Capitulo 12 [Final y epílogo]

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El rubio comenzó a correr de prisa, no lograba localizar a Granger. Pudo notar sus lágrimas descender por sus mejillas -Compórtate como un hombre- Pensó Draco. Se detuvo en el árbol más cercano que había, era un árbol de Saúco. Colocó su mano izquierda en su pecho y sintió los latidos de su corazón. Solo deseaba que ella estuviera bien. Escucho, a lo lejos, unos sollozos. Se acercó lentamente sin hacer el más mínimo ruido. Descubrió la figura de una joven muy asustada. Era Hermione, estaba tendida en el suelo llorando y, Draco, pudo notar que había sangre cerca del brazo derecho de la niña. El rubio se agachó sin dudarlo y tomo la cara de Hermione haciendo que esta lo mire.

-¿Hermione? ¿Que pasó? -susurro el joven sin poder contener las lágrimas.

-No... no puedo seguir, Draco, entregamé. Yo estaré bien, lo prometo... -dijo la joven con el tono de voz entrecortado.

-Hermione... lo siento tanto, de verdad, todo esto es mi culpa, no quiero perderte, no quiero lastimarte, te amo, siempre lo hice -dijo Drco desesperado mirando a la joven a los ojos.

-Shh... -la niña coloco uno de sus dedos en los labios de Draco y esté la miro llorando- Te amo... haz lo que dice tu corazón -se besaron dejando todo el amor que se tuvieron en ese ultimo beso.

Al rato, Draco, no tuvo elección.  Fue a la Mansión Malfoy con Hermione. Sosteniéndola de la mano, el joven entró a su hogar y se aterrorizo al ver a sus padres en la propiedad.

-Bien hecho, Draco... -dijo Lucius en tono hostil. Draco bajó la cabeza y apretó la mano de Hermione. - Ahora llama al señor tenebroso, Narcissa. -el señor Malfoy comenzó a caminar de un lado a otro en la sala, al parecer estaba nervioso o asustado. La señora Malfoy, Narcissa, levanto la manga de su remera y colocó su mano en su antebrazo, haciendo que la marca tenebrosa se mueva de a poco.

A los minutos, Voldemort, apareció en la sala de la Mansión Malfoy. El señor tenebroso sonrío maliciosamente, este saco su varita y apunto a Hermione.

Crucio! -dijo Voldemort, y Hermione se retorció de dolor cayendo en el suelo. Lucius se acercó a Draco y lo tomó del hombro alejándolo de Hermione. -¿Donde esta el niño Potter?

-No lo sé. -susurro débil la jovén y el señor tenebroso repitió el hechizo ya haciendo llorar a Hermione, esta miro a Draco, y el la miro llorando y apunto a la chica con su varita.

-¿Que haces, Draco? -susurró su padre a punto de asesinarlo a golpes.

-Debo hacer esto... -dijo el joven llorando. Su mano temblaba mientras apuntaba a Hermione.

-Draco... no -dijo Hermione llorando.

-Te amo, Hermione...

-También te amo Draco... -susurró la jovén tendida en el suelo llorando

-¡Oblivate! -grito Mafloy.

- ¡¿QUE HICISTE?! -grito Lucius agarrando a Draco del cuello de su remera.

-Aún no termine. -dijo sonriendo pero llorando el mismo tiempo, volvió a sujetar su varita y colocó la punta de esta en su propio pecho.- Avada Kedabra...

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En Hogwarts seguía todo igual, Hermione no pudo recuperar su conciencia del todo, se la notaba feliz, estaba saliendo con Ronald, tal vez el la amaba. Habían pasado unos tres años, cuando Draco Malfoy dio su propia vida para salvar la de Hermione Granger. Ella nunca podrá olvidar una cosa... el amor que le tenía a el hurón.

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Bueno, acá finaliza este fanfic, siento que este no salió muy bien como hubiese querido, haré alguno otro en otros días, pueden dejarme ideas sobre el proximó fanfic, si lo quieren de Dramione o sobre alguna otra cosa. Gracias a todos por leer lo que escribo. Besos, ¡nox!

Enamorado de Granger {Dramione} {Terminada}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora