Nunca te ha pasado que estas acostado en tu cama y no puedes dormirte? que no sabes la razón pero simplemente no puedes dormir, tienes sueño pero tus ojos no se cierran. En este momento piensas que pasa y miras alrededor hasta que te de sueño, sin embargo no lo consigues y piensas en ir al baño o a buscar algo de beber a la cocina. Cuando te levantas de tu cama ya te sientes desprotegido pero no ves atrás, y vas hacia la cocina, mirando para todos lados simulándolo para que nadie crea que miras con temor, aun cuando sabes que nadie te ve, lo haces con disimulo. Cuando estás en la cocina piensas que no sirvió de nada estar en ese lugar y vuelves tranquilamente, o eso esperas.
Eso no le paso a Jake, el solía tener insomnio por las noches y ese fue uno de sus grandes errores. La noche que lo vimos nos había contado unos hechos aterradores pero difíciles de creer, por un principio creímos que nos estaba tratando de gastar una broma algo pesada, pero el terror en sus ojos decía lo contrario. Nos había relatado con lujo de detalles que había pasado.
Estaba acostado en su cama y ya era tarde por la noche, como tenia insomnio solía quedarse con el celular hasta que le llegue el sueño. Unas extrañas ganas de levantarse e irse a la cocina lo movieron, el fue y un segundo antes de levantarse, una corriente de aire helada le paso por el cuerpo entero. Sin darle importancia Jake siguió su camino. La cocina no estaba lejos de su habitación, sin embargo, el camino se hizo casi infinito. La tensión seguía en aumento y la sensación extraña de escalofríos no cesaba, hasta el momento que llego a la cocina y pensó que necesitaba irse a dormir para olvidar todo y descansar por fin. Al tomarse un vaso de agua y guardar la botella, Jake pensó que ya todo había terminado, nunca se imaginaria que apenas comenzaba.
Al momento de retomar su camino hacia su habitación Jake empezó a oír débiles voces extrañas a su alrededor, pero por el cansancio y el estrés que tenia no les dio importancia. Antes de llegar a su cuarto Jake se freno en seco, como si hubiera visto algo aterrador, sin embargo no había nada, sin saber porque se dio vuelta y había visto una figura encapuchada negra que se le abalanzo y atravesó sin hacerle nada más que un gran susto. De un grito Jake se despertó, pensando que estaba en su cama, intento quitarse las sabanas, el no estaba en su cama, estaba tirado en el suelo, la figura que había visto no fue un mal sueño. Rápidamente se incorporo si se extraño de que sus padres no lo hayan oído con el grito que había hecho, fue de un rápido movimiento a verlos. Desde la puerta de su habitación podía verlos dormir plácidamente, estaba obscuro y no podía verlos bien, pero sabía que estaban ahí, suspirando y tranquilizándose volvió a su cuarto. Se freno en la puerta y pensó que si llegaba a su cama estaría a salvo y podría dormirse, lo intento y con gran velocidad fue hasta su cama, salto hacia ella y se tapo hasta la nariz y cerró los ojos.
Ya relajado pensó en que su sufrimiento había llegado a su fin. Hasta que escucho una voz horrible y parecía familiar, la voz provenía por debajo de su cama y decía: “crees que haberte acostado en tu cama te salvara de mi” en ese momento sintió que las sabanas empezaban a atarle el cuerpo tratando de inmovilizarlo. Jake logro zafarse de esa tortura y enseguida fue con sus padres y llamándolos entre lagrimas, los padres yacían en sus camas con agujeros donde sus corazones. El chico ya sin poder creerlo se voltio ferozmente y allí se encontraba la figura encapuchada, monstruosa, sin más que un débil grito Jake cayó al suelo desmallado.
Al día siguiente se había despertado, bruscamente se paro y se fijo alrededor, lo único que vio fue su habitación hecha un desastre, lo que era raro, el recordaba haberse desmallado en la de sus padres. Mientras él seguía en shock su padre entro al cuarto y regaño a Jake por tener todo desordenado. El chico entre lágrimas lo abrazo y le dijo que creía que había muerto, el padre riéndose le dice que se calle y que ordene su cuarto. Feliz empieza a acomodar cada una de las cosas que estaban fuera de lugar y encuentra una nota en el suelo: “más vale que hallas aprendido, el insomnio no es tu amigo, y la próxima vez que creas que soy solo un cuento infantil, volveré por ti y por todos los que creen eso, y los llevare al verdadero infierno”.
