Y ahí está mirándome detenidamente, sin dejar de criticar cada parte de mi atuendo, mi pálido y sereno reflejo en el espejo. Mis ojos con un poco de lápiz y máscara, y mis labios con un suave tono rosa, perfecto para mi primer día de clase en la Universidad. Llevo puesto un jeans azul y una camisa de tela vaporosa con estampados lilitas, que deja descubiertos mis hombros y cubre mis brazos hasta las muñecas.
A pesar de que el cielo está despejado y con un tono azul estupendo, el airé es lo suficientemente fresco. Durante el camino a la universidad puedo apreciar mi paisaje favorito, se trata del Lago de la ciudad desde el costado Sur y mas ayá bordeando su lado opuesto las montañas del Norte, me resulta fácil dejarme llevar y deleitarme de esa vista todos los días aunque sea solo por unos minutos. En momentos como este me siento contenta de aun no saber manejar el carro, porque de lo contrario me tocaría conducir y no podría disfrutar de esta forma y cada día la belleza de mi amado país.
No soy de las que se intimidan facilmente, sin embargo aunque ya había estado antes aqui no dejo de estar algo nerviosa, el viaje duró menos de cuatro horas y media y yo solo contenia la respirasion por la ansiedada que tenía cuando mi mamá se estaciono cerca de la entrada incitandome a desabrocharme el sinturon de seguridad, y bajar del carro, cosa que hice muy lentamente, mirando a los chicos que ingresaban a la universidad y y deseando poder hacer amigos cuando me volteé a mi mamá ella tenía los ojos vidriosos con un rastro de nostalgia y felicidad.
- Éste es tu primer día, disfrutalo, prestá atencion a todos, no sabes lo orgullosa que me siento de vos- ahora con su voz quebrada- hoy comienza una nueva etapa en tu vida, se libre de ser quien sos si algo no te parece decílo, si alguien se propasa no te dejés y viví este momento con intensidad.- se limpió las lagrimas que comensaban a bajar por sus mejías me acerque a ella y le dí un beso- te quiero- terminé de bajarme del carro y cerré la puerta- pasaré por vos despues de recoger a tus hermanos.
- De acuerdo mamá te veré hasta entonces! - le sonreí y agite mi mano antes de girarme e ingresar a mi alma máter, suena bien decir eso. ok Agustina, concentrate, primero encontrar la facultad de comnicación y luego mi sección.
Después de preguntar a un guardia de seguridad donde quedaba el el edificio de mi facultad me dedique a buscar mi seccion y por ir tratando de leer el mapa que me dieron en secretaría me choqué con un chico más alto que yo, un moreno muy atractivo de ojos azules al que examiné de pie a cabeza traía unos azull, un pantalon de pitillo negro y una camiza de vestir azul, se veía realmente bien
-¿Acaso no te fijás por donde vas? - me dijo mirandome con un gesto irritado sacandome del rumbo que se que llevaban mis pensamientos- deberías tener más cuidado.
yo le fruncí el seño. el me miro impasible por un segundo y luego siguió su camino. En otro momento de mi vida me habría disculpado pero ese idiota ni siquiera me dio tiempo de reaccionar, además ¿quien se cree que es? fijarme yo y él ¿que? si nos chocamos yo no era la unica que iba distraída ¿o sí? En medio de estos pensamientos avanzando a paso lento ya que tenia clase hasta las 8:00 y apenas eran las 7:40 logré llegar a mi aula.
justo cuando yo iba entrando, alguien iba saliendo, nuestros pies se enredaron y me fuí de espalda al suelo y alguien cayó sobré mí, cuando abrí mis ojos habían dos zafíros brillantes frente a mí que me dejaron sin aliento. Mi respiración se aceleró a mil por hora y un escalofrío recorrió mi espalda. pero no aparté la mirada, a parte de que no podía moverme tenía su rostro a menos de cinco centimetros y podía sentir su respiracion, alce una de mis cejas y encontrando mi voz.
- ¿Te gustaría quitarteme de encima?
el abrío los ojos a tope y luego se incorporó con un movimiento muy ágil, yo lo seguí lentamente sacudiendome el cuerpo para quitarme cualquier basurita que se hubiera pegado a mi ropa (cosa que no era posible ya que el piso estaba limpio y bien pulido). para ese momento ya todos los que estaban en el aula se habían acercado y algunos se estaban riendo de lo bonito. Tenía mucha verguensa peró no iba a dejarme humillar por un accidente como este y menos descubríendo que quien me había aplastado hace un minuto no era ni mas ni menos que el mismo chico con el que choqué en el pasillo.
-Perdón, yo no te ví.
- No lo dudo. - respondí sarcástica y retandolo con la mirada
me valoró un par de segundos y cuando iba a decirme algo probablemente mordaz. Llegó el que sería mi maestro de Cátedra I. Debo decir que no era precisamente el prototipo que tenía en mente: un señor mayor con anteojos, un sueter verde y una pansa graciosa, ok quedé traumada con mi profesor de física de la secundaria. Pero cuando un hombre joven vestido elegantemente con zapatillas negras y muy finas, un pantalon de de pinzas negro una camiza azul y una chaqueta negra con lunares de cuero obscuro en los codos entró quede impactada. Era menudo con su cuerpo bien trabajado si dejar de ser evidente en el poco pecho que se miraba ya que tenía desabotonado los dos botones de arriba y dios esos topacios que me veían, su barba crecidad, su naríz fina y esos labios. mmm! simplementre WOW! ¿Desde cuando los profesores son tan buenos?
-Tomen asiento por favor- Dios! además de se super sexy tiene una vos seductora ¿Será que me voy a concentrar en esta clase? uff aquí hace calor.
Tomé asiento en el tercer banco junto a la ventana frente alescritorio del profesor y me disponía a sacar mi agenda, mientras el idiota del pasillo avanzaba hasta al final de la fila
- Cuidado se te caé la basba- me dijo agachandose hasta la altura de mi oreja para que solo yo pudiera escucharlo
-Mientras no sea por ti, no hay nada de que preocuparse - le respondí sin voltear a verlo.
- Mi nombre es Mateo de los Condes. Desde hoy este semestre seré su maestro de Catedrá I. En mi clase exigiré dos cosas: Respeto y Responsabilidad. ¿tienen alguna pregunta? - Ok el tenía toda mi atención en este momento.
-¿Cómo vamos a referirnos a usted?- dijo la morena que estaba detrás de mi.
-Pueden llamarme solo Mateo. - mmm! Eso suena tan caliente. Haber, haber Agustina cocentraté. Me regañe mentalmente mientras prestaba atencion a la presentacion de los que serían mis nuevos compañeros. y en eso era mi turno presentarme. ¡oh Dios! y ahora ¿Qué digo?
- Hola a todos! mi nombre es Agustina de la Zarza, tengo 19 años, vengo de Baza, Granada. y espero llevarme bien con todos - sonreí algo nerviosa al saberme el centro de atension de todos y me sente rápidamente.la morena tras de mi se presento como Rebeca Sofía ribera ahora que la aprecié bien ella podía ser una super modelo con sus cubas perfectas y..
- Mi nombre es Juan Abades, tengo 21 años soy de aquí de barcelona, tengo dos hermanos myores una mujer y un varon y dos pequeñas hemanitas, - se giró hacia mí y alzó una ceja - y no creo llevarme bien con todos. - soltó sin más volteandose a toda la clase para luego sentarse. Yo solo le fruncí el seño. ¿Y a éste qué demonios le pasa? ¿quien puta se cree? que ni sueñe que va a pasar de mí. ¡Ja! y despues de ese estúpido comentario ¡menos!
El profesor comenzó a hablar y no se como pero acabó la clase cuando recogía mis cosas vi con el rabillo del ojo al idiota de juan avanzar hacia la salida y cuando iba pasando a mi lado me dieron ganas de estirarme por completo para desentumirme y levantarme cuando, Ups!
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Escapémosnos!
Novela JuvenilExisten palabras que pueden definir el rumbo de nuestra vida, "hola", "adiós", incluso hay palabras que juntas marcan nuestras vidas "te quiero", "lo siento", "te amo" y también están esas palabras que le dicen a los demás que hemos tomado una decis...