No hay procedimiento de tortura mental tan profundo como lo es recordar. Recordar trae muchísimos sentimientos, tan diferentes como iguales, que te hacen pensar mil y un cosas y cada una de esas mil y un cosas son como disparos de emociones que van justo al corazón.
Lo malo es que soy una persona sumamente detallista. Cada detalle estúpido vale muchísimo para mi, todos y cada uno de ellos. Lo cual es deprimente, ya que, prácticamente, me torturo todos los días.
ESTÁS LEYENDO
Escritos de 3:00 AM
RomanceTe pienso más en la noche, cuando observo que la oscuridad reina en mi habitación. Llegas a la cúspide de mi mundo a las 3:00 AM, y luego, al ver el sol del amanecer, cuando ya haz terminado tu reinado en mi alma, caigo nuevamente en mi rutina para...