❝Lo que parecía ser un simple plan se convirtió en algo trágico que dió la vuelta entera a la historia que pudo haber terminado en un final feliz.❞
Senju Haru hermanastra de Hashirama y Tobirama se ve amenazada por un enemigo que no sería fácil de d...
—¡¿Dónde está Haru, Hashirama?! —El peliplata azotó sus brazos contra el escritorio mostrando su enojo.
—No lo sé, es raro que no esté en ningún lugar. No quiero pensar que le haya pasado algo malo. —respondió conservando la calma.
—Han pasado dos meses y Haru aún no ha regresado de su misión de traer a Ichibi. —habló el azabache Uchiha sentado sobre su silla.
Desde que Haru fue a su misión de traer a Ichibi no ha habido noticias de ella en dos meses. Pasó una semana y Haru aún no volvía de su misión, Hashirama mandó a algunos ninjas para su búsqueda, pero ninguno la encontró.
—¿Haru dónde estás? —meditó preocupado Madara, no decía mucho del tema para no mostrar preocupación hacia la Senju.
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Senju Haru.
Han pasado dos meses desde que salí de mi misión y por fin regresaría pero no vengo sola, traigo conmigo al clan Sarutobi. Increíblemente hice alianza con ellos durante la misión aunque en un principio no nos llevamos bien.
Tenía hambre después de haber ido de la aldea hasta Sunagakure, por suerte había un pequeño local de ramen en medio del bosque —no soy muy fan de ello pero era lo único que había.— Terminé de comer, pagué y al salir del lugar para proseguir con el camino de regreso a casa cuatro hombres me rodearon apuntando sus kunais en mi cuello. Rápidamente lancé el primer golpe en la cara de uno de ellos dando inicio a la batalla, sin embargo perdí por qué me superaban en número.
—Soy una decepción como Senju. —me dije a mi misma con pesadez. Encadenaron todo mi cuerpo llevándome a una pequeña aldea en las profundidades del bosque. Pude ver el logo de su clan en la entrada y lo reconocí al instante.
Me llevaron con su líder, empezaron a interrogarme y por obvias razones no contesté nada que revelará información de la aldea. Pasé un mes y medio encerrada en un calabozo, solo comía pan y agua y el dolor de tener que mantener todo mi cuerpo en pie era insoportable. Tuve que decirles mi nombre.
—Me llamo Senju Haru. —Solo dije eso, no dí más detalles.
La cara de Sasuke-sama —el líder del clan Sarutobi— mostró sorpresa e inmediatamente me liberaron. Luego de varias disculpas por su comportamiento me ofrecieron unir una alianza con la aldea y no dude en aceptar. Los Sarutobi's son conocidos por tener un gran poder y control sobre los jutsus de fuego además de tener un buen estilo de combate con puro taijutsu.
Ahora me encuentro saltando de árbol en árbol con todos ellos, a lo lejos ví el portón de roble que era la principal entrada a la aldea.
—Alto. —demande quedando frente al portón.— Sasuke-sama, hay que ir con mis hermanos a tratar sobre el tema de la alianza. Tendrán que disculparme pero no pueden entrar aún hasta que ellos acepten.
