Bajo un cielo a punto de caerse

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"Volveré a encontrarte entre los rincones de mi mente y entre las grietas y pliegues de mi corazón"

La vida es efímera, lo sabía y aun así no pensé que tú serías el primero en dejarnos...

Me cuesta creer que ya no estás, que te fuiste, así, tan rápido como llegaste a mi vida, todavía no entiendo por qué te dejé solo, fueron solo cinco minutos, nadie me advirtió que en esos cinco minutos yo podría perderte.

No puedo con el dolor y con esta pena, una parte de mí se ha marchado contigo, tengo una sensación atorada en el pecho y en la garganta, una que no me va a dejar en paz, yo... ¿Por qué? ¿Por qué lo ultimo que pude decirte fue una orden? Ni siquiera te brinde una mirada apacible, ni siquiera una cariñosa, nos encontrábamos en un punto crítico y yo no quería perder a ninguno de ustedes, no quería perder a Narancia, ni al resto, y mucho menos a ti, Abbachio... Tus ojos tiritaron como las estrellas del firmamento ante mis palabras, sin embargo estaba tan preocupado pensando en que los estaba protegiendo que no me di cuenta que al dejarte solo sólo te conduje a la muerte y no puedo evitar reprochármelo mil veces.

Esperé a que todos durmieran para poder pensar en ti, para poder reflexionar y tratar de asimilar éste trago amargo, necesitaba de la soledad para llorar hasta que no me quedara una sola lágrima en el cuerpo, hasta sentir mi alma seca y para humedecerla nuevamente con los recuerdos que me quedo de ti, para despedirte de ti como debí hacerlo en el momento que te dejamos, pero no quise hacerlo en ese momento, no quise que todos se derrumbaran al verme a mí de esa manera, invadido por la tristeza y el remordimiento, lo sabes, debo ser fuerte ante el resto, soy el que está a cargo, no pudo dejar que me vean siendo débil, ¿no es eso exactamente una de las cosas que a ti te gustaban de mí? La seguridad que siempre me ha caracterizado y la facilidad que tengo para que todos ustedes se levantaran cada vez que parecía que no había ninguna otra salida y creyeran en mí.

Abbachio, mi Abbachio, te arrancaron de mi lado, no puedo terminar de procesar esa idea, tú que siempre fuiste ese pilar que me ayudaba a mantenerme con la cabeza en alto, aun cuando yo sentía que todo estaba por venirse abajo, el único que conoció mi debilidad, mi hombro para descansar y mucho más que eso eras, ahora que te has ido deberé sacar fuerzas desde lo más profundo de mi ser para terminar está misión, sé que tú lo hubieses querido así, entendiste mis ideales y quisiste acompañarme, ni siquiera lo dudaste, tus ojos no titubearon, y aunque al principio tus palabras tuvieron un sabor amargo, precisaste aquello que me hizo saber que no me equivoqué al elegirte a ti "-Nunca tuve un hogar, ni un lugar al que quisiera ir. Mis únicos momentos de tranquilidad son los que paso a tu lado, Buccellati-." Junto a esas palabras subiste al bote para seguir a mi lado, tenía la certeza de que no te perdería, pero tampoco esperaba unas palabras tan sinceras de tu parte, al menos no a sabiendas de que los chicos podrían leer tus sentimientos, incluso los míos y podrían haberse dado cuenta que ambos estábamos profundamente enamorados el uno del otro.

Quiero recordarte a ti y a tus pequeñas y fugaces sonrisas mientras trato de quedarme dormido, bajo un cielo que está a punto de caerse, en el que las estrellas no brillan, en el que la luna se a apagado y parece que, al menos por ahora no volverá a brillar, la oscuridad de la noche me envuelve entre sus brazos y trata de susurrarme al oído que todo estará bien, pero en el fondo sé que no lo está, no, porque ya no estaré más a tu lado.

Ya no serás de las primeras cosas que vea al despertar, no podré sentir ese característico olor a vino tinto que te invadía, ni tener tu tan distinguido labial sobre mi ropa y mi piel, ni sentir tus manos frías acariciando cada centímetro de mi cuerpo recordándome que hasta ahora y desde que te conocí siempre he tenido un único dueño.

Ya no estás y la tristeza me destroza el alma, me carcome vivo y no me va a dejar, pensé que me iría primero, después de todo sólo estoy aquí con una segunda oportunidad, supongo que aún tenía cosas pendientes por hacer antes de marcharme, sin embargo tú no, me alegra saber que al menos te fuiste con una sonrisa en tu rostro, a puesto que pudiste arreglar cosas del pasado, aquel en el que estuviste atrapado y solo a mi lado dejabas correr, eso me hace sentir un poco más tranquilo, pero aun así no voy a dejarte de llorar, lloraré hasta quedarme seco, regalando nuevos cristales a la mar.

Espérame... Espérame y recíbeme con los brazos abiertos cuando nos volvamos a encontrar, tú y yo ya no pertenecemos a este mundo, sé que mis días también están contados y no pensé que precisamente tú, amor de mi vida me acompañarías en el más allá.

Mantén tus brazos abiertos y abrázame muy fuerte en cuanto llegue a tu lado, devuélveme el amor que hoy al irte te has llevado.

En está vida ya no pudimos estar juntos, pero estaré esperando el momento de reunirme contigo nuevamente, por ahora si hay suerte cumpliré el anhelo que juntos habíamos creado.

Te veré pronto mi gran amigo, mi fiel compañero, mi amado Leone Abbachio.


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Sin comentarios, estoy en la depre, se murió mi husbando de Jojo's Bizarre Adventure y solo con esto pude sentirme un poquito mejor, okay, no es cierto, me voy a mi pinche rinconcito a llorar :'c

Bajo un cielo a punto de caerse [BruAbba]Where stories live. Discover now