Ganas o Mueres I - [S.M.] ✓

Capítulo 3

3 |† Van a perder †

—¿Cuál princesa Alisson?.— Dijo la señora Daniela aún más entusiasmada que antes.

—Este.— Apunté hacia un vestido de color azul oscuro, con pequeñas piedras brillantes, y en la parte del escote sobresalía un poco.

—¿Esta segura que ese es el vestido que quiere princesa Alisson?

—Sí, mi padre ha dicho que quería que usara algo elegante y formal, y este vestido es muy elegante.

—No me convence mucho princesa Alisson.

Me giré hacia donde la señora Daniela estaba. —Ya le dije que no me gusta que me diga Princesa Alisson. Sólo dígame Alisson—.

—Lo siento tanto princ....— Detuvo su oración. —Niña Alisson.— Continuó.

—Así está mejor._ Dije al mismo tiempo en el que me acercaba a ella y le daba un gran abrazo.

—¡Ay mi niña!.

—Señora Daniela muchas gracias por estar aquí conmigo, de verdad aprecio todo lo que usted hace por mí.— Mis palabras salían llenas de amor y honestidad.

-No tiene nada que agradecer Alisson, lo hago con cariño.— Me respondió mientras me respondía el abrazo.

Luego de estar unos minutos abrazadas, decidimos separarnos, las personas comenzarían a llegar al local.

Y ni yo ni la señora Daniela queríamos lidiar con tanto abucheo y prostestas hacia nosotras.

Como lo dije antes, mi padre no es el mejor rey de Inglaterra.

—¿Y bien niña Alisson? ¿Se llevará ese vestido? O ¿Elegirá otro?.

—Me llevaré ese vestido ya lo he decidido.

—Perdone que insista niña Alisson, pero ese vestido es muy destapado, siento que al rey Demián no le gustará para nada que usted salga con un vestido tan destapado de la parte del pecho.

—Señora Daniela, mi padre en lo último que se fijaría sería en sí el vestido está muy descubierto o no.

—Pero niña Alisson...

Interrumpí a la señora Daniela, yo la considero como mi segunda madre, y claro que me gusta recibir opiniones y críticas de su parte, pero esta vez no quisiera hacerle mucho caso a sus comentarios.

—Señora Daniela de verdad que me encanta escuchar sus críticas y sus opiniones, pero esta vez no le haré caso, ya decidí que ese es el vestido que quiero ponerme mañana por la noche.

—Está bien niña Alisson.

Sonreí satisfecha, y nos dirigimos hasta uno de los pocos mostradores, para después pedir aquel vestido y probarmelo.

La chica que nos estaba atendiendo no tardó mucho en regresar con el vestido.

En cuanto me lo entregó, tomé de la mano a la señora Daniela y la hice caminar hasta uno de los vestidores.

Comencé a quitarme mi ropa, para luego ponerme el vestido, al principio tuve un poco de dificultad al ponerlo.

—¿Está lista para verme señora Daniela?.

—Claro que si niña.

Ya no dije nada, y recorrí lentamente la cortina del vestidor.

—¡Wow! Se ve preciosa niña Alisson.

—¿De verdad?.

—Claro que si niña Alisson, yo jamás le diría una mentira.

Me acerqué a un espejo, y me sorprendí un poco, realmente me quedaba muy bien el vestido.