Tema 3: Luz

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Ulrich estaba dolido, realmente herido. ¿El motivo? Justo hace apenas una hora se enteró que Yumi y William salían desde hacía un mes, y para empeorar su amiga-antes-amada no le había dicho nada, todos sabían menos él. Sencillamente, se sentía como basura.

El castaño simplemente no sabía que hacer: quería gritar, quería llorar, quería matar a William, y de paso a Yumi, quería suicidarse…pero, simplemente, no podía hacer ninguna de esas cosas. No era ni emotivo, ni un monstruo, ni un cobarde ni un mal perdedor. Simplemente, no sabía que hacer.

-Ulrich, ¿Estás bien?-oyó la voz de Odd hablandole. El alemán, que sinceramente no quería hablar con nadie, solo se limitó a negar con la cabeza. Sintió el peso de Odd subiéndose en la cama, y la mano de su amigo cuando esse te la puso en el hombro.

-Lo siento-fue todo lo que el rubio alcanzó a balbucear-si te sirve de consuelo, yo tampoco sabía nada-agregó, queriendo sonar consolador.

-¿Y eso me consuela por qué…?-preguntó Ulrich irónico.

-Lo que intento decir es que no te angusties, encontrarás a alguien más-le dijo Odd, pasándole una mano por el cabello-Bien, saldré a pasear a Kiwee-fue todo lo que dijo el rubio antes de salir, acompañado de su perro.

Apenas se fue, Ulrich se levantó de la cama y se dirigió a la de Odd, antes de ponerse a hurgar en los cajones del soporte. Sabía que a su amigo rubio no le molestaría que Ulrich tomara prestado su iPod para escuchar un poco de música para animarse…cuando encontró otra cosa: un cuaderno morado, decorado con patitas de animal color lila, el cual el castaño reconoció como el diario del rubio. Con la curiosidad picándole, Ulrich decidió echar una ojeada. Lo que Odd no supiera no le haría daño. Pasó las páginas, hasta que encontró algo que le llamó la atención:

19 de Diciembre

Hoy vi a Ulrich entrenando en el gimnasio, se ve tan sexy con su traje de entrenamiento. Estoy tan enamorado de él. Pero sé que a él le gusta Yumi, y francamente prefiero dejar lo mío con él como un "solamente amigos"… no resistiría perderlo…

Esto tomó por sorpresa a Ulrich. Jamás sospechó que Odd fuera gay, o que estuviera enamorado de él. En cierto modo, eso le hizo sentir bien. Pasó las paginas y encontró algo más reciente:

07 de Enero

Empiezo a sospechar que hay algo entre Yumi y William. Solo sé algo: si tengo razón y tienen algo, Yumi debería tener la honestidad de decirle a Ulrich. Dios, me partiría el corazón tener razón y que Ulrich se entere de la peor forma…

Ulrich siguió pasando las páginas, y encontró algo:

28 de Febrero

No tengo duda, estoy seguro de que algo pasa entre Yumi y William, he hablado con Jeremie y Aelita, pero ambos niegan saber algo sobre ellos, pero presiento que mienten. Espero estar equivocado, no sé como Ulrich tomaría el que Yumi salga con William sin decirle…

Ulrich, casi sorprendido y desesperado, paso a la última página escrita, y encontró lo que buscaba:

5 de Abril

Hoy enfrenté a Yumi, exigiéndole respuestas sobre mis sospechas, lamentablemente ella también negó todo, aún cuando le rogué que si era verdad y estaba con William se lo diga a Ulrich, el lo merece, y ni hablar de que William, que hasta me amenazó con contarle a todos de mi enamoramiento con Ulrich, lo que jamás pensé que el sabría, si seguía "metiéndome donde no me llamaban". Dios, esto me duele de solo pensar…

Ulrich entendió: Odd sospechaba de que Yumi y William andaban juntos, y de hecho había intentado convencer a la japonesa de confesarselo. Incluso dejaba en claro de que le dolía la idea de que Yumi lo lastimara. Y lo más importante: Odd en varias de las páginas de su diario afirmaba estar enamorado de él. Era demasiada información para asimilar. Fue cuando oyó los pasos acercarse a su habitación.

Rápidamente guardó el diario, cerró el cajón y se sentó en su cama, justo a tiempo para que Odd entrara en el cuarto, y metiera a Kiwee en su cama-cajón. Inmediatamente Ulrich se puso en acción: cerró la puerta, le puso seguro, empujo al rubio contra la cama y empezó a besarlo. El rubio primero se resistió, pero después de un rato fue aceptando el beso, hasta que al final se convirtió en una lucha por tomar el contro. La ropa voló y… pasó lo que pasó.

Cuando acabo el acto de amor, Ulrich estaba con Odd en la cama del rubio, los dos cubiertos únicamente por la sábana del chico, y ambos abrazados. Odd hacía un rato que se había dormido, y Ulrich estaba ocupado acariciando su cabello. Miró el rostro de su nuevo amor, y en el fondo se sintió el chico más afortunado.

-Mientras te tenga a ti, Odd, soy la persona más feliz-susurró el castaño, intentando no despertar a su ahora novio-tu eres mi luz-agregó, dándole un beso en el pelo, antes de caer dormido.

Fin

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