Capítulo 60

10 1 0
                                    


Me detengo frente a una banca y me dejó caer sobre ella, se que soy un blanco facil y me parece bien, Ferrami me debe de estar buscando con todos sus hombres pero si es asi me sorprende no haber visto a nadie en las últimas horas.

Reclino la cabeza hacia atrás viendo el amarillo sol, rodeado de cielo azul, es un día muy bonito para tanta oscuridad que me está atrapando.

Suspiro fatigado, las manos aún me arden por la explosión en el barco, y hay reastros de la sangre de Tomm en mis uñas y tambien la del capitan Kord. Me duele el pecho por la bala que me propinó Shenoby, dos de mis colegas ya están muertos pero ambos murieron siendo héroes, eso me consoñara siempre, los muertos son héroes, los vivos fracasados.

Mentí con respecto a que sabía donde estaría Mercia, no se donde esta, nisiquiera se si ya abandonó el país, tampoco se donde está Ferrami, pero algo me dice que el se pondrá muy ponto en contacto conmigo.

Doy un respingo cuando siento mi celular sonar, lo busco entre las cosas del bolso pero luego recuerdo que lo tengo en el bolcillo del pantalón, quedo perplejo al ver de quien es la llamada.

¿¿¿Tomm???

Las manos me tiemblan, trago saliva aún teniendo la garganta seca, Innalo profundo recordando que Tomm no tenía su celular cuando murió, tal vez alguien lo encontró y quiere devolverlo. Desculego la llamada.

-Hola, Alex, ¿eres tu?- Pregunta una voz masculina y ronca.

-¿Quien pregunta?- Respondo de manera dura, oigo una sonora carcajada detrás de la línea.

-Cuando Rubén me dijo que estabas metido en todo esto te juro que no pude creerlo, ¿el mariquita se cree hombre ahora?- Abro los ojos como plato al oír esa jerga y un nudo en la garganta se cierra con fuerza.

-¿Quien diablos eres?- Pregunto lleno de rencor.

-Soy Robert, me encontré este teléfono en la empresa- <<ahora entiendo porque me llama del celular de Tomm>>- me dijeron que tienes algo valioso para el jefe y lo quiere de vuelta.

Mierda, mis sospechas son ciertas, el bastardo de Robert si está involucrado en toda esta masa enorme de porquería.

-Muerda, de todas las porqueias del mundo tenías que estar tu también en esto- El ríe.

-No estoy para juego.

-¿Y si no se lo soy? ¿Y si lo hago público?

-No, No, No, sería mala idea, se un niño bueno y traerlo por las buenas,  será como un intercambio amistoso, verlo de esa forma.

-¿Intercambio, a que te refieres?-Comienzo a asustarme.

-Tengo algo que quieres, si te lo digo no me dirás que no, te lo apuesto.

-Vete a la mierda hijo de puta, ya estoy harto de jugar.

-Espera, te envio evidencia, como para que vayas entendiendo del trueque que te hablo- Corta la llamada.

Me quedo viendo la pantalla como idiota a la vez que us sudor helado recorre toda mi frente, las manos me tiembra y mis pulsaciones aumentan poco a poco.

Al segundo me llega un mensaje, lo abro con impaciencia y al mometo el mundo se me cae a pedazo al ver la foto, caigo de rodillas en el césped con el corazón destrozado.

-¡No, no, no, no!- Comienzo a alterarme.

La llamada vuelve a entrar y en el primer segundo atiendo.

-!Hijo de puta, llegas a tocarle un sólo cabello y juro que te voy a despellejar vivo¡- Le grito al aparato.

-Trnqquilizate niño- Dice Robert -¿Es un trato? nos das lo que quiere el jefe y yo te la devuelvo viva- El ríe.

La venganza de Alex [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora