Conociéndome...

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Confieso que cuando empecé a aceptarme fue difícil encontrar algo de control, de cierta forma era nueva en ese mundo, así que debía aprender a conocerlo bien, sin pena, sin temor y aceptarlo como parte de mi.
Todos los días, tardes y noches mis pensamientos eran invadidos por una ola de lujuria sin fin, sentía Muchas ganas de ser penetrada, de que me tocaran y me hicieran sentir esa satisfacción tan inmensa y deliciosa; la primera solución que utilicé para tratar de saciar mi sed y perversión fue utilizando consoladores; mi favorito era el vibrador para el punto G, ese me daba mucho placer, también llegue a utilizar un anillo vibrador doble, el cual tenía múltiples usos, me gustaba mucho utilizarlo de modo que estuviera en mi vagina y en mi ano al mismo tiempo, utilicé bolas chinas, no daban placer eso es seguro pero me gustaba utilizarlas porque de cierta forma lograban intensificar aún más mi deseo Sexual, es irónico porque realmente ese era mi "problema" pero disfrutaba al utilizarlas. Y así fui saciando un poco mi deseo, pero una noche salí del apartamento, le hable a mis amigos preguntándoles si tenían tiempo de salir para ir a tomar algo o bailar quienes me dijeron que no, luci debia madrugar a su clase de natación, luck debía cuidar a su hermanita y juanca estaba enfermo, decidí salir sola, tomaría algo y volvería a mi apartamento, así que me vestí con una blusa negra de malla, unos zapatos altos de cordón, una falda de cuero y medias semitransparentes que llegaban hasta mi muslo y las cuales se sostenían con un liguero de broches que llegaba hasta mi cintura, llegue a un caffebar que se llamaba lovecaffé, me tome un cóctel pero mientras lo hacía mi mente volvió a traer imágenes y pensamientos que de inmediato me excitarón, no sabia que hacer! Pensaba ir al baño y tocarme pero sentía que no sería suficiente, fuí al baño y me eché agua en la cara pero mis pensamientos y mi excitación más se intensificaron, en ese momento no se que sucedió en mí pero me quite el sostén y al salir del baño me dirigí hacia un hombre, quien estaba solo y el cual desde que llegue al lugar no dejaba de mirarme, al pasar por su lado le deje mi sostén en sus piernas y seguí caminando, el me volteó a mirar y le sonreí seguido de una mirada picaresca y perversa a la vez, yo me dirigí al estacionamiento, creí que no iría pero al momento él llegó al lugar, me observó con una mirada de deseo y una sonrisa perversa, me dijo -¿serás mi postre o mi plato fuerte?- yo me senté en un muro bajo, puse mis manos en mis piernas, las abrí lento y con una mirada retadora y perversa le dije -tu eres quien va a comer, tu decides que quieres que yo sea- y seguido de eso me mordí el labio, él no aguanto más, me tomó del cuello un poco fuerte y puso su mano en mi vagina, en ese momento mi excitación creció aún más, al verme así el empezó a masturbarme, yo le baje la bragueta del pantalón, lo desabroché, saque su Verga y la empecé a lamer, al hacerlo lo miraba y más duro se ponía, luego empecé a chuparsela y lo seguía mirando, él al verse tan excitado me levantó del cabello y me puso en cuatro, ahí me penetró mientras yo me tocaba y lo tocaba al tiempo, me daba nalgadas, eran fuerte pero me excitaban, luego me volteó algo brusco, me tomo del cuello, me recostó en una pared, se quedó mirándome fijamente y me dijo... -eres la puta más hermosa que he conocido- y me golpeó la cara, ¡no lo entendía! Me estaba golpeando e insultando pero a mi me fascinaba! En ese momento yo ya estaba extasiada, era tanta la lujuria que casi me vengo, ¡pero quería seguir! El me jalo del cabello me agachó y me dijo -Cometelo- y yo entre gemidos y extasis me arrodillé y lo metí Hasta mi garganta mientras me tocaba, el no aguantó más y se vino en mi boca, eso hizo que yo también lo hiciera, me bebí toda su leche, estaba deliciosa... El me levanto me miró a los ojos y sorprendido me dijo -¡qué clase de ángel eres, porque me llevaste al infierno y al cielo en varias ocasiones!- yo no respondí nada... estaba sorprendida de ver lo que había sucedido, no lo podía creer. Me puse la falda, limpie mis medias me arregle el cabello y me fui sin decir ni una palabra, él me alcanzó y me entregó su numero, y dijo -por si algún día quieres hablar de lo sucedido- luego, se marchó...

 Me puse la falda, limpie mis medias me arregle el cabello y me fui sin decir ni una palabra, él me alcanzó y me entregó su numero, y dijo -por si algún día quieres hablar de lo sucedido- luego, se marchó

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⏰ Última actualización: Apr 28, 2019 ⏰

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