Cho "Neugdae" [YECHUL/KYUSUNG]

[V] No sé qué sucede

CAPÍTULO 5

Ma*****a adolescencia: No sé qué sucede

POV's Jonghoon

Los días siguientes a ese no fueron muy diferentes. Era el mismo ánimo suicida de siempre, bueno no tanto, pero sí. Todo se aclaraba cuando volvía a verme con él en la biblioteca, que aunque solo me ayudara a estudiar matemáticas, él lo hacía perfecto y agradable, a pesar de ser insultado 24/7 por lo "burro" que yo era.

Esta vez tuvimos que estudiar en las escaleras frente a la biblioteca por ruidosos.

—Jong... ¿Qué ocurre cuando dos son negativos? —preguntó de mala intención.

—Pues... que aunque no piensen en salir de lo malo, logrará que se apoyen mutuamente en sus desgracias.

— ¿Te haces el tonto verdad? ¡CUANDO DOS NÚMEROS SON NEGATIVOS SE SUMAN Y SE DEJA EL MISMO SIGNO, GRÁBATE ESO EN LA CABEZOTA GRANDE QUE TIENES! ¿SOLO TE SIRVE PARA SOSTENER ESE PELO DE EMO QUE USAS O QUÉ? —dio un lepe en mi parte trasera de la cabeza y miré mi cuaderno algo acongojado—. Sabes que te grito porque debes aprender y salir bien ¿cierto?

—Por mi culpa no nos dejaron estudiar más en la biblioteca y debemos estar aquí sentados afuera con dolor de cuello. Merezco ser regañado.

—Aigh ¿por qué eres tan sumiso? Pareces una niña —se quejó pegando su espalda en la pared de la misma escalera—. Creo que es mejor descansar... —sugirió cerrando sus ojos.

—Oh, sí claro —cerré mi cuaderno viendo su rostro después—. ¿Dormirás?

—No...

—Ah, ya veo...

— ¿Ya conseguiste el error? —preguntó sin abrir los ojos.

—Oh, no —Volví a abrir mi cuaderno buscando el ejercicio.

— ¿Podrías dejar de decir "Oh"? Ya lo has dicho 21 veces desde que llegué.

—Oh, eres tan deta... Lo siento, lo volví a decir —Agaché la cabeza y me miró feo acercándose a cerrar mi cuaderno.

—Te dije que descansáramos —Miré sus labios cuando se acercó y por un impulso estúpido intenté besarlos, pero este se alejó rápido antes de que los tocara—. ¡¿Cuál es tu problema?! Descarado —gritó levantándose del escalón y bajando estos alejándose de mí.

«Yo tampoco tengo idea de qué me sucede». —pensé y sacudí mi cabello con furia. Sentí mi celular vibrar en mi bolsillo—. ¿Aló? —Contesté la llamada entrante de mi abuela—. Ah... ¡¿En serio?! —dije feliz levantándome—. ¡Voy enseguida!

Al parecer el juicio que habían tenido mis padres había resultado positivamente al reconocer la inocencia de ambos. Habían regresado a casa y cuando lo supe, no pensé dos veces en ir de vuelta a casa sin importarme que hoy tendría que ir a mi respectiva clase. Corrí por los solitarios pasillos hasta dar con la salida.

En cuestión de minutos llegué a mi morada. Parte de mi alma era tranquilizada por el calor de ambos cuando volví a abrazarles, me acurruqué entre ellos sin darme cuenta de la desgracia que dominaba sobre sus rostros.

[...]

— ¿Qué haremos, amor? No podremos pagar la educación de nuestro hijo... a penas pudimos pagar por esos abogados.

—No te preocupes... yo... lo solucionaré.

— ¿Pero cómo? Nos robaron hasta la mercancía...

— Conseguiré otro trabajo por el momento... tú no te preocupes, quédate aquí con Jong.

— ¡No! Yo también buscaré trabajo. Y no vas a detenerme de hacerlo.

Fue lo que llegué a escuchar desde la puerta al acercarme a darles buenas noches en su habitación.