—Buenos días, señor. — Lack-two dijo sin aparente brillo en los ojos.
—Al menos me alegra ver que no tendré que hacer mucho con sus modales. — El hombre añadió sin ninguna pizca de piedad.
—Bueno, parece que junto con usted será el recluta perfecto. — El jefe sonrió. —Lack-two, escribe tu nombre en el acta.
Lack-two estaba dispuesto a rayar la hoja, no quería ser adoptado. Una voz familiar resonó en su pequeña cabeza:
—...Si llegaras a sentir algo por mi… ¿Seríamos pareja?
Lack-two tomó el bolígrafo y escribió su nombre. Sufría bastante a cargo de bastantes adultos, pero decidió que si era obediente y no se revelase podía, en su inocentemente corrompida mente, volver a ver a la niña que con un simple roce de labios lo dejó tan locamente enamorado.
—Creí que el niño no estaba siendo serio, pero veo que es aún más listo de lo que aparenta. Hiciste una muy buena elección, niño. — El aún desconocido hombre reconoció.
—Le dije que le conseguiría un gran asistente títere. — El jefe respondió en un susurro con crueldad.
Lack-two lo escuchó. No quería servir más a un adulto que usaba a un niño en sus crueles planes, pero aún esa niña seguía siendo su motivo para seguir adelante, aunque significase sufrir, sufrir y sufrir demasiado. Jamás deseó ser un adulto, y esto le hizo sólo querer mil cosas antes que crecer. Prefería morir, fuera como fuera, prefería seguir huérfano, prefería rogarle a la madre de la niña del sombrero que lo adoptase, prefería de todo, menos ser un títere. Pero muy en el fondo, deseaba crecer para ya no depender de personas con ideales egoístas, que buscaban perseguir la verdad y la falsamente llamada libertad.
—Bueno Lack-two, puedes ir a tomar tu descanso, mañana verás como el agente …….. te va a entrenar.
—Todo cambiará desde ahora. Tenlo presente niño.
Lack-two salió de la habitación. No hizo ningún gesto infantil hasta llegar a su cuarto. Ahí, empezó a llorar y a aventar objetos que no podían romperse a donde fuera. Fácilmente hizo lo mismo durante dos horas. La furia de ser adoptado por fines egoístas y el dolor que le causaba perder a todos los que lo quisieron, lo abrumaba. Al calmarse, reordenó todo lo que lanzó, y ya listo todo, sacó las botellas con notas de la caja de juguetes y empezó a leer sus mensajes:
“Si hubiera sido un mejor niño, mamá jamás habría ido”
“Si le hubiera impedido ir al trabajo, o dejarlo ir mucho antes o mucho después, papá jamás se habría ido”
“Si jamás le hubiéramos dado galletas a Baku, Polo jamás se habría ido”
“Si pudiera irme de aquí, buscaría a la niña de aquel sombrero blanco, le diría todo lo que siento, y jamás la dejaría irse de mi lado”
“Malditos los Kouri… Malditos, ninguno merece vivir”
“Bisabuela me golpeaba mucho con su bastón. Bisabuela es una mala persona”
“Abuelo y abuela me maldecían siempre. Abuelo y abuela también son malas personas”
“Tíos y tías me regañaban por cosas que yo jamás hice. Tíos y tías son aún más malas personas”
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Mi Motivo Para Sonreír - Corruptedshipping (Lack-two x Whi-two)
Teen FictionLack-two empieza a tener frecuentes recuerdos de su pasado y empieza a lamentarse por las cosas que ha vivido y por no poder evitar ciertas cosas. Pero la misma persona que despertó sus emociones, ahora será su motivo para sonreír.