《Ｑｕｅｂｒａｄｏ》

Capítulo 3

Es curioso, el pronóstico decía que habría una tenue llovizna durante toda la semana.

Erre estaba en el bosque a una profundidad considerable pero ya explorada por ella, era tarde el cielo color naranja lo anunciaba, las nubes y el viento decían mucho. El tiempo había pasado volando y no recordaba mucho de su día a ese punto solo le preocupaba llegar temprano a casa.

Había cubierto la madera con una lona por si la lluvia la llegase a pillar en pleno trayecto, caminando tranquilamente a orillas de la carretera, había pasado un tiempo por lo que tenía bien formadas rutas de escape y sus armas no daban buena espina a los que pasaban en auto.

La oscuridad llego y con ella una fuerte llovizna para mala fortuna de Erre, los nervios se le notaban cada vez más hasta que unos metros al frente de ella un accidente ocurrió, un automóvil volcó dando varias vueltas por el pavimento hasta detenerse contra un árbol quedando boca arriba debido a la lluvia.

Erre noto cierta indiferencia de los conductores que se limitaron a llamar a urgencias, Erre por su parte corrió hacia el lugar dando con un conductor herido e inconsciente, pero a la vez conocido, Tim.

Erre no presto atención a quien era en el momento si no a ayudar a aquel desafortunado, se abrió paso con dificultad, con una navaja pequeña cortó el cinturón de seguridad cuidando que no cayera todo el peso sobre su cuello y con fuerza llena de histeria y adrenalina lo saco teniendo cuidado con su cabeza y cuello, en la escuela se les dio clases de primeros auxilios y ella como primer auxiliar lo recostó en el suelo se quitó su camiseta, y ya que estaba mojada coloco la camiseta alrededor del cuello de Tim evitando que se moviera si es que estaba lastimado su cuello. Su respiración era dificultosa y al parecer estaba bien más allá de algunos rasguños he internamente de no ser por algunos cortes profundos y golpes que atendió pero su pequeño botiquín no le daba abasto, sin embargo, ayudo hasta que los profesionales llegaron.

Al llegar la ambulancia se llevaron a Tim y Erre solo observó teniendo esa extraña sensación de nuevo como si algo le removiera las tripas desde adentro, sus piernas temblaron haciendo que cayera de sentón en un árbol lejano donde había dejado sus cosas y la sensación de ser observada iba en aumento por lo que procedió a llamar al padre de su joven y pequeña amiga de cabello rizado. Su inglés había mejorado un poco por lo que no tuvo dificultad para pedirle de favor que fuese por ella a lo cual el sujeto accedió sin problemas.

—Lamento las molestias.— Le dijo Erre a lo que el padre de su joven amiga negó con la cabeza.

—Descuida, evita estar tan tarde en carretera, no es seguro y las personas en general no son buenos con los extranjeros.— Una vez arribó, bajó y abrió la cajuela para meter la madera y emprender el camino de regreso a casa.

En el transcurso Erre le explico sobre el accidente y como el tiempo pasó tan lento en ese momento expresando su preocupación ya que Tim pese a todo le caía bien.

Una vez llego a casa del sujeto agradeció, bajo sus cosas y camino a su casa la cual quedaba a unas 7 casa más lejos de ahí. Al abrir la puerta se encontró con los rostros preocupados de su madre y abuelos quienes en un tono de voz alto comenzaron a regañarle por su ausencia ya que eran las 11 de la noche y nunca había llegado tan tarde, Erre les explico todo lo ocurrido en su viaje de regreso a casa.

—No es como si realmente quisiera llegar tarde, simplemente fue un día extraño—. Dijo caminando hacia la parte trasera de la casa para dejar la madera en un lugar seco mientras sus abuelos se iban a dormir y su madre le daba instrucciones para calentar su comida mientras iba directo a su habitación para finalmente descansar.

Una vez Erre salio la lluvia ahora eran unas ocasionales gotas, el patio trasero estaba oscuro y la luz era demasiado tenue, al bajar los tres escalones sintió un abrupto escalofrió en su espalda girándose inmediatamente, juraba que había algo atrás de ella por un momento y al pensar un poco noto como el machete ya estaba en su mano fuera de su funda asustándose durante todo el proceso ya que todo había ocurrido demasiado rápido.

Soltó un suspiro culpando al cansancio de aquel día. Guardó la madera, regreso a casa cerrando bien todo para tratar de tener una cena tranquila finalmente, tomar un baño caliente y dormir plácidamente aun con el corazón acelerado como si algo malo fuese a pasar.

Estando en su cuarto miro su teléfono notando como la noticia del accidente ya había sido publicada cayendo en cuenta que quizá su mal presentimiento era sobre Tim lo cual solo empeoro su sentir y disparó su ansiedad comenzando a morder sus uñas mientras sobre pensaba en su posible muerte y generándose preguntas del porqué le importaba tanto un desconocido hasta que sintió un líquido brotar de su boca [...] se había arrancado una uña de raíz, se levantó rápidamente caminando hacia el baño para lavar la sangre y saco un par de gasas para detener el sangrado, una vez lo consiguió se dio un momento para suspirar mirando su cara en el espejo cayendo en cuenta que estaba ocurriendo otra vez, una vez mas no podía reconocer el reflejo en el espejo el cual lo miraba sonriéndole de una manera ligeramente burlona.

—Estoy cansada, no estoy dispuesta a pasar por esto nuevamente así que solo vete y déjame dormir—. Procedió a cubrir el espejo con una manta y regresar a la cama creyendo que ya había superado esa etapa y deseando que no fuese igual que la última vez, recordando a su padre finalmente se soltó a llorar estrellando su cara contra la almohada haciendo la noche más larga hasta que finalmente consiguió dormir.