EL SABOR DE TUS MUNDOS

3. LLEGANDO A LA LUNA

POV Alex:

-En verdad no me emociona para nada entrar de nuevo. Mamá están los mismos estupidos del año pasado y alguna que otra persona nueva.

-Primero cuidado con el vocabulario, Segundo, usted va a ir porque yo lo dije, y tercero vas a ir porque es tu obligación. Entendiste ¿O te lo explico de nuevo?- negué con la cabeza y le hice un puchero al que ella se hizo la ciega.

-¿Y si mañana a nadie le agrado y soy la olvidada de todo él edificio? ¿Y si mi amiga me cambia por otra? ¿Y si no me dejan entrar a la clase de piano?

-Y si te callas la boca y te dejas de preocupar por cosas que no han pasado y no van a pasar, además estás tarde para ir a trabajar.- me enseñó el reloj-.

-Es ciertooooo!!!.- salte de la silla y subí las escaleras cómo nunca, tome mi celular y el bolso, le di un beso a mi madre y tomé el carro más rápido que furioso.

Trabajo no muy lejos, pero tampoco es cerca, ¿Entienden?... ¿nadie por ahí? Ok. Tengo que dejar de hablar sola.

Es en un café muy acogedor, tenía mesas y sillas muy elegantes en el exterior, y por dentro también pero tenía un toque antiguo dentro. Yo hago los cafés, los llevo, tomo las órdenes y aveces estoy en la caja. Un trabajo algo cansado pero me gustaba estar allí, no tanto por él dinero, era lo de menos. Ya que el dueño es mi padre, así que lo hago por pasión, me encanta alegrar a las personas aunque sea con un simple pase buen día o un ¿Quiere más café?.

POV Kim:

-Cuando llegamos nos llevaron a la que sería ahora nuestra casa. Acomode mis cosas en mi nueva habitación, es más grande que la anterior, y más bonita, pero tenía algo distintivo que las demás habitaciones. Su vista, podías ver los edificios, establecimientos, casas, animales y personas, todo lo que uno aprecia cuando va a otro país cada vez que despierte. Punto a Favor de mudarnos.

...

-Entonces ¿Un café de frío, dos croissant y un bizcochó de fresa?.- miré a mi madre trabajar en su computadora y me respondió que sí con la cabeza.

Puse en Google Maps el café más cercano a mi casa, se puso la ubicación y manejé tranquila por la calle escuchando 'Idontwannabeyouanymore' esa canción fue la primera que escuché de Billie Eilish y desde que la escuché sentí que estaba llegando a la luna, y quedé con más deseo de seguir escuchando esa voz tan angelical, tan autentica e hipnotizadora.

Luego de unos minutitos llegué al café, muy bonito por cierto, estacioné el carro y me adentré en ese lugar mágico.
Me senté y esperé a que me atendieran, y en menos de dos minutos vi a una chica acercarse a mí, con uniforme y una libreta en su mano izquierda.