Cuatro amigas: Cassie, Verónica, Emma y Lucía, tenían un deseo que era ir de viaje juntas el resto de su vida cuanto tuvieras máxima edad para hacer lo que quisieran. No sabían el lugar, ni tampoco lo que harían pero tenían claro que haciéndolo iban a disfrutar como si fuera el único día de sus vidas y el mejor de la historia. Empezaron decidiendo a dónde ir, no se decantaron y Verónica comentó sobre ir a un grupo de gente y probar a ver qué tal, nadie opinó nada sobre eso y se lo pensaron. Al cabo de un rato las cuatro dijeron que no les parecía mal y de hecho querían probar y así fue. Pasaron dos semanas juntas en casa de Emma decidiendo lo que iban a llevar el día que se fueran, el equipaje y cada una inventó una historia de cómo creían que sería.
Cassie tenía ese único pensamiento de que allí conocería a alguien que le haría cambiar de opiniones y adentrarse más en el mundo sin tanta tontería.
Verónica pensaba que irían a una comunidad de gente en la que todos estaban desnudos, digamos que ella se lo imaginaba así pero para nada sería tal. Pensaréis que estaba salida y que lo único que le importaba eran los tíos desnudos, tal vez por eso tenía tanto interés en ir.
Emma pensaba que compartiría su alma con varias personas y que le gustaría investigar sobre otras cosas, lo cual les hizo dudar porque no sabían muy bien a lo que se refería pero nos lo imaginamos. Le habría gustado conocer a alguien, supongo que todas conocerían a alguien fuera o no especial que les haría sentir ciertas cosas importantes en sí.
Lucía no tenía una idea centrada de lo que podría haber o hacer allí, nunca había oído hablar de una comunidad en la que se hicieran cosas y en la que probablemente se compartiera, experimentara, etc. No tenía ni idea y era la más intrigada. Suponía que se lo iba a pasar genial y por eso tendría tantas ganas en ir.
Cuando llegó el día de ir estaban todas atacas de los nervios, pero en gran parte siempre con una sonrisa en la cara y queriendo que llegara el momento. Empezaron a comentar:
—Tengo un cierto presentimiento de que todo va a salir bien, estar tranquilas. No es para tanto, ya lo veréis. Venga, animaros chicas—Comentó Cassie mientras sonreía.
—-Tienes razón Cassie, pero si por alguna casualidad ¿hay alguien en el la comunidad que sea un violador, qué eh, qué?—A lo que Verónica contestó con ironía.
—Si va la gente allí será porque no hay violadores, ¿no crees? Y deja las paranoias a un lado, céntrate en que todo estará bien, ya lo sabes—Rió por lo que comentó sobre el supuesto violador.
— Bueno anda te haré caso solo porque eres tú eh—
Las demás estaban durmiendo por el viaje, llevaban ciertas horas allí ya.
—¡Ya hemos llegado!— Grita Cassie con todas sus fuerzas.