VEINTINUEVE

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–¡Alto!– Grite para llamar la atención de Elías

–Miren quien llego, la perra mas perra de todas– soltó a Perla a un lado, ella corrió hacia su madre

–El problema es conmigo, no con ellos– me sujete el brazo que aun sangraba

–No cariño, cualquier cosa que ames la destruiré. Es eso o empiezas a trabajar conmigo y me dejas tu parte en la mafia– sonrió

Okay, sabe que soy híbrido pero no sabe que soy un Alpha

–Jamas– levante la mirada

–Pesima elección – se abalanzo sobre Derek

Corrí hacia el y lo cubrí recibiendo que Elias me clavara sus uñas

–Para matarlos tienes que matarme primero– saque en arma de mi espalda y les dispare a los cinco hombres que venían con él

–Eres rápida al disparar debo admitirlo– empezó a rondarme para intimidar

–No me hagas asesinarte– advertí

–Que lástima, porque matarte es mi mayor deseo– saco una daga y me la encajo en el vientre

–Maldigo el día que me enrede contigo– dije mientras me sacaba la daga del vientre

–Que lastima– dijo y se fue de la casa

Me dolía el brazo, tenia la herida del vientre. Ambas sangraban pero no se curaban no se que es lo que pasaba pero Elías ahora si estaba mas que dispuesto a matarme, debo acabar con el, pero primero debo aclarar las cosas

–Llama a Frank y al doctor de la manada, que dejen lo que estén haciendo y vengan a la voz de ya– me senté en la banqueta

Esther se acerco a mi y acaricio mi rostro

–¿Amas a mi nieto? – dijo viéndome a los ojos

–Señora no se que es lo que usted sepa de nosotros pero le puedo asegurar que mi amor va mas allá de la conexión de almas– le mantuve la mirada

–Agradezco que vinieras a salvarnos y que lo salvarás a él – me abrazo pero me queje

Los padres de Derek examinaban que Perla estuviera bien, pero Derek estaba en transe como si estuviera asimilando que casi lo matan.

En ese mismo instante llego el doctor de la manada, que nunca me ha caído bien pero me ha ayudado cuando me disparan por asuntos de la mafia.

–Vallamos al cuarto de visitas, para que ahí la atienda– le dijo Esther a James

Frank me cargo hasta la cama y empezaron a examimarme con siete pares de ojos observándome

–Bueno, les pido que tengan la mente abierta se calmen, me dejen hablar y que prometan que sea cual sea su elección guardaran este secreto – les dije mientras James me limpiaba las heridas

–Lo prometemos– se escucho al uníson

–Mi nombre es Miranda Wolf  Treviño, Se que Wolf es raro pero ese es mi apellido por parte de mi mamá. Cuando todo esto comenzó iba el Teviño al principio – me detuve para gruñirle a James que había presionado muy fuerte la herida

–No me gruñas, allá sera Alpha pero aquí eres mi paciente – dijo y me dio un piquete para que entendiera que me podía causar dolor

–Continuando, no viven en el mundo que creen, existen los vampiros, las brujas, demonios, los licántropos. Todo lo que han leído es cierto, en partes pero lo es. Siempre creí que era humana pero me metí de peleadora cuando tenia quince años, entrene mucho hasta que logre entrar a las peleas de Elías, el y yo nos hicimos pareja. Aclaro que yo no sabia que el era un jodido vampiro. Cuando fue mi cumpleaños número diecisiete el me llevó al bosque con engaños me contó lo que era, para que me quería convertir y así lo hizo me dreno completamente. Dejo tirado mi cuerpo que si sobrevivía a la transformación lo buscara. Pero Frank me encontró e igualmente me mordió, ellos escucharon lo que dijo, si solo dejaban la mordida de él yo lo obedecería en todo– tome mas aire para seguir hablando – soy un híbrido de lobo y vampiro pero la historia no termina ahí, Frank era mi entrenador cuando era humana, además es mi tío. Mi abuela era loba y mando a cierta bruja para que durmieran a nuestro lobo y que no despertara hasta que alguien de la familia nos mordiera porque lo veía necesario– deje de hablar

I N F I E R N ODonde viven las historias. Descúbrelo ahora