LA REINA DE LA PSICOSIS.

LARGA VIDA A LA REINA

#1

Francamente he comenzado esta ristra de comentarios o ideas que pasan por mi cabeza para curar mi mente.
O tal vez porque mientras escribo digo en voz alta lo que no he podido decir porque a la sociedad no le gusta que le digan la verdad a la cara. Así que, sí, escribo porque estoy aburrida de las personas, odio a muchas personas y si a esto le sumas una súper mente que acojona, para nada soy normal y me afecta mucho todo.

Aunque hay cosas que me gusta conocer de las personas: sus secretos. Es lo bueno de todo esto, no obstante (me encanta usar esta muletilla desde que ví Harry Potter con 12 años) tiene sus desventajas. Como por ejemplo, saber cosas que no puedes reprochar porque debes parecer una mas entre un millón.
Expliquemos mejor la situación. Royalties es una chica que intenta ir a la moda y que intenta esconde su vergüenza tras kilos de maquillaje. Esta tiene su "pariente", un pijo de lo mas formal, con polo marca lacoste, jersey cruzado cual arco de flechas y con calcetines tan horrendos que solo le faltaban las luces de navidad para completar el pack.

Pasaron los días e iba viendo como Royalti se deslizaba por el grupo social de su principe ortera. Intentaba agradarlos a todos y sobre todo a él. No fue el primer grupo en el que se inmiscuida para agradar a los que en el se encontraban y llevarse el "premio gordo" con el que pueda casarse y tener mini pijos.

Veía como desaparecía una chica para convertirse en la "perfecta señora de". Esa era la motivación para conseguir acabar mi carrera, que me ocurriese justamente lo contrario a ella.
Un día era o creía que era la mejor del mundo y luego el que planeas que sea tu millonario marido te trata de secretaria y tu crees que nadie se da cuenta, y así parecía, pero no contaba conmigo.
Podía escuchar su mente y no le agradaba esa vida por eso parecía que pensaba en tantos tíos como pudiera.
Y como no pude evitar mas confrontaciones con la gente (cosa que me costaba mucho), la enfrenté en el baño.
Me la encontré, yo estaba repasando mi pintalabios y entró con un aura de superioridad de plástico, no me hubiera percatado si no hubiera indagado de rebote en su estupida mente de Barbie.
Yo solté una risita y me giré, sin ningún pudor le solté:
- yo seré todo lo que quieras y no te gustara mi estilo. Pero me basta con mi novio, no necesito a ninguno más en mi cama. Cielo.

Con esta última palabra me miré al espejo admirándome y al volverme le lancé un par de besos muy falsos y salí de allí.
Me sentí genial, me desboqué y me salió bien. Normalmente n dije a nadie como podía saberlo, porque eso se queda para mí.

Al volver a clase una ristra de sonidos de mensaje sonó en todo los móviles, todos empezaron a mirar a mi dirección. Como sabía quién había sido la causante de todo aquello, me concentré y al chasquear mis dedos hice que comenzara a sangrar por todos los orificios de su cara. Tuvo que marcharse asustada y llorando. En su mente solo había una idea el miedo hacia mí.

Recuerda defenderte y soltar la verdad de tu interior, porque se puede volver en tu contra.

Besos, La Reina de la Psicosis.