NINE YEARS (HyunIn)

-Prologo-

La vida de Yang Jeongin no había sido fácil, luego de ser el último en terminar la secundaria de su grupo de amigos, le toco ver de lejos como estos crecían en el mundo universitario gracias a sus buenas notas, mientras el se quedaba muy por detrás debido a su poco rendimiento académico.

De hecho, Jeongin no había tenido siquiera la oportunidad de entrar a la universidad, sus notas estaban tan debajo del promedio que ni siquiera las instituciones con baja categoría aceptaban a un estudiante tan por debajo de la norma.

Y no es que Jeongin fuera tonto, de hecho, él era un chico muy listo, pero la inteligencia no servia de nada cuando este tenía que trabajar duro la mayor parte de su tiempo para mantenerse y mantener a sus abuelos, que debido a su avanzada edad obviamente no podían siquiera salir de su humilde hogar.

Jeongin tampoco tenia padres, estos habían fallecido cuando el chico apenas tenia meses de nacido así que ni siquiera un recuerdo de estos quedaba en su memoria, pero al menos una pequeña y vieja foto de estos sonriendo mientras lo sostenían en sus brazos cuando apenas era un bebe reposaba sobre la pequeña mesa de noche de su habitación.

Pero incluso con una vida difícil Jeongin aún seguía sonriendo, sus abuelos lo habían criado con humildad, con respeto y con amor sobre todas las cosas. Algo que el menor apreciaba y valoraba por sobre todas las cosas.

Jeongin tampoco era un chico muy atlético, de hecho, mientras estuvo en la secundaria solo participo una vez en actividades deportivas y quedo muy por detrás frente a sus amigos más atléticos como Bangchan o Woojin, así que con eso en mente no tuvo muchas esperanzas cuando un día el mayor se apareció frente a su casa ofreciéndole una oportunidad de que se uniera a la policía.

Woojin había sido el primero de sus amigos que había triunfado en la vida, aunque él y el mayor habían crecido juntos en el mismo barrio pobre, una vez que este entro a la universidad rápidamente fue contactado por una gran empresa gracias a sus ideas innovadoras y en poco tiempo logro ser el director de una de las sucursales de la misma que se especializaba en su campo de trabajo.

El menor miro con admiración al mayor y agradeció en silencio que incluso en la riqueza el mayor continuara a su lado, por eso intento no reír cuando este hablo con una sonrisa en su rostro mientras le comentaba como próximamente sería el examen de admisión y que gracias a un contacto de uno de sus jefes podría ayudar a su admisión solo si este presentaba el examen y aprobaba con por lo menos cincuenta puntos.

"Es una oportunidad única de que consigas un buen trabajo y abandones este barrio Jeongin" Dijo el mayor cambiando a un tono mas serio y motivador "Incluso tendrás un seguro de salud para tus abuelos" y entonces el menor se reconsideró todo nuevamente.

El mayor sabía exactamente que sus abuelos eran lo más importante para Jeongin, este vio como el menor perdió su juventud trabajando duro para salir adelante por estos y aunque muchas veces ofreció ayuda el orgullo de su pequeño amigo se negó con una sonrisa, pero ahora era diferente, esta era la oportunidad.

"¿Cuántos días tengo hasta el examen?" Pregunto el menor con algo de duda y el mayor formo una leve sonrisa en sus labios sabiendo que había logrado convencerlo.

"Contando desde este momento, tres días y doce horas" Informo el mayor acercándose de nuevo al auto en el que había llegado y vio como una mirada de pánico se formo en la cara de su contrario "Traje conmigo todo lo que debes estudiar y también te ayudare durante estos tres días"