inconciente

Capitulo 1
La barca

Despierto muy desconcertado y desorientado, mi cara está restregada en el suelo, giro hacia boca arriba, estoy muy extrañado usualmente no duermo en esa posición; lo primero que veo es el cielo, un cielo azul claro y brillante, hay unas cuantas nubes, están alejadas, son blancas y se ven suaves, no hay ninguna gris cómo tampoco alguna grande.
Todo está iluminado, es una luz suave y clara. Busco el sol al verlo me sorprendo, es un sol brillante y cálido, es un sol de medio día, pero lo más extraño es que no lástima al verlo fijamente, me pregunto a mi mismo "¿ Por qué no me lastima ver el sol?", Intento reflexionar sobre el cielo y el sol
Pero rápidamente otro pensamiento invade mi mente, dejando de lado al sol, "¿cómo llegué a aquí?", Volteé a ver mi alrededor, estoy en una clase de embarcación, como una barca o algo parecido, no es mi grande a mi parecer, pero lo peor es que al ver descubro que estoy en medio del mar, de un salto me levanto, pero la barca se sarandea bruscamente, haciendo que caiga de sentonaso, me vuelvo a levantar más cuidadosamente y veo que el interior de la barca no está mojada o húmeda en lo absoluto, es como si está agua no mojara ni salpicara a nada ni a nadie, tampoco mi ropa está mojada, visto un pantalón de mezclilla azul casi blanco en la rodillas también tengo un cinturón sugentandolo, tengo una playera roja, debajo de ella un camiseta, traigo puestas unas botas negras. Ninguna de mis prendas están mojadas porque yo tampoco estoy mojado ni húmedo, pero eso tal vez sea por el tiempo que he estado aquí, el tiempo que desconozco, sabrá Dios desde cuándo esté aquí o como llegue, me acerco a la orilla de barca, realmente desconozco si tiene un nombre específico para ella, volteó a ver al mar, con la esperanza de ver algo más que agua, pero fracasó, no veo a lo lejos nada, ni una sola señal de tierra o alguna isla, creo que estoy atrapado en ultramar, aún sigo con la duda de saber si el agua no moja, así que decido averiguarlo, meteré la mano al mar, sé que no es una buena idea, porque la orilla de la barca está muy alta y si me caigo al mar será difícil volver a subir, pero decido tomar el riesgo, aparte soy un buen nadador.
Inclino mi cuerpo hacia delante para tener menor distancia entre el agua, estiró mi brazo, toco el agua...¿Pero qué?, El agua es dura, dura como la roca, ni siquiera pude meter un dedo.
Le salzo un manotazo, pero aún así no sucede nada, aparte de que me duele la mano, esto es muy extraño, aún el agua se mueve como si fuera agua normal, aunque le vuela a pegar, lo cual ya hice, sigue sin ocurrir algo.
"¿En donde estoy?" Es lo que le grito a los cuatro vientos, ni esperó respuesta, estoy solo en medio del mar sin saber cuándo, cómo o por qué estoy aquí.
Decido que esperar sería lo mejor, al fin y al cabo no puedo hacer nada, no puedo ni siquiera tocar el agua.
Inspeccionó la embarcación con la esperanza de encontrar algo, la embarcación tiene una pequeña cabina, pero lamentablemente esta cerrada, exploro lo demás pero necesito hay nada salvo unas sillas, se me ocurrió la brillante idea de intentar abrir la puerta golpendola con la silla, pero tengo dudas la silla es de plástico, de esas que son plegables, pero ya que, tengo que averiguar si hay algo en la cabina, lo cual es difícil sin estar adentro, no tiene ventas, solo tiene la puerta que parece ser de metal, tiene un pequeño cristal pero está reforzado con una malla, y aparte está polarizado, creo que es la parte más débil de esta sólida puerta.
Tomo la silla por las patas y la chicoteo contra el cristal, al primer golpe se rompe, pero no sé desquebraja, le doy otro, pero solo se rompe más, así que le doy otro y otro, al quinto se viene abajo, pero sigue firme la malla, le doy otra serie de golpes, logro safarla de una esquina, mando a volar a la silla, dejándola en el suelo.
Meto la mano por el agujero, intentando quitar el seguro, lo logro gracias a mis largos brazos.
Por fin la puerta se ha abierto, por fin podré saber si hay algo que me pueda servir. Solo hay una mesa y una clase de alacena, checo si hay algo pero no hay nada, tengo la esperanza de que allá algo en la alacena, la abro ansiosamente, pero me desepciono al ver sola mente una cartuchera y una libreta pequeña. Me agachó para recojer los fragmentos del vidrio que rompí, no me fuese a cortar en una de esas.
Las tomo y salgo de la cabina, me dirijo a dónde lance la silla, dejo a un lado lo que encontré, abro la silla y recojo lo que encontré, me siento cuidadosamente, porque aún tengo el recuerdo de cómo caí de sentonaso hace rato, abro la cartuchera, solamente tiene un par de lápices, uno es más grande que el otro el más grande es de color azul, no tiene graduación ni nada; el mas pequeño es blanco tampoco tiene graduación ni nada, solo tiene un I donde debería ir la graduación, aunque no creo que exista esa clase, pero ya que ambos eran achatados; una navaja tipo cúter, de color rojo, parece nuevo el filo se ve claro y está completo, también tiene un par de repuestos, estan en una pequeña cajita de plástico;es transparente , junto con un par de gomas de forma alargada, son como esos repuestos para plumas para borrar, ambas son blancas.
También checo la libreta, su pasta es de cuerro, es suave pero es muy gruesa, ojeo las páginas intentando encontrar alguna escritura que me diga o me explique por qué estoy aquí o mínimo si tengo escapatoria, pero me desepciono, todas las hojas están en blanco, salvo la primera que dice "aquí es donde tienes que quedarte" realmente no le entiendo, la escritura está bonita parece de mujer es redonda y curva, pero ya que, mínimo tengo hojas dónde puedo escribir lo que me ha pasado, como el sol que no quema o el agua que es dura como la roca.
Así que me acomodo en la silla, pero comienzo a pensar que está media chueca, de ser por tanto golpe que le dí, así que me levanto y se me ocurre una gran idea.
Impulsivamente se me ocurrió de intentar cortar el agua con el cúter, pero no creo que el cúter resista un par de tajadas al agua de roca, así desidí llamarle.
Me acerco a la orilla, me recargo en el borde y me inclino hacia el agua, tomo la navaja y la despliego, le doy el primer tajo... pero de nuevo vuelvo a fallar, el agua sigue siendo impenetrable, el filo del cúter simplemente resbaló sin dejar alguna marca a esa sólida agua; lo interesante es que está vez nos se sintió como una roca, sino más bien como un bloque de mosaico, un mosaico casi imposible de astillar.
Pero me reuso a rendirme, lo vuelvo a intentar una vez más, le doy más tajasos, cada uno más violento y fuerte que el anterior.hasta que la punta de este sale volando, la punta se había roto; veo como sale disparada al cielo, lanzando destellos de luz, el reflejo del sol, parece que cae en cámara lenta , pero creo que solo es la desesperación mostrándose; la sigo fijamente con la mirada, hasta que veo que se acerca al agua, espero que rebote por el contacto con el mar de roca, pero me equivoqué, la punta no rebotó con el agua, solo comenzó a hundirse dejando un rastro de ondas.
Quiero intentar ver si el agua es de nuevo agua normal, estiró el brazo hacia el mar, toco el agua pero aún es ése cruel mar de roca, que me está volviendo desquiciado.
Me resigno al ver que es inútil tocar el mar, pero al menos puedo escribir esto en la libreta,guardo el cúter en la bolsa de mi pantalón, recojo la libreta y la cartuchera,me recargo en la en la pared de la cabina,abro la cartuchera y saco el lápiz blanco, pero veo que tiene el grafito achatado, pero realmente no creo que importe, creo que si servirá para escribir, abro la libreta y me decido a comenzar a escribir. Apoyo la punta contra el papel, la primera frase que escribo es " el sol", antes de que se le cayera la punta al lápiz.
La punta cae en el suelo de la embarcación, la recojo ,pero me sorprendo, la punta al tocarla se comienza a derretir, se vuelve una clase de tinta gris, cómo de bolígrafo; está tinta me mancha los dedos. Intento limpiarme las manos con una de las hojas de la libreta pero no sucede nada, no me limpio pero tampoco mancho la hoja. Entonces creo que no será un problema escribir así.
Pero aún así el lápiz no tiene punta, saco la navaja de la bolsa de mi pantalón. La despliego sacando el filo. Y tomo el lápiz con firmeza para sacar la punta, aparte dudo que sea difícil, tiene una forma favorable, de hexágono. me preparo y le doy el primer corte, pero creo que quedó muy corta, pero no importa lo arreglaré con el siguiente corte; le doy otra está vez quedó bien, ni tan larga ni tan corta.le comienzo a dar la tercera, después la cuarta y así sucesivamente hasta llegar a la doceava; pero en la séptima. En la cual tengo un descuido. Veo como el filo pasa por mi pulgar; envaino el cúter, para revisar cómo es la cortada . creí que sangraria pero no sucedió nada, creo que es más lo que vi que lo que sentí, pero estoy aliviado.
Vuelvo a sacar el cúter para reanudar lo que estaba haciendo. Vuelvo a empezar en donde me quedé. Le doy la última tajada. Creo que quedó bien. Podría ser mejor pero con esto es suficiente para escribir. Guardo el cúter en la bolsa de mi pantalón. Veo el suelo y está repleto de basurillas del lápiz. Así que las intento recojer y guardarlas en la cartuchera, cómo hice con los fragmentos del vidrio de la puerta, pero a esos no los metí a la cartuchera; porque podré estar atrapado pero no voy a estar en un lugar sucio, hasta eso cuando desperté estaba todo limpio.
Barro mi mano para amontonar la basura, pero la basura se siente diferente como si estuviera tocando una fibra de un gajo de naranja. Los aplastó y pero no sucede nada, simplemente se compactan pero no explotan por la precisión ni nada, realmente no sé que pensaba cuando hice eso, pero ya que. Así que solo recojo la basura y la vasio en la cartuchera.
Me vuelvo a acomodar para escribir, tomo la libertad y el lápiz blanco. Me dispongo a volver a escribir, intento recordar lo primero que sucedió cuando llegue a aquí, lo intento. Pero no brota nada. Se que lo tengo en la punta de la lengua. Siento como si hubieran pasado un par de días desde que estoy aquí.
Así que miro al cielo con la esperanza de recordar algo. Me siento alegré al fin algo de lo que hago sirve. Veo el cielo y al sol. Me siento confundido , ese sol que no lástima no se ha movido de su lugar. Sigue en el mismo lugar que cuando desperté. Pero al menos también puedo escribir eso, lo anoto, anoto todo lo que he visto desde que llegué. El sol inamovible, el sol que no lástima, el agua que cambiar de propiedades, la basura que no se siente como tal y la punta de la navaja cómo se hunde.
Sigo pensando y observando, esperando sí algo nuevo pasa por mi mente. Se me ocurre experimentar con algo, aún no se con que, pero quiero saber que sucede si...; O cosas por el estilo. Lo primero que se me ocurre es ver que sucede con los líquidos, hasta ahora solo he visto a la tinta, pero planeo usar la saliva, a ver que pasar.
Así que comienzo a babear, veo como una espesa gota empieza a salir de mi boca, es lenta pero no tanto como la punta del cúter cayendo al mar.
Veo como se está acercando al suelo, espero a que lo toque. Lo hace normal. Pero eso tambien sucedió con la punta del lápiz, así que la toco, toco esa espesa gota de saliva, pero a medida que la toco se comienza a esfumar, al final solo que da una densa nubesilla de humo, es café claro, es bonita para solo ser algo pasajero. Mientras sube lentamente al cielo la observó veo, o más bien imagino figura dentro de ella. Primero veo una ave, es una ave algo simple no es la gran cosa, parece que es una urraca. Después veo un espiral o una clase de resorte realmente no sé ni qué es. Al final solo veo una cabellera, una cabellera de mujer,es linda, es corto el pelo. Me recuerda a alguien pero aún no sé a quién, solo se que tengo un buen recuerdo de ella.
Regreso a intentar ver la primera figura que ví pero no encuentro su forma. Cada vez es más difícil el humo ha subido mucho. Ya solo me resigno a no volver a ver ninguna figura repetida en el humo. Así que solo dejo que se marché.
Me siento aburrido así que comienzo a pensar primero veo las nubes distantes. Recuerdo que de niño creí a que las nubes eran los pensamientos del cielo, o que eran su imaginación. Y que tal vez por eso nunca eran iguales; cómo lo que vi en el humo. Podría el humo ser parte de mis pensamientos e imaginación. Lo dudó porque se apartaron de mi o tal vez se marcharon porque no soy digno de tener este pensamiento. Quizá solo se marcharon para dar les pensamientos a los demás. Y si lo que acabo de pensar no son mis pensamientos originalmente sino de alguien más. Los estaría robando o ellos escojieron que yo los piense. Quizá ellos deciden en donde están y cuánto tiempo estar.
Quiero volver a imaginar, quiero volver a ver figura cambiantes, quiero volver a pensar libremente.
Vuelvo a hacer la prueba de la saliva; vuelvo a dejar que se forme una gota espesa de saliva, dejo que escurra directo al suelo. Ya la gota en el suelo la vuelvo a tocar para que se vuelva a esfumar para volverlo humo.
Esta vez sale un humo blanco, o más bien dicho un vapor; es un blanco puro y opaco, tanto que no tiene nada; ni sombras ni contrastes. Es como si fuera una hoja en blanco; una hoja si nada que está vacía.
La veo detalladamente, pero no veo nada, simplemente es sin que ocurra algo. Intento formar figuras pero no obtengo resultados, me resigno a ver cómo solo veo mi fracasó flotando a lo alto.
Será que está vez no pude imaginar por ser mal pensador. O será porque lo desee. Pero aún así dudo que si vuelvo a intentarlo veré algo. Será que mis ideas, o mejor dicho, las ideas me abandonaron. O solo decidieron darme un lienzo en blanco para ofrecerme más libertad.
Así que solo en apuntar todas mis reflexiones en la libreta, también anoto las preguntas que no he podido responder, las anoto para poder resolverlas luego.
Estoy muy cansado, demasiado agotado por pensar , anotar o experimentar. Me dormiré hasta el día siguiente día. Sí es que hay una clase de noche en este lugar bizarro.
Me meto en la cabina para ver si puedo echarme una larga siesta. Me acomodo en una de las esquinas donde no me da el Sol. Pero no puedo dormir, no sé si es por la luz, por dónde estoy o por la luz del Sol.
Así que me quitó la camisa y me cubro con ella la cara, para ver si puedo dormir mejor. Sigo sin resultados aún no me siento cómodo como para poder dormir. Intento fingiendo que estoy profundamente dormido, generalmente funciona pero no sé si sirva en este lugar. Pero aún así no puedo dormir. Me siento desesperado nunca había batallado para dormir.
Mi mente se ve iluminada. Recuerdo que no he comido ni bebido algo desde que desperté. Pero creo que es algo inútil pensar en alimentos. Ya registre la barca y no he visto nada solamente la cartuchera y la libreta; pero ni rastro de comida. Y tomar tampoco puedo no hay nada de beber y es inútil intentar tomar agua del mar. Ni si quiera puedo tocarla.
Tampoco he ido al baño, creo que eso sí podré hacer pero no tengo ganas de hacerlo así que solamente me siento a esperar que algo suceda