—Vamos, BaekHyun, tú puedes hacerlo. Solo ve, acércate a ella e invítala a salir.— me decía en mis pensamientos con una sonrisa en mis labios cuando por fin tuve el valor de ir a decírselo. Estaba tan nervioso y con mi sonrisa boba de tan sólo pensar en ella y ver el pequeño osito de peluche que tenía en mis brazos que iba a dárselo como un pequeño obsequio.
Ahí estaba yo, Byun BaekHyun con sus lentes redondos, arreglándose el cabello ondulado castaño con una polera negra y jeans negros, intentando verse lindo ante la chica de sus sueños; Naim. Kim Naim, la chica de la facultad de ciencias económicas que había captado su atención desde que la vio por primera vez sentada en el césped haciendo su tarea. Su cabello largo y castaño y con una sonrisa tan bonita que había hechizado por completo a Byun. Desde allí quiso acercarse a ella para hablarle pero se ponía en seco y solo abandonaba su misión.
Sumido en mis pensamiento, suspiré hondo confiando de que todo iba a salir muy bien, como lo planeado, pero algo doloroso captaron mi atención después que casi daba mi primer paso. Un chico se había acercado primero a ella, abrazándola del cuello y dándole un beso...un beso en sus labios. Mi corazón se oprimió en ese instante al igual que mis labios hacían una presión tan fuerte por las ganas de llorar, aferrándose al osito que tenía en brazos, apretándolo con rabia mientras abandonaba la misión. Me di la vuelta para no ver aquella escena dolorosa. Un chico estaba besando a Naim. Su Naim.
Desde aquel día, él chico castaño solo se limitaba a verla lo más que podía y solo se concentraba en sus estudios. Aunque nada es más fuerte que el amor que sentía el chico de lentes redondos y labios rosados por la chica de sonrisa bonita. En ocasiones, BaekHyun la miraba muchas veces cuándo estaban en la cafetería o cuándo estaba haciendo su tarea en el césped. Solo la miraba de lejos y nunca más quiso acercarse a Naim, por más que le duela.
(☁️)
Viernes por la mañana. Era un día nublado y oscuro Naim se dispuso a alistarse para ir a la U, escuchando después su móvil sonar y contestando la llamada. Era ChanYeol.
-Hola, Channie.- Dijo algo adormilada acomodando su celular entre su hombro y cuello poniéndose rápido los tenis.
-Hola, bebé. ¿Ya estás lista? voy por ti en diez minutos.- Otro adormilado hablaba desde la otra línea. Naim reía al escucharle.
-¿También con sueño, Channie?- Naim contestó entre bostezos.
-Joder si, la fiesta de ayer me dejó drogado por completo.-
-Te dije que no vayamos a la fiesta de JongIn, sabes que un domingo es el peor día para ir a fiestas y peor si el que las organiza es él.- decía mientras preparaba una tostada con café.
-¿Ya vas a empezar, Naim?- su tono era serio al igual que su rostro. -¡Mierda que dolor!- había gritado desde la otra línea el chico.
Naim sabía perfectamente que sufría terribles dolores de cabeza en ese instante, negando para si misma cuando le había advertido de lo de la fiesta un millón de veces. -Ay, es mejor que no vayas hoy a clases, mh.-
-Tengo que. Además el profesor me suspenderá por una semana si no voy. Ya sabes, mis calificaciones son pésimas y tengo que recuperar notas hasta más no poder.-
Él alto se revolvía el cabello con una mueca de desagrado, mientras que Naim solo lo escuchaba preocupada.
-Tienes razón. Ya debes dejar de ser un irresponsable y ocuparte mucho en tus estudios y nada de fiestas, ¿entendido?-
-Lo haré lo haré, mejorare las notas y todo pero tampoco me voy a pasar todo el día clavado en un libro.-
-No siempre tienes que estar así, solo dedicarle un poquito más de tu tiempo a tus tareas y luego a hacer cualquier cosa.-
El alto solo asentía para sí mismo, respondiendo con un Si estoy de acuerdo de mala gana.
Uno de los mejores momentos para ChanYeol es disfrutar tiempo con su novia, ir a discotecas, beber hasta ponerse ebrio y darse placeres que aún no conocía y experimentaba junto a Naim. ChanYeol tenía en claro que ella era un ratón de biblioteca y le dedicaba más tiempo a sus estudios que a su propio novio, eso a él alto le molestaba un poco, pero sabía muy en el fondo que lo ama demasiado y eso no lo iba a discutir. Habían ocasiones que el chico se ponía grosero y muy molesto con ella pero solo es para llamar su atención, que pase los ratos con él y solo con él y que también tiene derecho a divertirse y no estar enfocada en sus tareas. En esa parte Naim era demasiado terca y eso ChanYeol lo sabía en absoluto. El día cuándo se enojó ella por haberla sacado de clases para llevarla consigo a pasar un buen rato y dejándola con su tarea de matemáticas para más después. Naim le había mostrado un carácter bien fuerte, tanto que gritó de rabia y quiso golpear al alto pero él obvio no se dejó.
Si quieren que siga con la historia me dicen.♡♡♡
Les prometo que será bonita.
