Todo comenzó un día que fui a visitarte a tu trabajo, habíamos discutido anteriormente y yo fui ese día con la esperanza de que me perdonaras, gran fue mi sorpresa que al llegar todos tus empleados me veían con pena, al principio pensé que estaban locos pero al abrir la puerta sin tocar encontré el motivo.
Debí haberlo imaginado o tal vez ya lo sabia solo que no me atrevía a aceptarlo.
Tus cambios de humor, tus llegadas tarde, tus faltas de afecto, ya no me tocabas y todo se debía a que había alguien más en tu vida.
Por eso no dejabas tu celular sin desbloquear, tampoco dejabas que te fuera a ver a tu trabajo, por eso tus empleados me veían con lastima.
¿Me dolió? Si, si me dolió que me engañaras tu sabias como mi madre sufrió porque mi padre la engañaba y yo no quería pasar por lo mismo.
Ese día cuando te vi, debí haber echo algún sonido porque en ese momento dejaste de besar a ese chico y al fin me viste.
Tu cara se puso palida, no sabias que hacer o decir, así que simplemente te dije que terminaras lo que estabas haciendo y fueras a casa.
No paso mucho tiempo de que me fui, cuando ambos ya estábamos ahí, yo estaba tranquilo solo quería saber ¿porque? ¿que hice mal? Y la respuesta llego...
Te enamoraste.
Cuando me dijiste eso sentí mi mundo caer, yo ya me había imaginado una vida a tu lado una en donde nos casabamos y teníamos hijos, por que ese era mi sueño sabes, encontrar a alguien que en verdad me ame que quiera pasar el resto de su vida conmigo, porque aun cuando yo había visto sufrir a mama por mi padre me aferraba a la esperanza de encontrar el amor, pero parece que tu no eres esa persona.
Lloraste y me suplicaste que te perdonara que yo no había hecho nada malo que era un hombre increible, que merecía estar con la persona correcta pero que lastimosamente esa persona no eras tu.
Sabes no te culpo, uno no elige de quien enamorarse solo que me hubiera gustado que en lugar de enterarme así hubieras mejor hablado conmigo yo lo hubiese entendido, pero tenias miedo, no sabias como decírmelo.
Aun recuerdo tu mirada llena de de vergüenza porque en el fondo sabias que el que cometió tal falta fuiste tu, y aunque te perdone yo sabia que lo mejor era alejarnos uno del otro.
El destino tenia otros planes para nosotros unos muy diferentes.
Luego de 4 años de relación, terminamos cada quien tomo su camino.
(....)
Tiempo después compre un pequeño departamento, cambie de trabajo, todo para una nueva vida aun no cerraba las puertas al amor aun tenia esperanza de encontrar a alguien para mi.