Atracción Sexual

Plan

Estaba realmente nervioso, no encontraba la manera de cómo tranquilizarse por más que mirara por la ventana como si las calles de la aldea tuvieran la respuesta. Mordía sus uñas, jamás lo había hecho, pero no sabía cómo más calmar la ansiedad. Era su día de descanso, debería estar en cama leyendo un pergamino o tal vez saliendo a comer Ramen, pero pocas veces eran las que tenía la oportunidad de estar libre de misiones y el pensamiento que lo mantenía inquieto impedía todo sentimiento de relajación, pudiera ser que si no tomaba la decisión ahora jamás volvería a suceder, o no en mucho tiempo hasta tener otro descanso.

Tomó una bocanada de aire y decidido creo dos clones de sombra. Los miro a ambos y ellos sabían que tenían que hacer y también sabían muy bien que el original aún tenía sus dudas de lo que llegarían a hacer pero tampoco retrocedería a lo planeado, no más... y no se arrepentiría de su decisión.

A uno de los clones le entregó una llave, ambos se miraron fijamente y con eso basto para entender que seguía en el plan. Mientras el clon estaba fuera, era momento de preparar cosas con el segundo. Las manos del original temblaban, sin embargo el clon las tomo para que pudiera relajarse.

-Todo saldrá bien...no podemos dejar que pase un día más. -Le sonrió y en ese momento se transformó en su versión femenina. Ante esa afirmación Naruto asintió, soltó sus manos de las del clon y comenzó a arreglar la casa junto con ella.

En cualquier momento llegaría y quería que todo fuera perfecto y de cierta manera, la distracción de limpiar y hacer otras cosas le ayudaban a aclarar su mente de lo que estaba a punto de hacer. La verdad es que había dos posibilidades en su plan: todo podría salir verdaderamente bien o que todo se fuera a la mierda y esa era la posibilidad más acertada.

Mientras en el pequeño departamento de Naruto se ocupaban, el clon del rubio no sabía muy bien a donde ir. También era la semana de descanso de Sasuke y usualmente no se informaban de sus actividades, pese a ser mejores amigos, no acostumbraban salir. A la percepción de Uzumaki, Sasuke se había alejado de él desde el momento en el que supo de su ¿novia? Seguía sin entender muy bien que pasaba entre él y Hinata y mucho menos entendía cómo es que había sido posible que sucediera por una estúpida misión y comenzaba a creer que la situación con Hinata constaba de un genjutsu. De ahí es donde se desprendía su idea del día, necesitaba comprender la situación con Sasuke, ya hacía tiempo que tenía una espina clavada en su cerebro, dejando por sentado que tanto él como Sasuke no eran simplemente amigos.

Aunque fuera un clon cada paso que daba seguía pensando en la situación tan incómoda en la que se encontraba lo cual, evidentemente, complicaba la búsqueda. Aunque tal vez él destino podría estar jugando a su favor cuando Sasuke, por voluntad, lo sorprendió golpeando su cabeza levemente y de manera amistosa.

-Estas pensando mucho Uzuratonkachi... No es usual en ti se te puede fundir el cerebro. -Naruto se sobo el golpe y giro su cuerpo para encarar a Sasuke. A juzgar por su gesto y la sonrisa prepotente, que pocas veces mostraba, le daba gusto encontrarse con él. -Te estaba buscando, se que hemos estado distanciados por motivos de cada uno pero, ¿qué te parece si vamos por un tazón de Ramen?

-Me da gusto tu sugerencia, también te buscaba pero no para comer Ramen por hoy paso de eso. -Sasuke abrió los ojos como plato, no esperaba una respuesta como esa y menos de Naruto. -Sin embargo... -Tomó la mano del Uchiha y le dio la llave que previamente el original le había entregado. -Podemos vernos en mi casa, ahora... hay algo que quiero conversar contigo. -Para cuando terminó de hablar ya había desaparecido, dejando a Sasuke con la duda y claramente creyendo que era una broma de muy mal gusto, ya que al menos se había tomado la libertad de invitarlo a comer.

A regañadientes emprendió su camino a casa del rubio, estaba decidido a romperle la cara por que tuvo que doblegar el orgullo como para pedirle salir. Toda la mañana estuvo pensando a dónde podrían ir y más sabiendo que a él no le gusta el ramen, el muy torpe de su amigo se digna a decir que no y hacerlo ir hasta su casa.