El juego prohibido (Harry y tu)

Desde el comienzo

Me desperté a las 5:30 para bañarme, cambiarme y desayunar para ir al instituto y empezar otro nuevo día, como todos los días y años en esa prepa, desde que me aislé de las chicas todos mis días son así pero derrepente pienso en lo que hicieron y pienso que estoy bien como estoy. Agarre mis llaves en la mesa a lado de la puerta, agarré la manija la gire y salí por ella, me iba caminando al instituto por que me quedaba muy cerca.

En el camino venía pensando y viendo el paisaje a mi alrededor a decir verdad era muy bonito y pintoresco me alegraba mi camino a la escuela y me tranquilizaba, por ahora estaba sola <<Genial>> en este regreso a clases y yo sola lo de costumbre. Al llegar al instituto pude notar como unos caminaban tímidos e inseguros, eran los nuevos, y a otros que abrazaban a sus amigas con una sonrisa y se decían lo bien que se lo habían pasado en estas vacaciones a de sonar raro pero verlas reir me hacia reír también no sabía por que pero me contagiaba de su alegría.

Entré por definitiva a la escuela y fui directo hacia mi casillero con algunos golpes de parte de los alumnos que caminaban o corrían en los pasillos, al encontrar mi casillero abrí este y saque mi libro y mi libreta para la clase de historia cerré mi casillero para darme la vuelta e ir hacia la aula de historia. Llegando ya a mi clase entré y me senté en una mesa blanca para dos, agarre la mesa de hasta el fondo juntó a la ventana, abrí mi libreta y mientras empezaban a llegar los demás y el profesor, ibá a dibujar, que cosa nose, pero algo se me iba de ocurrir.

- Hola - Dijo una amigable voz masculina - ¿M-me puedo sentar aquí ? - Tartamudeo, yo solo pude hacer una pequeña sonrisa de lado y asenti. De seguro era nuevo.

Volví a mi dibujo y a la vez pensando en ese chico que estaba a lado mío, era guapo y para mi, decir que alguien esta guapo es mucho, por que no acostumbro a decir esa palabra a cualquiera. Era alto, de pelo negro lacio, piel pálida, unos ojos color azules muy claros, labios color rosa y una sonrisa que le quedaba a la perfección <<Wow>> pensé. Lo mire por el rabillo del ojo y al parecer se dio cuenta.

- Soy Chris, mucho gusto - Sonrió enseñando cada uno de sus dientes. Me mentalizaba para no hacer algo torpe.

- Soy ______ igualmente - Dije de la misma manera

- ¿______?- Asentí - Que bonito nombre.

Por un momento pensé que eso lo pensé yo pero no, el fue, me sentía muy emocionada y raramente feliz y no sabía por que, esos sentimientos en mi no eran muy comunes de hecho creo que nunca los sentí y cuando una vez los sentí me arrepentí de haberlos sentido me sentía muy tonta y creo que esta no va a hacer la excepción si no lo había hecho esta no iba a hacer la primera... digo segunda vez, así que iba a seguir mi camino y él el suyo y mi rutina iba a hacer la de siempre. Listo.

- Gracias - Sonreí - Tu... ¿Eres nuevo verdad?

Soltó una leve carcajada - Si, se nota tanto - Dijo sonriendo.

- M...Mmm a decir verdad no tanto - Trataba de no sonrojarme por que me miraba muy detalladamente lo podía sentir.

El profesor Edwin llegó y juntó a él, el silencio, y todos empezaron a agarrar su lugar.

- Buenos días jóvenes en este transcurso vamos a retomar la Segunda Guerra Mundial - Dijo el profesor con una sonrisa, indicando el comienzo de un nuevo año de escuela.

Mientras transcurría el tiempo en el aula me la pasaba viendo la ventana y distraerme con los árboles, los pájaros, mariposas, ardillas, las personas que pasaban por ese rumbo y el cielo, me gustaba como el sol salía por las nubes indicando el día y la luz, estaba fascinada con el ambiente de afuera mientras yo estaba en un cuarto de cuatro paredes y un maestro que solía aburrir la clase.