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Josh estaba sentando en medio de la cama con una manta cubriendo su cuerpo por completo, era de madrugada y se había despertado gracias a una pesadilla, tranquilo de saber que era solo eso.

Se levantó pensando en ir a la habitación de Tyler pero no quería que pasara un alboroto si lo descubrían. Miró por toda la habitación, deteniendo su mirada en su pez, tomó la pecera y se sentó en el suelo con esta sobre sus piernas.

—Supongo que por ahora solo tú puedes hacerme compañía—murmuró Josh, sonriendo mientras veía a el pez nadar.

Soltó un fuerte suspiró, sabiendo que no dormiría en lo que restaba de la noche.


El primero en despertar en la mañana fue Tyler, o eso pensó, sabía que su padre ya se había ido a el trabajo y su madre lo haría pronto. Se levantó de la cama luciendo su cabello despeinado yendo hacia la habitación donde Josh durmió, pero se detuvo en seco cuando se topó a su madre en el camino.

—¿A dónde vas?—preguntó Kelly alzando una ceja.

—Iba a ver si Josh ya estaba despierto—respondió con una pequeña sonrisa.

—Oh, él despertó hace mucho tiempo—dijo ella—De hecho está afuera.

—Iré a verlo—respondió Tyler.

El castaño se dirigió hacia el pórtico, encontrándose a Josh en el columpio que hace años su padre había construido para él y sus hermanos, cabían perfectamente dos personas ahí. Se quedó de pie bajo el umbral unos segundos mientras lo miraba, parecía cansado y seguía en pijama. Tyler se aclaró la garganta y eso hizo que Josh lo mirara, ambos sonriéndose.

—¿Quieres compañía?—preguntó Tyler.

—Si se trata de ti—Josh asintió, sonriendo.

Tyler tomó asiento junto a él, meciendo un poco el columpio sin dejar de ver a Josh, el viento movía su cabello rizado y el sol hacia brillar más sus ojos. Pero a pesar de eso pudo identificar algo en su mirada, lucia como si estuviera triste o asustado.

—¿Sabes que ya nada puede lastimarnos, no?—preguntó Tyler repentinamente.

—Eso quiero creer—Josh volteó hacia el castaño—Creo que aún nos falta un obstáculo por pasar.

—Y es muy aterrador—rió Tyler bajito.

—Pero está bien—Josh sonrió grande—Sé que a pesar de todo seguiremos juntos.

La mano de Josh se colocó sobre la rodilla de Tyler mientras se miraban a los ojos.

—Ahora eres más valiente que antes, y cuando hables sobre nosotros lo serás todavía más—habló Josh completamente convencido de sus palabras.

—Mientras tú creas eso—Tyler tomó el mentón de Josh, acariciado con su pulgar—Yo también lo creeré.

—Me gusta oír eso—respondió Josh acercándose a él, dejando un pequeño beso en su mejilla.

—Todavía me ponen nervioso tus besos—admitió Tyler con una risa.

Josh le mostró la lengua mientras soltaba una risa divertida y avergonzada. Se puse de pie, avisándole a el castaño que ayudaría a Kelly con el desayuno así que entró a la casa. Tyler se quedó solo, pensando, hasta que sintió que se sentaron a su lado, viendo a su padre quien parecía regresar por algo que olvido.

Boys love boys and girls    {tysh}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora