Change

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♥... Universe Alternative

Soul Mate.

Un sonido hostil y un gruñido de desagrado.

Su cuerpo se encontraba desparramado en la cama con la cobija cubriendo parte de su abdomen y gran mayoría en el suelo, su cabello hecho un desastre y la baba escurriendo de su boca. Completamente estático dejo que los segundos pasaran a ser minutos, dedicándose tan solo a rememorar el día anterior; cuestionándose si coloco la alarma.

Aun no abría sus ojos, pues le resultaba irritante la luz que entraba por la ventana.  Aunque...

Más dormido que despierto enfoco el techo crema de su habitación , cayendo en cuenta de que la tonalidad parecía un tanto opaca de lo habitual, no le dio importancia; tal vez se debería a estar forzando la vista a esas horas de la mañana. ¿Acaso  Fukuda le jugaba una broma? Podría ser posible, Hiroshi y Kawahara solían asustarlo en los entrenamientos. Con una pereza inmensa se alzo, tallando sus ojos como un niño, el placer lo recorrió al momento de estirar sus brazos. Sus orbes se mantenían ocultos tras sus parpados.

Bostezo por consecutiva vez, topándose de inmediato con un estante lleno de libros, textos avanzados que logro enfocar a la distancia; tuvo un presentimiento que no le gusto. No paso mucho para que enseguida tocaran con firmes el respaldo de la puerta. Una voz femenina resonó sobre la puerta y fue ahí donde se dio cuenta.

Esa recamara no le pertenecía, la voz de la mujer no sonaba como su madre y sus compañeros no harían algo que también le perjudicaría a esa hora. Exaltado como su naturaleza lo marcaba se abstuvo de gritar, por que de todos los modos mas sencillo y comunes le toco el problemático cambio de cuerpo; su madre le contaba de niño la cómica situación que vivió junto a su padre al suceder lo mismo con ellos en su joven vida adulta. Si durante su vida infante pidió que conociera a su mitad de esa forma ahora se arrepentía.

El problema que significaba habitar otro cuerpo le frustraba.

En primer lugar estaba el hecho que debía adaptarse a su nueva anatomía, segundo fingir ser esa persona; pero como debería hacerlo si no lo conocía, y por ultimo su localización.

¿Dónde demonios estaba?

Se tomo el rostro entre las manos. Notando de inmediato un minúsculo e insignificante detalle; las palmas que se cerraban entorno a sus mejillas tenían un par de callos y se sentía rasposas al tacto. Eso no... todo menos eso. Temeroso repaso el rostro.

La nariz ejercía un papel respingón, ni muy grande ni pequeña, normal. El tono de la dermis usualmente porcelana no se comparaba a su color canela; oh cierto lo olvidaba, ¡Ese no era él y mucho menos ese cuerpo!

Esa entidad era su pareja; un hombre muy apuesto

El mundo se le vino encima al descubrirlo recién.

La sociedad avanzo lo suficiente para poder aceptar a una pareja entre personas del mismo sexo, no obstante existía el riesgo de que su "pareja" lo rechazara, por motivos obvios. Quizás ya tenia una novia o estaba tan metido a sus estudios que no le interesaba mantener contacto con la gente.

Kōki no supo manejar su estrés.

Se dejo caer nuevamente sobre la esponjosa almohada, ahogando las ganas de pasarla al rostro y soltar gritos.

Una idea alumbro su oscuridad; los pro y los contra de tal le llegaron como un guantazo, así que sin dudarlo busco con la mirada su celular... bueno el móvil del chico al cual poseyó en contra de su voluntad. Tal parece que no fue el único.

Su número telefónico, el verdadero, alumbraba con fervor en la pantalla; el alivio recorrió su sistema al momento de responder.

— ¿Kuroko?

SencillamenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora