No son cálidos, al contrario, los labios de Jimin se sentían fríos y por la rudeza con que aquellos chocaban con los míos intentando recibir una respuesta, parecía como si estuviera besando una pared.
Empujé desesperada con mis manos intentando separarlo, pero él era más fuerte, levanté mi pie, el que aún llevaba un zapato y con todas mis fuerzas le clavé el tacón en el pie, él me soltó y se apartó gruñendo debido al ataque, en cuanto se enderezó y pretendió acercarse de nuevo, lancé un puño hacia su perfecta cara de niño rico. –Él se lo buscó.
–¡Como te atreves! –exclamó él manteniendo la palma de su mano en su mejilla.
–Agradece que no le apunté a tu nariz o ahora mismo estarías sangrando.
–¡Eres una bruta! –me miraba con ira y sonrió retorcidamente– pero claro, que podía esperar de una tipa de tu clase.
–¿De mi clase? ¿A qué te refieres?
–Era de esperarse, las personas de clase baja por lo general resuelven las cosas a golpes debido a la falta de educación.
Hijo de su puta madre... golpe bajo, justo en mis inseguridades y prejuicios, tengo ganas de partirle la cara a golpes y borrar esa retorcida sonrisa, pero no haría más que corroborar lo que él acaba de decir.
–¿Entonces es muy educado besar a alguien a la fuerza? –cuestioné.
–¿Quién dice que fue a la fuerza? –dio un paso hacia mí–. Te gustó, lo sé.
–¿Quieres ser goleado otra vez? ¡No te me acerques!
–Vamos Danbi, es lo que querías. Fingir que estas a nuestro nivel, te hiciste amiga de Avril y Jin, les lavaste el cerebro, pero yo no soy tan manipulable como ellos, puedo ver lo que eres a kilómetros de distancia. ¿Y sabes qué? –levantó sus cejas sonriente–. Hoy es tu día de suerte, puedes ser mi ligue de esta noche.
–¿Ligue? –cuestioné y no pude contener la risa, pronto estaba carcajeando tanto que tuve dificultad para respirar–. Agh... ah mi estómago... –sujeté mi estómago tratando de parar de reír y lo miré fijamente intentando ponerme seria–. Gracioso, pero quien está de suerte hoy eres tu porque no voy a partirte la maldita cara ya que no vale la pena gastar mi energía en un engreído como tú.
Me di vuelta y camine difícilmente un par de pasos ignorando los gritos de Jimin y solo me detuve por un momento para quitarme a prisa el zapato, lo tomé en la mano y continúe caminando hasta llegar al portón principal de la mansión donde el guardia me miró inquisitivamente, debió creer que yo estaba demasiado ebria ya que iba por ahí sin zapatos.
Me alejé de la mansión caminando por la acera a horas de la madrugada, no sabía qué hora exactamente era ya que mi teléfono estaba en el bolso que Avril insistió en dejar guardado junto a los abrigos.
Los automóviles pasaban por la calle sonando su bocina estrepitosamente iluminándome con sus intensas luces y yo solo continuaba caminando sin saber bien a donde iba, estaba demasiado lejos de mi residencia, no tenía dinero ni teléfono y mi cuerpo empezaba a tiritar de frio.
–¡Estúpido Jimin...! –grité enfurecida y lancé mi zapato lejos. Me arrepentía de haber salido de la mansión de aquel idiota, debí regresar en busca de mi bolso y así podría simplemente haberme ido en un taxi.
Justo cuando pensaba que no había algo peor que me pudiera pasar, sentí un intenso dolor en el talón de mi pie izquierdo, una corriente fría me recorrió hasta la columna y caí al piso sentada, tomé por reflejo mi propio pie contorsionándome en el piso para ver que me había causado aquel terrible dolor, me quede sin aire debido a la impactante imagen de un enorme trozo de vidrio incrustado en mi talón.
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RUDE
Short Story"Sé que no soy buena para ti, ni tú lo eres para mí, pero ¿Qué debo hacer si te amo? Y tú... ¿Me amas?" ----------------------------------------------------------------- Una historia original y completamente escrita por GabyO Todos los derechos rese...