Te Encontré...

Tres...

    Aun no sé qué hago aquí, el director solo me ve fijamente, he ignoro el porque me han traído aquí. Froto mis manos sobre mis jeans, me sudan. Tengo muchos nervios. Pero aún no sé de qué.

El silencio se acaba con el sonido de la puerta, alguien quiere pasar.

-Adelante - dice el director sin voltear a ver.

Se abre la puerta, se escuchan un par de pasos, y alguien me toca el hombro. Volteo a ver quién es, y es mi hermano. ¿Qué hace aquí mi hermano?

-Gracias por venir Jacobo, siéntate por favor. Los mande llamar, porque lo que les tengo que decir es delicado. Como ustedes saben, su mamá está delicada de salud. -

Mientras el director buscaba las palabras para decirnos que pasaba, apretaba la mano de mi hermano. Creo que sé que es lo que iba a decir.

-La vecina que vive enfrente, encontró a su mamá tirada cerca del garaje. Llamo de inmediato al 911. La ambulancia llego, pero era demasiado tarde. Llevaba demasiado tiempo ahí tirada, nadie se dio cuenta, y los paramédicos no pudieron hacer nada. Lo lamento, pero su mamá ha fallecido. -

La frase "HA FALLECIDO" retumban a en mi cabeza una y otra vez, baje la mirada. Me negaba a creer que fuera verdad. Si, estaba enferma, pero no para que muriera. Tal vez y los papales que recibí hace dos días del hospital, decían algo importante.

Jacobo se paro de inmediato y dejó caer mi mano, se agarro la cabeza, empezó a gritar. A golpear el escritorio. El director no decía nada. Las lágrimas empezaron a salir, cerraba los ojos y se me venía a la mente la foto de mamá, ella sonriendo. Todo el dolor que siento en este momento, no lo puedo describir. Es un dolor que viene de adentro, del estómago, de las piernas, del corazón, el dolor se extendía por todo mis cuerpo. Me quedé sentada, ahí, como esperando algo, ¿pero no se que? Jacobo seguía llorando, agachado, agarrado de la silla. Yo solo me levante, lo tomé de la mano. El se levantó y nos abrazamos.
Nos abrazamos como nunca, como en mucho tiempo no nos habíamos abrazado.
Un par de minutos después, nos despegamos, el me agarro de la cara, y me miró. Me dio un beso en la frente y nos alejamos.

Voltie a ver al director, se secaba sus lágrimas discretamente, se levantó.

-Lo siento mucho jovenes, yo también se que lo que es perder a una madre a temprana edad, lo que les puedo decir es que sean fuertes, y se apoyen mutuamente. -

-Gracias director. Me quiero ir, quiero estar con ella. -

-Claro que si Deniss, la maestra Ruth los llevara a su casa cuando terminen las clases. -

-¡No!- Exclame - Me quiero ir ahorita, quiero estar con ella, que acaso no entiende. Mi madre acaba de morir, y no estoy con ella. En lugar de estar perdiendo el tiempo aquí con usted. Podríamos estar de camino. -

Saque todo mi enojo y mi dolor con el director. Voltee a ver a jacobo y ya estaba sentado en la silla, recargado en sus piernas. Aún se oia lo que su llanto. Ahora solo somos nosotros dos en el mundo. Ahora estamos solos.

El director tomó su teléfono, y apretó un par de botones. Enseguida se escucho que tocaban a la puerta, es Martha.

Salimos de la oficina del director, tome mi mochila, la había dejado junto a la silla.

El pasillo se me hace aún más largo que cuando llegue. Todo parece tener un silencio abrumador. Solo el timbre para llamar a la última clase. Todo el pasillo estába repleto de gente, por más que veía, no podía reconocer a nadie. Todos se quedaron callados, como si supieran que estaba pasando. Mi hermano y yo venimos escoltados por el director, Martha y la maestra Esther.