Capítulo 20: La tercera prueba

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Me despierté sobresaltada, mi corazón latía a todo ritmo. Respiré profundo intentando calmar mi respiración y un escalofrío recorrió mi cuerpo. Había tenido una pesadilla.

En mi sueño era la tercera prueba del torneo, estaban los cuatro campeones y yo los miraba. Cedric me miraba y yo le sonreía. Entonces, sonaba una trompeta y iniciaba la prueba. No recuerdo bien en que consistía está  solo que estaba muy nerviosa y no despejaba un ojo de Cedric. De pronto surguía algo del pasto, tenía una forma bastante extraña y era color blanco papel. Después cambiaba la escena y estaba abrazada al cadáver de mi amigo, yo sabía que esa cosa lo había matado. Yo seguía llorando cuando veo esa crituara blanca acercarse con una sonrisa malévola, sabía que me iba a matar, pero cuando estaba lo suficiente cerca para hacerlo, me desperté.

Eran las 3 de la mañana y no podía pegar un ojo. Tenía la repentina necesidad de ver a mi mejor amigo. Intenté tranquilizarme, seguro estaría durmiendo plácidamente en su habitación. Me levanté de la cama y empecé a caminar por el cuarto para calmar mis nervios. De a  poco mis ojos se iban cerrando, el sueño iba apareciendo,  y esas feas sensaciones quedando atrás. Finalmente logré  dormir un rato.

•••

En el desayuno busqué desesperada a Ced. Había mucha gente, cosa que dificultaba mi búsqueda. Cuando lo encotré, corrí hacia él y lo abracé con todas mis fuerzas.

— Ey ¿Qué pasa, Deli?— Dijo Ced preocupado al verme.

— Estas bien, gracias a Merlín.— Suspiré aliviada.

— ¿Por qué estaría mal?

— Tuvé un sueño horrible con vos.

— ¿Me quéres contar que pasaba en el sueño?— Dijo con voz dulce.

Le relaté mi sueño despacio y como puede.

— Deli, quédate tranquila. Estoy acá, no me pasó nada. Y tampoco me va a pasar nada en la prueba ¿De acuerdo? No es como si fuera a aparecer alguien de la nada y matarme.— Ríe.

— No sé Ced, algo me da mala espina.

— Debe ser porque no dormiste bien. Ahora anda a desayunar que tenemos un día largo.— Me echa.

Volví a mi mesa y me senté al lado de George y Alicia.

— Hola Deli.— Me saluda con un beso George.

— Hola.— Le devuelvo la sonrisa.— ¿Me pasas el café? No dormí mucho.— Le digo a Angelina, quien tengo al frente.

— Me di cuenta que no dormiste bien, ayer te ví dar vueltas por el cuarto.— Me pasa el café.

— Perdón si te desperté por el ruido.— Me sirví café y empecé a tomar.

— No  pasa nada.— Me sonrié.

— ¿Emocionadas  por  la última  prueba?— Pregunta George.

— Obviamente. — Respondé Alicia.— ¿Quién quieren que gané?

— Cedric,  obvio.— Respondí.

— ¿Cómo que Cedric? En Gryffindor queremos que gané Harry  ¡Traidora!— Bromea George.

Los gemelos Weasley y Delila LovegoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora