Academia para señoritas

Película

A la mañana siguiente Nora estaba algo deprimida. Todas las demás murmuraba acerca de qué tal vez Logan la había rechazado, y yo sabía que había sido así.

Nora: ¿creen que no escuché sus murmullos todo el día? -salio del baño, después de la cena- vaya señoritas

Ela: lo lamento, por todas -bajo la mirada.

Nora: si tanto quieren saber, Logan y yo no lo hicimos, pero fue porque yo no me sentí preparada -caminó a su cama- así que ya cállense -se tapo hasta la cara.

Ya nadie dijo nada, se fueron quedando dormidas poco a poco, mire por la ventana, Logan no estaba en su cuarto, seguro estaba esperándome, pero ¿Para qué? ¿Tenía algún a clase preparada?

Completamente indecisa y nerviosa fui a su casa, él veía la televisión, estaba tan concentrado, que no me vio entrar.

Tu: hola -brinque en el sofá, él se espantó y luego sonrió.

Logan: tenía miedo de que no vinieras -tomó una de mis manos y la miró, esto era extraño, pero me gustaba.

Tu: dudaba en venir -le solté y gire para acostarme, puse mi cabeza sobre sus piernas, él no paraba de mirarme- ¿Vas a verme así todo el tiempo? -lleve mis manos a mi cara.

Logan: hey -quitó mis manos- ¿No te gusta que te vea? -me levanté

Tu: es raro -él alzó la ceja- Logan...

Logan: ¿Si?

Tu: yo jamás le había dicho a nadie que me gustaba y creo que tampoco le había gustado a nadie

Logan: yo tampoco le había dicho a nadie que me gusta -levante la ceja, el se rió- bueno... jamás de verdad -rodee los ojos con carisma- en serio.

Tu: no me la creo -hice un leve puchero- apenas te conozco

Logan: igual, pero no por eso me gustas menos

Tu: ¿qué te gusta de mi? -me acerque a él.

Logan: todo -sonrió, me acerque más y él me tomo de la cintura.

Tu: en serio -me senté sobre sus piernas.

Logan: ____, yo no soy un romántico... pero si en realidad quieres saber -me rodeo con sus brazos- me gustan tus ojos, tus labios, tu pelo, tus manos -hacía que me sonrojara- tu forma de ser, tu forma de sonreír, la forma en que me miras -sonreí, era realmente lindo lo que decía, parecía irreal- me gusta como besas -se acero y me beso- me gusta la forma en que suena mi nombre cuando sale de tus labios, cada gemido -se rió

Tu: oye -me reí.

Logan: de verdad me gusta -rió leve y pego nuestras frentes

Tu: Yo creo que solo quieres llevarme a la cama -dije en broma, pero podía ser algo real.

Logan: también -sonrió- pero hasta que tú quieras -me miro de forma tierna

Por mucho o poco que me gustara, incluso por lo mucho que tuviera ganas, seguía firme con mi plan, no lo haría con nadie que no ame y que no sea mi esposo.

Estuvimos por un tiempo sin decir nada, con las cabezas demasiado pegadas, con los ojos cerrados.

Tu; ¿Quien eres? -pregunte- no eres el mismo chico que se mudó hace unos semanas -lo mire

Logan: no, no lo soy, igual que tú ya no eres la joven monja que solías ser. -volví a cerrar los ojos.

Me quedé dormida en sus brazos por al menos media hora, el seguía viendo la televisión cuando desperté, me levanté con sueño y Vi la hora, casi la 12.