Confrontación

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Misaki no hace más que llorar y pasar en su habitación durmiendo la mayor cantidad de tiempo posible.

Desde el día que dio por terminada su relación con su destinado, su corazón y vitalidad se estaban desvaneciendo día con día. Sabía que alejarse de su destinado luego de reconocerle era casi insoportable, quizá lo único que le mantenía cuerdo era el hecho de que Ryuichi iba constantemente a verle, a pesar de no recibirle, siempre le dejaba algún presente o regalo, alguna cosa que estuviera impregnada con el delicioso y particular aroma a petricor del alfa.

Sus amigas iban a visitarle todos los días, y aunque a ambas las quería por igual, Hanako era la que más le comprendía en su dolor, y la que más ánimo y cordura le daba a su triste vida.

Hanako estaba sufriendo mucho. Kyo no era su destinado pero ella le amaba desde que eran niños, un amor infantil que creció con los años pero que ocultó bastante bien, la pobre debía batallar con las constantes súplicas de Kyo para que le disculpe, pero sin ninguna referencia a los sentimientos que le confesó, cómo si eso no hubiese ocurrido, como si sus sentimientos no importaran.

Ijuin Kyo al igual que todo el mundo, sólo se dejaba llevar por las apariencias, Leiko era una joven muy atractiva, pero estaba podrida por dentro.

-Hanako, ¿Cómo estas?, ven, recuéstate aquí, no quiero levantarme, tengo mucho frío.-

-Soportándolo.. Creo, ¿Cómo estás tú?- Hanako se recuesta a su lado, los ojos de la chica están rojos e inflamados.

-Yo.. No me siento mejor, parece que el sufrimiento no se acabará nunca, estoy tan cansado Hanako, lo único que ya casi no tengo son lágrimas, mi cuerpo está agotado de llorar, mientras él.. No importa, ya nada importa- Suelta con desasosiego.

-Viste las redes sociales, ¿Verdad Misaki?- Hanako ve a Misaki encogerse y rehuir con la mirada- No deberías torturarte así. Si ese chico dejó de venir ésta última semana, es porque debe tener cosas que hacer, escuché que tiene que asumir una de las grandes empresas a cargo de su familia, y que harán una gran fiesta por ello- Misaki seguía en silencio, seguía esquivo- Misaki, sé que no puedes evitarlo, pero no puedes molestarte porque él no vuelva, al fin y al cabo, siempre le rechazas, te está dejando tranquilo antes de que retornes a su casa, quizá solo quiere darte un respiro.. Solo queda un mes para que regreses-

-Si claro- Gruñó- Un respiro mientras se pasea del brazo por todos lados con su antiguo destinado, anoche.. Se les vio en un bar bebiendo muy animados- Comenta con celos que no puede evitar

-Misaki yo también vi esas imágenes y sólo se veían como un par de amigos, ya deja de mal pensar, además, él tiene derecho a distraerse también.. No eres el único que está sufriendo con todo ésto amigo-

-Le defiendes mucho- Misaki la vio mal- Me molesta Hanako, si seguirás justificándolo ve dónde él y dale consuelo- Gruñe otra vez.

-¡Misaki!, no seas injusto y tan celoso, aprende a controlar tu omega o te traerá problemas cuando trabajes como su mayordomo. Aún no te entiendo, ¿Por qué si cortaste con él sigues empeñado en trabajar en su casa y peor aún, sirviéndole?-

-Tengo mis razones Hanako- Tembló un poco- No quiero hablar de eso.. Discúlpame, no sé qué me ocurre, tienes razón, no debo desquitarme contigo.. Es solo que, no me siento bien, estoy muy agotado-

-Amigo.. Sé que ninguno de los dos tiene muchos ánimos pero, mañana por la noche hay una gran fiesta en blanco sensation, creo que será la primera vez que se hace en Tokio, habrán todo tipo de dj y al parecer es bastante animado. ¿Qué dices Misaki?, si tú vas yo también, aunque si decimos que no, créeme que Eri nos obligará a ir, ella me habló de esa fiesta y su novio vende entradas-

Desde mi infancia. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora