El demonio sin cuernos

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La explosión dejó un enorme cráter. Las cadenas diamantina estaban rotas. El cuerpo de Arashi estaba sangrando y sus cuernos estaban rotos.

-Maldición exploté mi ataque muy cerca de mi pero no tenía otra maldita opción. Debo de largarme pronto.-

Arashi comenzó a correr lo más rápido que podía. Su cuerpo estaba en pésimas condiciones, su cuerpo a pesar de tener una rápida regeneración, estaba herido tanto internamente como externamente. Había mucho trabajo que hacer para curarse por completo.

A unos cuantos metros de la explosión estaban tres cuerpos tirados, entre restos de madera, sus ropas estaban rasgadas y estaban inmóviles.

De repente uno de ellos comenzó a moverse y de sus manos apareció un chacra verde. Era Shinji. Con el chacra de sus manos comenzó a curar a los dos Uzumaki.

En un parpadeo a su lado estaban otros cuatro ninjas. -Que mal saliste con ese ataque Shinji pensamos que no saldrías con vida. Es increíble que tu defensa más poderosa fuera destruida-. -Le comentó asombrado Hisato-

-No es mi técnica defensiva más poderosa pues no estaba usando el modo sabio. Llegamos en un mal momento o debo decir en el mejor de ellos-

¿Cuáles son tus órdenes? -dijo su consejero Kashim- Ya quiero traerle la cabeza de ese miserable cobarde.

-No es momento de atacar a ese extraño sujeto. Estoy seguro que lo haremos muy pronto. Recuerden a que hemos venido. Debo de hacer un pacto de paz con los Uchiha y también hay que volver a estrechar lazos con nuestros primos-.

-Jajaja eso va a estar difícil. La última vez que los Senju y los Uzumaki nos reunimos Ronin y tú se pelearon por una tontería-.

-Fue por un comentario tonto que hice era mucho más joven y quería saber que tan poderosos eran nuestros parientes lejanos-   -Contestó Shinji algo apenado-

-Pues preguntarme cuál es el clan más fuerte de los dos sí que fue una pregunta tonta Shinji-  -enfatizó Ronin, que ya estaba repuesto gracias al ninjutsu médico de Shinji-.

-Tienes razón, en esa batalla que tuvimos, por el comentario que hice realmente me pusiste en aprietos, pero nuestra riña ya terminó, ambos clanes debemos de unir fuerzas- -Respondió Shinji-.

-Que puedo decirte. Te debo mucho por salvarme la vida, la mía y la de mi hijo. Da por hecho nuestra alianza. ¿A quién eliminamos primero? ¿A los Uchiha, al tipo que acaba de escapar o a esos salvajes que controlan la forma de sus huesos?-

-A ningún clan la guerra debe de terminar-.

-¿Qué dices Shinji?-

-Bonita charla la tuya de predicar la paz en estos tiempos, dijo el hijo de Ronin, que también acababa de reponerse gracias a Shinji. Pero aquí está el Clan Uchiha y el de los huesos. Y nos miran como un león a punto de devorar a su presa-.

Los Uchiha estaban en el flanco izquierdo y los "Kaguya" en el lado derecho. Ambos clanes estaban esperando la menor señal para atacar.

-Pues no están sólos. ¡Ya llegó la caballería!-. De los árboles empezaron a surgir varios Uzumaki. La fuerte explosión los alarmó a todos y por ello todos tomaron la decisión de cambiar los planes de la emboscada y ayudar a su líder.

Ahora todos los Uzumaki los rodeaban a todos Ronin estaba de pie y a su lado estaba su hijo y el líder Senju con sus cuatro hombres que ya tenían sus armas en sus manos.

-Shinji tomó aire y habló-

¡Esta guerra terminó!

-Te crees mucho para decir estupideces esta guerra termina cuando alguien gana y nosotros el clan más violento de todos seremos quién ganemos-. -Dijeron aquellos shinobis que controlan las propiedades de sus huesos-.

-Entonces no podré hablar con ustedes si quieren vengan por mí-. -Les dijo el líder del clan Senju-.

-Basura no estamos interesados en ti. Ahora nos cargaremos al tipo de los cuernos y después vendremos por ustedes.

Los shinobis que moldean sus huesos empezaron a correr en dirección al demonio negro. Los Uzumaki les dieron el paso pues sabían que ese clan era verdaderamente irrazonable.

¡Desgraciados sigamoslos y acabemos con ellos! .Dijeron con enfado los Uchiha. -¡Esperen!- dijo con firmeza Shinji- En su frente y parpados se había formado la marca del modo sabio.

-Puedo sentir que en el lado sur de su clan hay mucha gente herida, por el poco chacra que les queda morirán en un par de horas si no los atienden.

-¡Desgraciado Senju! nos estás amenazando con atacarlos si vamos tras ellos-

-¡Cuiden sus palabras con Shinji-sama o tendré que acabar con ustedes!-. -Dijo con furia el joven Iniko-

-¡Ven mocoso! ¡Vamos a terminar con esto aquí y ahora! ¡Por fin terminaremos con nuestros mayores enemigos! !Los Senju caerán aquí y ahora! ¡Por Yuki Uchiha! Ese asesino Senju debe de pagar!-

-A sí que saben que su líder y gran parte de la élite de su clan están muertos-. -Comentó con cierto pesar Shinji al recordar a su viejo amigo-.

-¿Que dice ese idiota? Nuestro líder es el más poderoso del clan y nunca ha perdido una batalla. Ni siquiera contigo. Así que no me vengas con estupideces-

El Uchiha ya estaba harto de la presencia de los Senju y saltó para atacar a su lider. Cuando su kunai estaba cerca de su rostro apareció otra persona y con su mano izquierda detuvo el ataque del Uchiha.

-¡Qué demonios haces Shinobu! ¡Ya lo tenía!-.

-No seas ridículo- Respondió Shinobu-. Si pensabas derrotar a Shinji Senju con un kunai no estás a su altura. Además es cierto que nuestro líder está muerto así que retrocede. En este momento soy el único que puede hacerle frente al lider Senju así que apártate que  necesito respuestas-.

El Uchiha por instinto le hizo caso a su compañero. Después de todo se dio cuenta que su camarada ya no tenía las tres aspas en sus ojos. Ahora tenía cinco triángulos equilateros negros unidos en la base por sus vértices en cuyo centro formaba un pentágono rojo. Ese era un Mangekyo. Un signo de la élite Uchiha.

Ahora Shinobu era el único miembro del clan en tener ese poder ocular.

Shinji habló fuertemente. -Es cierto que su líder está muerto y varios de sus más cercanos camaradas. No fui yo quien lo mató mi gente no tuvo nada que ver en la batalla. Tengo mucho que contarles espero que de verdad vean mis nobles intenciones. pero primero debo de curar a todos los heridos-.

-No es necesario -respondió Shinobu- ya mandé a seis compañeros para atender a los heridos-.

-No será suficiente yo puedo curarlos con un ninjutsu médico que inventé-.

-Esta bien Shinji ayuda a mis camaradas pero si veo que tienes malas intenciones te atacaremos-

Shinji se apresuró curando a los Uchiha. Todos ellos se sorprendieron cuando él los tocaba y con su chacra los curaba rápidamente.

Ronin veía a Shinji curando a sus peores enemigos. En verdad no lo entendía. ¿Cómo alguien tan fuerte tenía un corazón tan noble?

Naruto: la historia de los bijuu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora