh, oh- Taeyeon se ruborizó. -Bueno, Suho...te ves...realmente...bonita...-

Ahora era el turno de Suho de ruborizarse.

-Solo es por la apuesta! Y esta estúpida peluca pica!-

Taeyeon chasqueó la lengua. -Mide tu lenguaje, ahora eres una chica-

Suho se puso más rojo. -No lo soy!-

Taeyeon se rio y salió de la habitación. -Apúrate y ven a desayunar-

Cuando ella iba a cerrar la puerta, Suho la tomó de la muñeca.

-Mamá-

-¿Si?-

-Um...yo voy a usar jeans...ya sabes...-

Taeyeon lo miró confundida. -que?-

-Um...Uh...- Suho se ruborizó aún más. -Área...masculina...-

Taeyeon aún estaba uniendo las piezas cuando comprendió. -Oh, oh ohhh!!!-

Y como si fuera posible, Suho se ruborizó aún más. -Bien...um...puedes...salir? Necesito cambiarme mamá-

Taeyeon asintió y fue escaleras abajo. Después de cinco minutos, una hermosa chica caminaba a la planta baja de la mansión.

Leeteuk tiró su cuchara y dejo caer la barbilla. -Santo Kimchi...Dime que ese no es Suho-

El mencionado infló sus mejillas y tomo asiento. El chef se asomó por la ventana y se rio. Las sirvientas tenían una sonrisa en su cara, y Leeteuk dejó que una mosca volara a su boca.

-Cierra la boca- siseó Taeyeon. -Yo pienso que te ves genial Suho-

Sintiéndose incómodo, Suho se alejó de su celosa mamá. Levanto sus palillos y comenzó a comer.

Leeteuk finalmente cerró su boca y escaneó a su hijo. -Porque los jeans, Su-Ohhh!!-

Taeyeon rio y comió su arroz. Las sirvientas estaban sonrojadas y el chef estaba ocupado preparando el lunch.

-Bien, me voy a la escuela mamá- Suho besó a su madre y abrazó a su padre.

-Adiós cariño!- Taeyeon agitó la mano y lo vio salir de la mansión.

-Bye!!!- Leeteuk imitó el gesto de Taeyeon. Suho sonrió y se despidió de todas las sirvientas.

-Un buen chico, como lo hemos educado- Taeyeon sonrió

Peluca, senos y tacones falsosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora