Encontrando La Salvación En La Oscuridad [Hiatus]

Blanco con negro, rojo carmesí

—¿Quién te golpeo?— Rin no sabia que hacer estaba en shock se quedo viendo los ojos de su psicólogo, hasta que reacciono aparto su mano de un manotazo tomo su mochila y salió corriendo, “mierda, mierda, mierda” era lo único que pensaba la castaña mientras corría con lágrima en los ojos no sabía que hacer seguro el, le informaría a la directora que sufría violencia interfamiliar o algo por el estilo, le faltaba tan poco para graduarse solo quería vivir una vida pacífica ¿era tan malo pedir solo eso? Paso junto al guardia de su escuela y sin que este pudiera detenerla Rin cubriéndose el cachete corrió hasta salirse del instituto, mas tarde se encontró en el parque donde siempre se bajaba cuando Sesshomaru la llevaba y se interno en el, se sentó junto a la fuente de agua un largo rato en banco no quería pensar nada, quería sentir como si no existiera tan siquiera por un momento.

Cuando Sesshomaru vio salir corriendo a Rin del cuarto quiso perseguirla pero no podía hacerlo, no podía descuidar su trabajo, por suerte adelanto su ultima terapia y sin mas salió a buscar a Yamamoto, pensó por un momento que si conducía el auto rumbo a su casa la encontraría, se detuvo a pensar si era prudente localizarla, ¿Seria poco ético hacer eso cuando no era su trabajo? ¿Sobre pasaría el Doctor–Paciente que le han enseñado desde la universidad? ¿Por qué? ¿Por qué hacia eso? Yamamoto no era mas que una paciente ¿Por qué se tomaría tantas molestias? Si fuera por el en ese momento estaría yendo rumbo a su casa a su vida monótona de soltero, era algo que no entendía y no lograba entender ¿o tal vez si?...

En una calle recta detuvo el auto, se quedo viendo a la nada con la mente completamente en blanco durante unos minutos que podrían haber sido horas para el.

–Definitivamente hoy no es mi día.

–Sesshomaru.. Sesshomaru.. Sessh…

–¿Mamá? ¿Qué pasa mamá?

–Mami ha hecho algo malo Sessh… no sabe que hacer ¿Me podrías ayudar?

–No te entiendo ¿Mama … por que hueles a metal?–La habitación estaba en penumbra con la respiración de su madre agitada de fondo, se inclino hacia el escritorio junto a su cama y prendió la pequeña lámpara lo que vio cuando volteo a ver que sucedía le impacto era algo que no iba a olvidar toda su vida, era ella su preciosa madre sin rastro de emoción en su cara como la de una mujer de clase alta debía ser vestida de un vestido blanco con negro cubierto de rojo carmesí olor metálico.

No quería seguir, no entendía su propósito en la vida ¿De qué me sirve vivir si al final de todos modos me voy a morir? Realmente ¿vivir tiene un propósito quisiera? El egoísmo del ser humano justifica su existencia creando una sociedad para servir y ser útil en algo, simplemente somos marionetas de un grupo de titiriteros que juegan a ser un dios.

El hecho de que Kanna me pidiera a mi encontrar mi salvación cuando ella fue tan cobarde por el simple hecho de suicidarse ¿Me parece justo? ¿Por qué estoy de acuerdo? mi vida es una mierda y no creo que cambie ¿Entonces por que me esfuerzo? ¿Qué tengo que buscar exactamente? Un propósito… propósito…

–Mi propósito.. Antes de Kanna no tenia nada, ella me dio un propósito, me lo dio y hasta ahora me doy cuenta – Lágrimas en sus ojos escurrían entre sus manos tapando su cara.

Un sollozo se escuchaba en medio de la noche en el callejón de un edificio frente a un bar, Rin estaba deambulando debido a que su padrastro no tenia dinero para comprar bebidas y la obligo a ella recolectar latas de metal para cambiarlas por dinero. En aquel callejón encontró a una compañera de su salón sollozando era Kanna Takeda, por un lado no le interesaba el por que estaba ahí nunca le había hablado en su vida y no quería hacerlo sin embargo no quería ser tan cruel así que se acerco lentamente hasta que quedo enfrente de la visión de esta.