tres.

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Llegué a mi salón, puse mi mochila en un pupitre, sin embargo aún no empezaban las clases así que saqué mi desayuno y salí de allí.
Me dirigí a la cafetería y por suerte no había casi nadie, solo unas dos o tres personas.

Estaba desayunando y de pronto veo a lo lejos a Taehyung, apenas me ve me saluda moviendo su mano de un lado a otro, me sonrió y se acercó a mí lo más rápido que pudo.

—A-ah, espera estoy cansando, he corrido todo el camino —se recostó de la mesa con una de sus manos apretando su cintura, suspirando y aspirando más veces de lo normal.—¿Cómo estás? ¿Qué tal tu fin de semana amigo? —preguntó más calmado y se sentó al frente de mí.

—Estoy muy bien, y me fue súper ¿Tú? —respondí sonriente.

—Me alegra —sonrió y suspiró. —Estoy algo bien y mi fin no estuvo del todo alegre y feliz para mí —musitó algo triste.

—¿Y eso? ¿Qué pasó? ¿Puedes contarme? —dije preocupado.

—Hay algo que tengo que decirte, no te dije ayer porque me quitaron mi celular —contestó y se acomodó su cabello.

—¿Por qué te lo quitaron? ¿Qué me tenés que contar? Joder ¡Habla! —dije con un tono alto.

—Ok, ok —suspiró de nuevo. —Lo que tengo que decirte es que... Soy gay —respodió cabizbajo.

¿Qué? ¿Es gay? ¿Mi mejor amigo es gay?
¿Qué tal si le gusto?
Esas son las preguntas que pasaban por mi cabeza todos los días después de ese momento.

Quedé con la boca semi-abierta, no podía creerlo. No soy homofóbico pero, justo tenía que ser él ¿Por qué no otra persona?

—¿Qué acabas de decir? ¿Eres gay? — dije sorprendido.

—Sí, lo soy —musitó Taehyung. —Y me quitaron el celular porque se lo dije a mi madre y se enfureció tanto que me castigó por un mes sin celular, dijo que no quería tener una mariquita en la casa y que durante este mes reflexionara en lo que estoy sintiendo —sollozó un poco.

—Wow, de verdad lamento lo de tu teléfono, y tranquilo —toqué su hombro—Yo te apoyo, cuentas conmigo —le sonreí y me correspondió con su hermosa sonrisa cuadrada.

—Te quiero mucho amigo —dijo el pelirrojo, se levantó, se dirigió a mí y me dió un fuerte abrazo.

—Yo también te quiero mucho —respondí en medio del abrazo.

Se volvió a su asiento y sacó su desayuno. Yo ya había terminado el mío, así que me puse a fastidiarlo con su comida para que me diera un poco, nos reímos mucho y hablamos de muchas cosas.

—Ey —le toqué el hombro con sonrisa pícara.—¿Te gusta alguien? —le pregunté, casi se ahogó con su propia comida.

—E-ehm... Sí —contestó sonrojado, se veía super lindo con sus cachetitos rojizos por la vergüenza. —¿Quieres saber quién es? —me preguntó.

—Por supuesto que sí —inmediatamente acepté.

—Es el chico pelinegro del que siempre te hablo —dijo Taehyung. —Él hace que mi corazón explote —respondió tocando su corazón, ese que aquél chico se había robado.

—¿Jungkook? —le pregunté alzando una de mis cejas.— ¿Jeon Jungkook? Ese pibe es un creído, no me cae.

—¿Y? Me tiene totalmente enamorado —musitó alzando sus hombros restándole importancia a lo que había dicho sobre Jungkook. —Todo de él me gusta, hace unos días me dí cuenta de ello —agregó el pelirrojo.

neighbors ↳ sookaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora