Acambio De Que?

cap 10 las 3:15 pm

La mire feliz. La encontré, sabía que algo así pasaría, dejarla sola no era opción. Pero hay algo que me intriga ...

Nunca habías estrado en celo nunca — dije cerca para que me escuchará aún susurrando. Ella se queda callada; entonces es un si?

Salgamos de aquí — contesto con algo de desapego; todavía,me involucra y me ignora!?

Valla, valla que tenemos aquí? — escuché sorprendida; mansita sea, nos encontraron. Me puse enfrente de mei es a ella ala que quieren.

Yuzu, quien más? — mironeo por todas partes — no hay nadie más!

Nadie mas? — voltee, se había ido; mei no!

Yuzu que haces aquí, sola? — pregunto acercándose, paso a paso hacia mi.

Qué más leyendo, una amiga del consejo me pidió unas carpetas que aún sigo buscando y tú — tragatelo imbécil y vete de paso.....

No sé si lo sentiste pero hay un olor particular en el área  ..

Hay! No creo sabes yo no lo sentí y es que estoy aquí metida ¿No es cosa tuya?

HEY! LA ENCONTRE !!!! — grito alertando a la tipa que tenía enfrente. Corrió y yo la seguí deprisa; mei!

O por dios — dijo llegando al lugar — aihara mei! Presidenta ! — inalo contenta — niña con ganas — se acercó a ella desabrochandose la camisa — te la quitare yo — miró a sus amigas — de porque no igual ellas.

Entonces camine interfiriendo entre ella y mei.

No lo creo amiga

Deimediato su rostro cambio, sus ojos cambiaron de color a rojo y sonrió desquisiada — yo la encontré primero, yo la marco primero — corrió tratando de darme un golpe pero pude esquivarlo.

Mei corre!! — tomé a otra de ellas y empese a golpear al azar a todo el mundo. Ella lo intento pero otra de ellas la detuvo. Me golpearon con fuerza la rodia, no pude moverme del suelo, después de eso todas se tiraban salvajes a mei.

Narra mei

Amor esto no te va a doler — rompió mi blusa de solo un tiron. Todas reian, tirando de tener una parte de mi para sadifacerse; lo peor es que algo en mi deseaba que se agrampen en mi y me agan suya.
Yuzu!. Pero otra parte la llama a ella; ayúdame yuzu. No escucharla me desespera, me besaban, mi cuerpo contra mi voluntad, cedía a su abuso era el fin.

Oigan dejen un poco — escuché era ella; yuzu?. Todas pararon y la miraron.

No ella es mía — decía aquella. Pero yuzu se acercó y me todo con fuerza, aún en contra de todas.

Ya no más — me miro, acercándose con rapidez a mi cuello, mordiéndome con fuerza