I

6 3 0
                                    

Empezaba el instituto a los 16, por una u otra razón iba atrasada un año y era algo que odiaba siempre. La verdad no me apetecia nada el empezar a relacionarme amorosamente con nadie, pues hacía poco que me habían decepcionado y no estaba dispuesta o cometer el musmo error.
Que mas da, siempre cometemos errores ¿no? Y después de unos meses caí como idiota. El culpable de mi "error" ( por que en si no fue error) tenía ojos cafés con vitrinas, piel blanca que combinaba perfectamente con sus rulos negros. Media un poco más que yo y en esos momentos era perfecto.
Y como no todo es perfecto yo no le importaba en lo más mínimo.
Mis noches pasaban en desveló pensando alguna forma de llamar su atención, solo una.
Trate de olvidar lo mas posible pero ¿ cómo se olvida a alguien que ves día a día?
Luego de un tiempo decidí entrar al mismo club que el; música.
Las cosas parecían normales, un integrante mas para su club, aunque yo una inexperta en el tema con piernas temblorosas y todas las opciones posibles de hacer el ridículo.
En este trance recibí muchos regaños de maestros, desvelos y en ocasiones, quemadas de sol. Por los mismos daños del sol tuve insolación en varias ocasiones, el me hablo un poco ( solo un poco) y con eso basto para no rendirme en llamar su atención, aunque fuera la más mínima.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 13, 2021 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cuatro y media estaciones.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora