SER DIVINO - MOONSUN

Final

“Perdón mamá, te estoy fallando a ti y me estoy fallando a mi misma”. Dijo entre lágrimas, ya que siempre vivía con miedo y en este momento se sentía infeliz por el dolor que le dejo la partida de su ser divino.

Se quedo un rato mas en ese lugar, llorando y expulsando todo el dolor que podía. Le hubiera gustado mucho que su mamá estuviera ahí con ella consolándola, pero la vida era injusta y ella tenía que aprender a vivir con eso.

Cuando regresó al palacio tuvo la mala suerte de encontrase con su padre.
“Buen día”. Dijo cuando se lo topo de frente en un pasillo. Hizo una reverencia y pensó en seguir su camino, pero su padre se lo impidió.

“Espera Byul Yi, quiero hablar contigo”. Solo asintió con la cabeza en respuesta, la presencia de su padre siempre la incomodaba.

“Ven, sígueme”. Dijo el Dios y ella le obedeció. Lo siguió hasta la habitación donde estaba el trono del Dios.

Min Seok se sentó en su trono y Byul se paro frente a él.

“¿En que le puedo servir?”. Preguntó temerosa.

“Dime una cosa, Byul Yi ¿Tu me tienes miedo?”. ¿Por qué hacía eso? ¿Por qué le preguntaba algo tan obvio? No le bastaba con intimidarla, ahora también la quería humillar.

“Contéstame”. Insistió el Dios ante el silencio de su hija.

“Si, padre”. Contestó cabizbaja, sintiéndose totalmente humillada. “Le tengo miedo a su simple presencia”. El Dios sonrió con satisfacción, logró su cometido.

“Muy bien, Byul Yi. Veo que eres alguien inteligente, sigue así y tu vida nunca correrá con riesgo”. Todo esto era una enorme mierda para Byul Yi, se preguntó si algo mas podía empeorar su vida.

Desafortunadamente, la respuesta era si.

“De ahora en adelante me acompañaras en mis viajes, te he elegido sobre tus hermanos para que me sirvas fielmente por el resto de tu vida”.

Ant

es de poder decir algo, comenzaron a escuchar un gran escandalo que venía de afuera. Min Seok se paró molesto de su trono y camino rumbo a la salida.

“Sígueme, hoy veras como tu padre resuelve los problemas”. Byul tuvo un mal presentimiento, los ruidos parecían ser de personas molestas.

“¡Mi señor! El rey de Hyon ha venido con muchos de sus soldados y exige verlo ahora mismo”. Guk apareció de la nada avisando a su Dios lo que estaba pasando.

“Ese tonto ha cometido un error colosal al venir aquí”. Byul tragó en seco y sintió lastima por aquel rey que acababa de cometer el peor error de su vida ¿Cómo se le ocurría enfrentar a un Dios?

“Quédate a mi lado y observa como se resuelven los problemas”. En ese momento ella quería salir corriendo, pero ese sería un grave error.

“¿Quién te crees que eres para venir a mi hogar a armar un escándalo?”. Preguntó totalmente molestó cuando tuvo de frente al rey. Byul y Guk estaban a su derecha.

“¡Tu maldito traidor! ¡Teníamos un trato y aun así decidiste aliarte también con el eterno enemigo de Hyon!”. El rey no parecía estar intimidado ante la presencia del Dios, grave error sus minutos estaban contados.

“Yo hago negocios con quien me de la gana. Tu no eres nadie para decirme con quien puedo hacer negocios y con quien no.”. La forma tranquila de hablar del dios molestaba mas al rey.

“¡No puedes hacer eso! ¡Teníamos un trató! Me has traicionado y pagarás muy caro por esto”. Los guerreros del Dios ya también se encontraban en el lugar, listos para acabar con los contrarios cuando su Dios se los ordenará. Min Seok se rio al escuchar al tonto rey.