Los años pasan, la gente cambia

Qué estás haciendo Santana?

Al día siguiente Santana se encontraba en el trabajo, estaba algo nerviosa ahora el mensaje que había enviado la noche anterior le pasaba factura, no sabía que iba  a hacer ni porque envió ese mensaje

Debía ir o no era la gran pregunta que le rondaba la cabeza.

No seas cobarde Santana  ya le prometiste que irías ahora cumple tu palabra, decía dándose valor, además sólo será un par de veces para olvidar a Tiffany, nada más así que corazón no te vayas a entusiasmar –repetía- 

La  jornada de trabajo había terminado y la morena estaba en pánico, se encontraba sentada en la oficina mirando unos papeles como si en ellos buscara la respuesta a sus dudas.

Q: que pasó San? –preguntó un poco temerosa-

S: no se si ir o no Quinn, no sé qué hacer  -decía nerviosa por teléfono-

Q: Santana tienes que ir no puedes hacerte para atrás

S: pero y si no puedo 

Q: entonces no debiste haberle dicho nada, Santana escúchame nunca has sido cobarde no vas a serlo ahora y menos con Brittany 

S: está bien tienes razón gracias Quinn –dijo colgando-

La morena salió camino a la academia de Brittany iba reflexionando y pensando en cómo se comportaría con Brittany, era la primera vez que estaría a solas de nuevo con la rubia y esta vez seria en plan amable, justo antes de llegar a la academia por la rubia recordó a Tiffany, en ese momento se dispuso  a llamarla, intentó varias veces  pero nadie contestó.

B: hola San si viniste –dijo emocionada abrazándola-

S: Si Brittany ya quedamos no? –dijo algo tímida-

B: y que hacemos San? 

S: vamos por un café quieres? 

B: claro que si San,  vamos

S: a cuál quieres ir? –dijo entrando en el coche-

B: no lo sé soy  nueva en esta ciudad recuerdas? Desde que llegué no he salido a conocer la ciudad, así que elige tú  -dijo sentándose en el asiento del copiloto-

S: esta bien ya sé  a donde te llevaré –dijo arrancando el auto-

Luego de varios minutos de manejar y de no cruzar una sola palabra, llegaron al lugar que Santana había escogido.

B: es por aquí?

S: sí Brittany sígueme es por aquí, de seguro te va a gustar 

B: es ese? –preguntó emocionada-

S: si Brittany es ese, allí vamos a tomar el café hoy –decía señalando el Café des Artistes-

B: es genial Santana –decía dando saltitos, cosa que hizo recordar a la morena de su época de amor de secundaria-

S: entremos –dijo abriendo la puerta-

Las chicas pidieron una café y por primera vez pudieron ponerse a conversar.

B: San es hermoso, me encantan las flores y lo romántico del lugar –dijo regalándole una sonrisa-

S: esa es la idea Brittany que te haya gustado

B: nunca  vas a dejarme de llamarme por mi nombre completo?

S: lo siento no lo hago con intención es sólo la costumbre

B: no importa, sé que me dirás como antes cuando tú corazón en verdad lo sienta 

S: y que tal te fue hoy?

B: muy bien San, casi se me fue volando el día solo esperaba que las horas pasaran para poder estar contigo, aunque no sabía si ibas a venir o no? 

S: jamás te dejaría plantada Brittany, ya sabes cuando digo algo lo cumplo –dijo bebiendo un sorbo de café-

B: sí lo sé 

S: cuéntame cómo es que conseguiste trabajo aquí

B: bueno pues mi papá me recomendó en la academia y pues luego de varias audiciones 
pude obtener el trabajo de profesora –dijo triunfante-

S: y no lo dudaste ni un momento? Digo porque supongo que ya tenías una vida hecha

B: no San no lo dude ni un segundo, allá no tenía nada, mi vida esta acá, acá empezaré a escribir nuevamente mi historia –dijo mirándola fijamente-

Las preguntas iban y venían, varios cafés pasaron por su mesa, se regalaron muchas sonrisas, miradas cómplices  y uno que otro coqueteo, el tiempo pasó volando cuando Santana se pudo dar cuenta, era ya muy tarde en la noche y mañana tendrían trabajo.

B: es muy tarde San, tenemos que irnos ya –dijo provocando que la morena se sonrojara-

S: claro, claro, vamos –dijo apresurada, no quería que la rubia se diera cuenta que a su lado se le había ido el tiempo volando-

Tras varios minutos de conducir, la morena llegó a  casa de Rachel y  Kurt  que era donde se estaba quedando la rubia, Rachel había podido reconocer el auto de Santana desde su ventana así que rápidamente tomó el ascensor y bajo al encuentro de estas.

R: Brittany, donde has estado? Estábamos muy preocupados por ti

S: Rachel no te preocupes ha estado conmigo, no hay de qué preocuparse –dijo excusándose-

R: Santana –gritó- así que sí eras tú, que estabas haciendo con Brittany

B: Rachel sólo fuimos por un café, no te alteres tanto –dijo ya algo molesta la rubia-

S: bueno pues yo me voy

B: adiós San –dijo dándole un beso en la mejilla cargado de añoranza cosa que la latina se pudo dar cuenta al instante-

R: Brittany puedes seguir subiendo, Kurt estaba muy preocupado, tengo algo que decirle a Santana –dijo acercándose a la latina-

S: ahora que quieres Rach –dijo ya resignada-

R: se puede saber que estabas haciendo tú con Brittany –dijo molesta-

S: fuimos por un café Rach, nada más sólo un café 

R: Santana así de rápido olvidaste a Tiffany, tú amor eterno sólo duró pocos días y una noche de fiesta? 

S: ahora  veo –dijo riendo-

R:  no veo que te causa tanta gracias Santana, sólo esperaste que ella llegará para olvidarla, Santana Tiffany debe estar por allí destruyéndose la vida sin ti y tú estás aquí de lo más feliz con Brit –dijo con rabia en sus palabras-

S: no es lo que piensas Rach de verdad –dijo con la mirada perdida- Brittany es un capítulo cerrado en mi vida en cambio Tiffany es mi presente y mi futuro, la estoy buscando Rach pero no la encuentro y si hoy salí con Brittany es porque Quinn me lo planteó y es una distracción, pero entiéndelo Rach ya no es amor –sentenció-

R: eso espero Santana  -dijo despidiéndose y entrando en su edificio-

En el camino a casa Santana iba pensando en cada palabra que le dijo a la castaña, sabía que una parte era mentira y otra parte era real, amaba a Tiffany y la estaba buscando era verdad además estaba segura que era a ella a quién veía en su futuro, pero que salió con Brittany sólo porque Quinn se lo planteó era una total  mentira , había salido con ella porque así lo había decidido, ella sola.

Sólo serás una distracción Brittany, nada más, tú la sacaste de mi vida y ahora tú te encargaras de hacer que la olvide hasta que vuelva decía Santana muy segura.
Una vez que llegó a casa Quinn se había quedado dormida  junto a Jimmy, así que no pudo contarle nada de lo que había pasado y se quedó con todas las dudas para ella sola.
Varios días habían transcurrido y Santana había salido un par de veces más con Brittany, a 
veces por un café y otras simplemente para conversar en el auto, Santana llamaba a Tiffany pero no contestaba así que se había refugiado en la rubia.

Q: hola San como estas?

S: con mucho trabajo Quinn ya son casi las 6 y no termino aún –decía alzando la mirada-

Q: y esas flores –dijo sonriente –

S: son de Brittany 

Q: San estas no están en la basura 

S: ah si –dijo totalmente sonrojada, esas flores no estaban en la basura como lo hacía siempre-

Q: podrás acompañarme a  ver a Jimmy

S: claro que sí, por cierto donde lo has dejado

Q: se ha ido con Paul, mientras yo encontraba una buena escuela para el –dijo tomando asiento-

B: hola Sany –dijo entrando sin avisar-

S: hey Brittany como estas –dijo sonriente parándose para saludarla-

Q: hola Britt como estas

B:bien Quinn he venido por Sany, pero si están ocupadas puedo volver otro día 

S: para nada solo estaba  terminando estos papeles 

Q: claro que no Britt sólo he venido de pasada, yo ya  me iba –dijo mirando la entusiasta 
mirada que la morena le dedicaba a Brittany-

S: no vemos en casa Quinn

Q: claro que si San, pásenlo bien chicas –dijo saliendo de la oficina de la morena-

Luego de unos pocos minutos en los que la morena recogía los documentos, pudieron salir de aquel edificio.

B: te he traído esto Sany –dijo entregándole un pequeño chocolate en forma de corazón-

S: esta hermoso Brittany –dijo dándole en beso en la mejilla, cosa que derritió a la rubia-

B: esta noche seré yo la que te lleve a un lugar –dijo la rubia- así que dame tus llaves Sany –dijo extendiendo su mano-

S: esta bien, como la señorita diga –dijo embobada por la rubia dándole las llaves-

Se subieron al auto y salieron en busca de su destino, la rubia manejó por cerca de media hora mientras que la morena reconocía aquel lugar, estaba segura que ya había estado allí, cuando de repente pudo reconocer el viejo y apartado restaurante al que la rubia la había llevado cuando supuestamente la secuestro.

B: hemos llegado Sany –dijo bajando sonriente del auto-

S:si ya veo –dijo algo apenada, ya que la última vez que había estado allí no se había portado muy bien con la rubia-

B: entremos  -dijo ofreciéndole su mano a la latina- espero que esta vez sea diferente a la última vez que estuvimos aquí –dijo provocando que la morena se sonroja- 

S: no lo dudes Brittany –dijo tomando su mano para entrar-

B: sigue Sany –dijo abriendo la puerta como la primera vez-

S: es hermoso Britt, es como la primera vez que estuve aquí, el tiempo parece haberse detenido –decía sonriente mirando el interior del restaurant-

B: es así Sany, todo es como la primera vez, ahora volveremos a vivir aquel momento solo que esta vez será diferente –dijo dejándole un delicado beso en su mano-

S: muy diferente .dijo apenada en baja voz-

B:toma asiento Sany –dijo apartando la silla de la mesa para que pudiera sentarse-

S: gracias 

B: ahora traigo la cena Sany, debemos comerla ahora que aún debe estar caliente, la hice yo misma 

S: y que és? –preguntó desde la mesa-

B: es lasagña

S: mi favorita Brittany, lo recordaste 

B: así es Santana  -dijo sirviéndole el plato- jamás podría olvidar nada de ti

S: esta delicioso –dijo probando la lasagña-

B: gracias ahora descubrí mi nuevo talento, sé que seré una buena esposa Sany, no crees? 

S: claro que sí Britt, ahora cuéntame como que tú lo has hecho –preguntó con la boca llena-

B: he salido temprano del trabajo, las niñas hoy se fueron antes, así que tuve el tiempo suficiente para hacerlo –decía triunfante-

S: y vaya que te ha salido como a los dioses

B: Brindemos Sany –dijo ofreciéndole una copa-

S: por que vamos a brindar? 

B: por nosotras


S: por nosotras –preguntó confundida-

B: si por nosotras y por este momento, porque esto es especial Sany, para mi cada minuto a tu lado es especial y agradezco por poder estar a tu lado

S: salud entonces Brittany!! –dijo chocando su copa con la suya- yo también quiero proponer un brindis –dijo sirviendo el vino-

B: y porque Sany

S: por lo especial de este momento y lo hermoso que es esto a tu lado 

B: salud!!

varias copas de vino tomaron las chicas hasta que la botella se terminó, aquella cena para Santana había sido de lo mejor.

B: la noche está hermosa Sany, vamos afuera –dijo tirando de su mano-

S: vaya que la noche si esta  hermosa –decía mirando el cielo-

B: pero no tan hermosa como tú –dijo mirándola a los ojos mientras estaban fijadas contra el auto de la latina- sabes Sany desde que te fuiste siempre miraba las estrellas en noches como esta, el brillo de esas estrellas solo es comparable al de tus ojos, cuando miraba las estrellas podía recordar claramente tus ojos y creía mirarlos frente a frente otra vez, y eso es lo único que pedía al cielo y ahora que puedo hacerlo veo que tus ojos brillan más y son más hermosos que las estrellas que están allá arriba, definitivamente ellos son la guía en mi camino 

La morena sintió algo en su interior, algo que no quería sentir, algo que había prohibido sentir a su corazón pero que a pesar de todas las sugerencias que le hizo este no las acató, estaba empezando a revivir ese sentimiento que ella creía haber matado

Estaban fijadas al coche sin decir palabras luego de lo que la rubia había dicho, la morena sólo se había limitado a observar la belleza que la noche les ofrecía mientras que Brittany luchó para poder tomar su mano y lo logró, entrelazó sus dedos con los suyos por primera vez luego de 6 años y la latino no se había negado, aunque no volteó su mirada a Brittany.

S: vamos ya –dijo rompiendo la burbuja en la que se encontraban- es muy tarde ya 

B: es verdad Sany -dijo mirando el relog -                

Santana dejó a Brittany en casa de Rachel y Kurt y se marchó con algo diferente en su pecho, algo pequeño pero que estaba renaciendo.

Q:cómo te fue San –preguntó en silencio ya que Jimmy ya se había dormido-

S: muy bien Quinn –decía sonriente-

Q: a donde han ido –decía curiosa-

S: me llevó a un lugar hermoso por segunda vez pero esta vez fue mejor

Q: y ya son novias otra vez 

S: claro que no Quinn –dijo molesta- recuerda que amo a Tiffany y que estoy saliendo con ella para distraerme de la ausencia de ella  -decía poco segura-

Q: Santana en verdad no sientes nada por Brittany

S: nada 

Q: pero eso no es lo que dice tu sonrisa cuando ella te llama o cuando te escribe, ni las miradas embobadas con las que la miras, ni las tantas veces que han salido y vuelves siempre hasta muy tarde 

S: bueno puede que sienta algo pero eso no se iguala a lo que siento por ella –dijo refiriéndose a Tiffany—

Q: Santana otra vez te lo digo tal vez ella no piense volver, ya ves jamás te ha contestado una llamada o respondido un mensaje, eso es una señal no crees

S: tal vez pero mientras ella no me lo diga no voy a olvidarla, solo seguiré distrayéndome con Brittany

Q: distrayéndote con Brittany –dijo molesta- Santana no te engañes si sales con ella es porque quieres estar a su lado, no por distraerte 

S: te equivocas Quinn, Brittany es solo una distracción como ir a patinar o nadar, nada más –dijo marchándose a su cuarto-

La latina estaba rendida, muy cansada  sólo quería descansar, tomo un baño y antes de entrar a la cama prendió su computador tenía que enviar unos documentos  así que decidió no esperar a que amaneciera y enviarlos en ese momento.

Su cara cambió cuando una vez enviado el documento pudo observar en su bandeja de entrada el nombre de quién tanto amaba Tiffany, era una carta de Tiffany.