Miro con disgusto la H que tenia grabada en su muñeca. Hace dos años, yo era un novato tatuador, y para practicar tuve que usar una calabaza, hasta que decidi probar con mi cuerpo. Me hice varios tatuajes, y, aunque fue realmente un milagro hacerlos, me quede muy satisfecho con el resultado. Un dia, habia venido la Nana a visitarnos, y, aunque casi se muere al verme todo tatuado, se ofrecio para que practicara un tatuaje con ella. La H que rezaba en su piel estaba decorada, alargando las lineas y poniendo algunas aves volando en el interior.
-¿Sabes lo incomodo que fue cuando tus primos me preguntaron que era este tatuaje?- dijo con tono de indignacion. Esto ya me estaba cansando.
-Si quieres, te tatuo los nombres de mis primos- dije con simplesa. ella se dio vuelta, horrorizada.
-¡NO! ¿Estas loco? ¡SON 22!
-Entonces borrate mi inicial- sugeri. Si tanto se quejaba de que no le gustaba, habia personas que lo tapaban. Eso si, costaba mucho dinero, pero para mi abuela no era problema eso. Larga historia, despues se la contare.
-¡NO!-Grito
-¡DEJA DE GRITAR!-le ordene, su voz estaba rompiendo mis timpanos.
-No voy a sacarme el tatuaje-Dijo mas pacifica
-Pues, deja de quejarte- Ella se quedo callada unos segundos, hasta que hablo.
-Callate, Harry- Y volvio a hacer el licuado, no pude evitar reir. Pero mi risa se desvanecio cuando vi lo que hacia.
-Ho, No, no, no, no, no,no,no, no, no, no- Me levante de un salto de la silla-Saca tu dentadura de mi licuado - ordene.
-Claro que no, es el ingrediente secreto- se excuso.
-Ingrediente secreto mis bolas. ¡Saca eso YA de ahi!- exclame.
-¡No!
-¡Si!
-¡NO!
-¡Que si, mierda!-y en ese momento, todo se torno silencioso, pero ella lo rompio.
-Ho, ¿Quieres que lo saque?- hablaba con dificultad, ya que su boca, practicamente, estaba en mi licuado.
-Ho, no abue. Quiero tomarme tus babas junto con mi licuado. ¿¡Que tal si tambien me escupes en la boca!?- hable con sarcasmo. Me cruce de brazos, con el ceño fruncido. Ella tomo mi vaso entre sus manos. Me sonrio, pero esa no era una sonrisa muy.. ¿Linda? parecia mas a una cinica, y sin sus dientes, era horroroza. Y en ese instante, me tiro el contenido del vaso en la cara. Y no le habia quitado la dentatura. Abri mi boca, en busca de aire, mientras oia la carcajada contenida de mi Nana.
-Regla numero uno: No decir malas palabras. Regla numero dos, no hablar con sarcasmo. Regla numero tres...
-No faltar el respeto a los mayores- la interrumpi. Bufe. Esas eran las reglas de mi abuela cuando estaba en su casa. Imaginense mi infancia.
-No, en realidad, esa es la regla numero 5. La 3 es no estar sucio dentro de la casa. Asi que, ve a bañarte, hombre de la banana-me dio unas palmadas, para luego limpiarse en mi remera.
-Ensucia mas mi camisa favorita, Nana. ¿Quieres tirarle chocolate tambien?
-Tentador, tentador. Pero, aunque te verias exquisito, no lo hare- Carcajeo.
-JA-JA, mira como me rio, abue, estoy por mearme-le dije sarcasticamente, ella me miro con advertencia- hacerme ensima- Puse los ojos en blanco y me cruze de brazos.
Ella paro de reir y volvio a la mesada, agarrando un trapo esta ves, con la intencion de limpiar lo derramado, pero yo se lo arrebate de las manos un poco con brusquedad . Antes de agacharme, ella agarro mis brazos entre sus manos y me miro con dulzura.
-Lo siento, Harry- y esas palabras rompieron mi corazon, porque nada duele mas que ver el arrepentimiento de una persona a la que amas. Pero me hice el fuerte, como debia ser.
-Esta bien- Me agache a limpiar.
-Harry-Susurro
-¿Que pasa?- Levante mi cabeza para mirarla, y ella agacho la suya.
-Feliz cumpleaños-Me sonrio. Y yo le sonrei de igual manera.
Hay que admitirlo, de seguro me veia muy chistoso con mi cara de perro y licuado de banana ensima. Pero, no le iba a mostrar mi lado amable ahora, no era momento. Tenia que finjir estar enojado, hacerme respetar, y, en algunos casos, ser "Un aguafiestas".Pero, ¿Que mas podia hacer?
Y llego la noche. Mire mi reloj y eran... Las 10:45. Ya estaba tirado en mi cama, sin camiseta, solo con mis pantalones y escuchando como la lluvia torrencial se desquitaba con los arboles en sus soplidos. Me quede mirando el techo, pensando en nada. Mi cumpleaños paso como todos: Llamadas de mis padres, regalos por correo, -Entaban en Paris, asi que los mandaron unos dias antes- un dibujo de Chloe, y un pastel echo por la Nana, ya que en la supuesta "cena familiar" solo estaba mi Nana y Chloe . Nana se habia ido hace una hora, aproximadamente. Le dije que me llame cuando llegara a Homes Chapel, pero se nego al pensar que estaria durmiendo, lo cual era erroneo. Yo me quedaba hasta las 3 AM por lo menos, los fines de semana claro. Mi pesamiento era no desperdiciar los fines de semana, asi que me dormia muy tarde a la noche, haciendo cualquier cosa. La noche era mi ambiente favorito; No habia mucho ruido afuera, podias pensar tranquilo, el silencio abundaba en casa; todo era pacifico. No me queria perder la noche, y muchas veces, hasta me quedaba a estudiar de noche. Me encantaba ver las estrellas con mi madre cuando era pequeño, ella me mostraba las constelaciones, y algunas las inventaba yo. Esto me llevo a ver una estrella tatuada en mi brazo, me la habia tatuado por esa misma razon. Yo tenia el cuerpo cubierto por estos dibujos permanenetes, y, por ahora, no me arrepentia de ninguno. Varios los hice yo, y cada uno tiene su historia. El candado que tengo en mi muñeca, por ejemplo, es pequeño, pero esta cerrado. Me lo tatue cuando me dijieron que era muy "cerrado" con los demas. Entonces me dije "Que mas da" y me lo tatue. Si, estupido, pero me recuerda que si soy cerrado, es es porque nadie tiene la llave correcta para abrirme. Muchos lo han intentado, pocos han logrado abrir una parte. Mark es uno de ellos. No se porque, pero el insistio el primer dia de escuela que yo sea su amigo. Y cuando digo que insistio, es decir que me rompio las pelotas todo el jodido dia hasta aceptar. El era un gran amigo. Un sonido me saco de mis pensamientos.
En la puerta se volvio a escuchar los toques, pero yo solo me limite a insinuar que era mi imaginacion. 1, 2, 3, 4, 5 veces tocaron la puerta, hasta que me decidi y baje como estaba, sin importarme nada. Basile un poco en la manija, pero sacudi mi cabeza con agresividad y abri la puerta. Una chica de espaldas esperaba afuera, agachada, con un hombre en brazos en brazos, era gordo. Casi me da un infarto al ver de quien se trataba.
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Tattoo Moon
HumorCuando el frio y oscuro corazón de Harry vuelve a latir por Emily, tiene miedo de que sea roto, de nuevo. Pero, las cosas cambian. Emily le hace ver las cosas de otra manera, una manera no tan mala de la que el pensaba. "Pues, si voy a ser una mas...