Capítulo 10: Ruido y voces desesperadas.

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Me tiro sobre la suave cama y cubro mi rostro con la almohada; siento mis mejillas arder, todo el almuerzo él no dejó de mirarme, me veía y sonreía al verme sonrojado a más no poder. Después de que acabara el almuerzo y que todos se fueron a sus habitación él me tomo de las manos y estuvo a punto de besarme... Hubiera querido que lo hiciera enserio lo deseaba pero nos interrumpieron las empleadas.

Suelto un grito ahogado por la almohada y me la quito; mi cabello se desparrama por mi rostro, con el ceño fruncido me pongo de pie y camino hasta el baño, no entiendo por qué estoy molesto es como si empezara a tener cambios de humor.

- Jimin - dice Yoongi entrando a la habitación - tenemos que entrenar, ¿estas listo?

- ¿Ahora? - pregunto tirándome nuevamente a la cama.

- No seas flojo - dice con el ceño fruncido - vamos niño levántate tenemos mucho que hacer.

- Agh - bufo - está bien.

Me pongo de pie y camino hasta él, me detengo y él me ve; me mira de arriba abajo y comienza a caminar, lo sigo sin decir nada hasta llegar a un lugar en medio del bosque.

- Aquí será nuestro lugar de entrenamiento
- dice quitándose su chaqueta dejando ver sus brazos desnudos, - es tranquilo y alejado de la casa.

- Ehm.. - murmuro - Ehm...

- ¿Ehm? - pregunta -, Oye niño deja de ser tan raro, hazme el favor de quitarte esa chaqueta.

Me la quito de inmediato y sin decir nada más la tiro contra el tronco de un árbol cercano.

- ¿Que hacemos primero? - pregunto mostrando un poco de emoción.

- Primero que nada debes aprender a pelear cuerpo a cuerpo - sonríe - primero eso después empezaremos el entrenamiento de tus habilidades.

- Bien - digo asintiendo - ¿Que debo hacer?

En un momento siento un golpe que me lleva al suelo; suelto un gemido de dolor y él ríe.

- Primero concéntrate - dice quitándose de encima y extendiendo su mano - así siempre estarás perdiendo.

Siento como lanza un golpe directo a mi rostro; intento esquivarlo pero él toma mi mano y la dobla dejándola en mi espalda, el dolor se hace presente y enseguida empiezo a moverme tratando de soltarme de su agarre.

- Eres un pequeño niño - ríe y empuja juntando nuestros cuerpos - esto va a tardar mucho.

- Nunca me a gustado pelear - digo evitando su mirada.

- Creo que tendrá que gustarte desde ahora
- sonríe - mírame.

- ¿Por que? - digo mirándolo - ¿Por que me tratas así? Acabo de llegar y lo único que haces es ordenarme y hacerme sentir nervioso ¡Ya suelta me duele!

- Bien voy a soltarte - dice soltando mi mano - pero no del todo, - ríe y coloca mis brazos en frente para después rodearme con los suyos.

- ¿Que haces? - pregunto tragando saliva.

- Hoy nos interrumpieron - dice acercándose más a mi -, creo que debemos terminar lo que hoy casi empezamos, ¿tu que opinas?

- N-no - tartamudeo - n-no c-creo que s-sea co-correcto.

- Ay niño - dice él riendo -, eres una ternura.

- ¡Claro que no! - digo molesto - déjame ya basta, vamos a seguir con esto.

- ¿Con qué? - pregunta y sonríe -, ¿con que quieres seguir?

- E-el entrenamiento - tartamudeo.

- Bien - dice él soltandome - vamos a seguir con el entrenamiento.

Asiento.

Él se para frente a mi a un par de metros; lo veo sonreír y mi nerviosismo se hace más fuerte, veo hacia la casa y noto humo sobre ella, comienzo a correr hacia la casa y oigo la voz de Yoongi diciendo que me detenga pero no lo hago, cuando más cerca estoy más veo el humo y el fuego salir de ella.

- ¡Jimin! - Yoongi grita - ¡No entres ahí!

- ¿¡Como puedes decirme que no entre!? - grito deteniendome - ¡Ellos están ahí!

- Ellos pueden salir - dice el acercándose a mi - van a escapar no entres.

- ¡Tengo que hacerlo!

- ¡No! - grita - ¡No entres ahí! ¡Es una orden!

- ¿¡Vivirás siempre ordenandome!? - grito
- ¿¡Por que!?

- ¡Por que no quiero volver a perderte! - responde - ¡Por que no quiero perderte otra vez, no quiero! ¡Por que te amé desde el primer día que te ví, por eso no quiero volver a perderte!

Veo sus lágrimas rodar por su rostro, caigo de rodillas y cubro mi boca con ambas manos; oigo pasos correr hacia nosotros. Alzo un poco mi mirada y veo a los demás chicos abrazar a Yoongi; no puedo moverme, siento el cuerpo pesado y débil. Cierro mis ojos y cuando intento abrirlos nuevamente ya no puedo, siento un dolor en mi espalda y después de eso solo ruidos y voces desesperadas.



El Príncipe ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora