Bogotá, Colombia.
22 noviembre 2018.
Al fin, hoy es el gran día, al fin me voy a graduar del colegio, me da un poco de nostalgia, pues no volveré a ver a mis amigos, no volveré a jugar en los descansos. Ahora todo será muy distinto.
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Al acabar la ceremonia, me tomo un par de fotos con los profesores y algunos compañeros. Sé que a mamá no le gusta esperar.
- Te felicito, al menos lograste algo en la vida, esperemos que siga viva cuando vuelvas a mostrarme algún logro. - Me dice mi mamá, mientras vamos al parquedero del auditorio.
Solo pongo los ojos en blanco sin que se de cuenta, porque siendo así, me plantaria su pesada mano en la mejilla. Suele golpearme en la cara cuando no hago lo que ella quiere, o lo que no le gusta.
Me siento en la parte de atrás junto a ella, mientras Luís, nuestro chófer nos lleva a casa.
- ¿Qué será la cena madre? - intento romper el hielo, aunque nunca lo he logrado. Mamá siempre ha sido muy fría conmigo.
Creo que me quiere menos desde el accidente que tuve con mi padre, el falleció y yo salí totalmente ilesa.
Sé que ella hubiera preferido que muriera yo a mi padre. Nunca me lo ha dicho, aún sigo esperando ese día, porque conociendola, nunca se guarda nada.
- Nada, ya esta muy tarde y no debes comer a estas horas. Debes tener una buena figura si quieres ser modelo - me dice sin apartar los ojos de su celular, por ahí se comunica las 24 horas con su asistente.
- Te he dicho que no quiero ser modelo, ese era tu sueño mamá, no él mío - La miro a la cara intentado que me mire, pero es en vano.
- No me importa, la otra semana tienes la cita con la agencia de modelos. Además, mira el lado posistivo, vas a conocer Europa.
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3 diciembre 2018.
9:10am
El chófer condujo al menos una hora, asumo que estábamos fuera de Bogotá por el clima, hacia algo de calor.
Llegamos a una mansión espectacular, tenía piscina, su propio bar, era muy lujoso.
mientras voy entrando, veo una fila de chicas estúpidamente hermosas, algunas naturales, otras operadas hasta las uñas.
Veo a Luis adelantarse y hablar con alguien que parecía un guarda espaldas, iba totalmente vestido de negro, con el cuello de la camisa desabrochado, lo cual dejaba ver algo de sus pectorales, tenía unos labios gruesos y carmudos; guau, qué hombre, pienso.
- señorita, debo irme, su mamá me llamó de urgencia y usted sabe que ella es una mujer muy impaciente.
Hace una pausa y hace una seña llamando al que parece guardaespaldas, el chico guapo.
- Mire, la dejo en buenas manos, él se llama Juan, él la ayudará en lo que necesite. De todas formas, usted viene recomendada de su madre y no deberá hacer toda esa fila. No tardarán en llamarla para hacerle una entrevista - Luis me mira esperando a que le de mi aprobación.
- Esta bien, gracias por traerme. Adiós.
9:23am
Juan no ha dejado de verme, supongo que debe cuidarme bien, porque mi mamá puede ser la persona más fría del mundo, pero muy sobreprotectora,eso sí.
Empiezo a pensar en qué tipo de agencia hace sus contrataciones en una finca así, algo informal me parece muy extraño.
- Es tu turno - Juan me extiende la mano para levantarme del cómodo sofá que había en la sala. Me lleva por un pasillo y me señala una puerta gigante en madera.
- El paquete prioritario va entrando - Oigo que dice muy bajo por su micrófono que tiene en la manga.
¿El paquete? ¿Soy un paquete? ¿Por que soy prioridad? Quizá sea el hecho de ser hija de una fiscal.
- Alicia, al fin puedo conocerte. Siéntate por favor. - Es un hombre de al rededor de unos 28 años, tiene unos pantalones negros, y una camiseta gris, le queda ajustada la ropa, así que deja ver sus brazos grandes de hacer gimnasio.
- Gracias, disculpe ¿Lo conozco?
- No nena, aún no. Pero creeme, para ti también será un gusto.
Me hace unas preguntas de rutina, me pregunta mi edad, estatura, tallas, todo muy normal. También me muestra a que países podría ir, y las marcas de ropa que podría modelar, como Gussi, Victoria's Secret, o algo deportivo como Adidas o Nike.
Guau, me empieza a gustar la idea.
- Por último tengo una pregunta, es algo personal, pero es de suma importancia para decidir si puedes continuar el proceso con nosotros o no. ¿Has tenido relaciones sexules?
¿Qué putas? ¿Y eso que le importa?
- No creo que eso sea de su incumbencia - Le digo en un tono cortante.
- Por favor muñeca, no le diré a tu madre. Solo quiero que seas honesta conmigo - mientras me dice eso, va rodeando su escritorio para quedar junto a mi.
Me toma de la mano y me acaricia, apenas lo hace, me genera una corriente extraña.
- Al menos dime tu nombre, no quiero contarle mis secretos íntimos a un completo desconocido.
Hace una media sonrisa y abre la boca un poco, como si fuese a decir algo. Pero no lo hace, solo suspira y me dice:
- Me dicen "tigre", igual que tú no puedo revelar mi verdadero nombre a una completa desconocida... Y entonces, ¿Eres virgen o no?
- No, no lo soy - Mentí.
Me mira impasibo, no me quita la mirada de encima y noto que cambia totalmente su actitud. Se levanta de la silla a mi lado y vuelve a su puesto, mira su computador y empieza a escribir unas cosas.
- Alicia, gracias por venir. Le estaremos comunicando la respuesta en un rato si su perfil es el apto para nuestra agencia. Cierre la puerta al salir por favor.
10:30am
Todas las aspirantes estamos sentadas en un comedor inmenso frente a la piscina, es un desayuno delicioso. Nos dieron algo de fruta y jugo de naranja. Pero de seguro quedaré con hambre.
Junto a mi hay una linda chica con rasgos asiáticos, tiene el pelo negro y muy largo, una sonrisa muy sexy, unos senos de actriz porno. Lo mejor de ella, es que parece ser muy buena persona.
Me ha contado que está en la universidad, está estudiando comunicación y periodismo, pero ser modelo es su sueño desde muy pequeña, dice que está es una oportunidad única y no quiere desaprovecharla.
Al rato, algunas empiezan a quitarse la ropa para entrar a la piscina, como si tuvieran total confianza. Otras, coquetan con los guardaespaldas, y ellos no pierden la oportunidad para mirarle el culo y las tetas a la primera que se les acerque.
Comienzo a recorrer la casa, tiene tres pisos, es realmente hermosa. Cuando voy pasando cerca a donde me hicieron la entrevista, veo salir a El Tigre junto con Juan. Me escondo tras una pared para escuchar lo que dicen.
- Juan: ¿Y el paquete señor?
- Tigre: Parece ya no ser blanca, eso me disgusta un poco. Pero claro, con ese hermoso trasero y esas piernas quien no se la iba a comer - Oigo sus risas mientras se alejan al patio.
Hijueputas...
Al volver al patio, está El Tigre y a su lado Juan. Saca unas hojas y empieza a nombrar a algunas chicas que se paran frente a él, todas muy ansiosas por saber que pasará.
No me nombra a mi, ojalá no haya sido seleccionada. Sería muy feliz.
- Listo mamasitas, las que están acá en frente mio son las que se pueden ir, las que no nombré, son las futuras modelos de la agencia White Models.
Todas comienzan a gritar, de felicidad, otras lloran porque no fueron aceptadas.
- Levanten sus copas mamasitas, y brindemos por una nueva vida. - Dice El Tigre mientras me mira fijamente.
Ni siquiera sé como sentirme, digo; no es algo que yo quiera. Pero quizá mamá se sienta orgullosa de mi.
