Rareza Imperial

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Cayeron los fragmentos de alas rotas en el suelo, y presencie sus brazos ensangrentados, y sólo fue un puñetazo del Capitán Eloi Arsen.
Tiene una fuerza feroz, no puede decirse lo contrario, él es un Eloi.

Los Eloies son los gobernantes de un lugar según sus cualidades, él todavía no estaba posicionado en uno de los reinos como gobernador, sin embargo el gran ÉL le dijo que sobre sus hombros estaría la gobernativa de un reino. Arsen es fuerte y tiene un estilo de pelea salvaje. Es capitán de los vigilantes, y próximo Eloi.

Pero es muy orgulloso por ser de la raza angelical pura, ser un querubín de alto rango y saber que será Eloi activo algún día. Y cree que los legnas son inferiores al retar al capitán legna Anker y salir victorioso por rendición no forzada. Sólo le pegó tres veces en el rostro y Anker se rindió, sin ponerle caso y sin querer combatir. Los Legnas son entes de paz entre ellos mismo pelean, sólo con enemigos nunca con aliados y es mejor no tenerlos de enemigos.

Pero eso no fue nada en comparación con lo que sucedió con Érebo el primer día que Arsen lo vio por primera vez, aquel día les fueron a entregar los mensajes e informes de actualización de redes enemigas al Vigilante Magno del Cuarto reino Aethos, Estaba el Comandante de las fuerzas Legnas Alexandriu junto a Érebo, al llegar a la Torre Magna estaba en la puerta del Vigilante, Arsen...

(Arsen)- ¿Que desean Legnas?

-Llevaremos los últimos detalles de las líneas enemigas al Cuarto Magno de los vigilantes. (Dijo Alexandriu)

(Arsen)-Ehh, ok puedes pasar, sin embargo... tu compañero no.
Debido a que no le veo las alas. Es una insolencia presentarse ante el Magno de esa forma, extiende tus alas Legnas.

(Alexandriu)-¿No sabes con quien hablas cier...?

Érebo levantó el índice de la mano izquierda para que Alexandriu calle.

(Érebo)-Érebo, legna del valle del este, no tengo a disposición alas en este instante, me podría conceder el paso si fuere tan amable, Eloi.

(Asen)-¿Como sa...?, ¿Donde esta tu...?

Rápidamente en cuestión de segundos Arsen tenía a Érebo del cuello, estrellado a una pared que estaba a 4 metros de distancia, con la espada en la mano derecha a punto de usarla.

(Arsen)-Ni siquiera un Noms sería tan estúpido de subir aquí sin un arma, ¿y tu arma legna?.

(Alexandriu)-¡¡¡FUE CREADO SIN ARMA!!!, no hagas una estupidez.

Arsen al escuchar eso golpeó a Érebo decena de veces sin piedad. Y lo dejó en el suelo. Le piso la cabeza y le dijo.

(Arsen)-Da gracias que tu amigo esta contigo, lo he visto en varias batallas, y entregando algunos reportes. (y lo escupió)

Y como no se quien eres, si tienes las alas suficientes para contraatacar, me daré la vuelta y me iré dándote ventaja...pffff... Es cierto no tienes, escoria rara.

Tu, entrega el reporte, cuando regreses recoje al sin alas y te lo llevas, hasta entonces, no. (Y puso un muró de energía a su alrededor, que se iría sólo cuando Alexandriu vaya a hacer el reporte).
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--¿que haz hecho?(gritó Edras espantado)

El Capitán Arsen quedó impresionado de que tenía dos rasguños en la mejilla derecha.

El Capitán Arsen quedó impresionado de que tenía dos rasguños en la mejilla derecha

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AQUERONTE: Memorias del vigilante enojado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora