-Cariño sólo un abrazo mas, ¿si?.
Me mira cansado desde su cama pero extiende sus brazos.
-Adiós mami-dice mientras me abraza.
Salgo de su habitacion a la cocina, no tardó mucho en prepararle el desayuno y finalmente lo pongo en la mesa.
-Vamos levántate, Clara vendra en unos cuantos minutos - le grito desde la cocina.
Tomo mis llaves y mi cartera para irme al trabajo.
Me encuentro con clara en la puerta quien me saluda amablemente, me despido de ella y me voy.
##
Miro a Clark quien se encuentra en entrenamiento mientras organizo el papeleo.
-Buenos dias en que puedo servirle- le dice amablemente al cliente frente a el.
-Quiero hacer un retiro.
-Bien, solo necesito su......
Un estruendoso ruido se escucha en las puertas del banco
-Todos al frente y al suelo-suelta un hombre entrando por la puerta.
Esta vestido completamente de negro, tiene la cara cubierta y sujeta un bolso del cual saco un arma de asalto.
Dos hombres mas aparecen de los lados cubriéndose la cara vestidos de la misma manera también sacando sus armas de diferentes mochilas.
No tardan mucho en desarmar magistralmente a los 4 guardias que aquí se encuentran
Son tan profesionales, esto no es cualquier atraco.
-Todos al frente!-repite amenazantemente unos de los hombres que de encontraba a la derecha del que parecia ser el jefe.
Me quedo paraliza en una especie de limbo, no puedo creer que esto está pasando, miro a mi izquierda para en contarme con Hilda a unos segundos de presionar el botón de emergencias.
-No!, No lo hagas.
Me acerco a ella rápidamente para frustrar sus intenciones.
-Pero por qué?
En ese instante aparece unos de los encapuchados.
-Salgan rápido.
El nos apunta e Hilda me da una mirada de, lo entiendo todo y salimos. nos dirigimos con los demás empleados que ya se encuentran incados en el centro del banco y nos incamos.
-Tu!, ven!-dice
El que parece ser el jefe, me lleva a la boveda caminando por los pasillos como si ya hubiera estado aquí antes, una ves que llegamos me señala la bóveda.
No puedo creer que esto esté pasando.
-Abrela
-No...no lo haré -no soy tan débil.
-Escuchame bien, si no abres esa puerta olvídate de tu hijito querido.
No, mi hijo no.
Me tomó del brazo fuertemente y me lanzó contra la puerta haciéndome caer.
-Abrela ahora.
Me levanto del suelo como puedo tecleo la contraseña y pongo mi huella dactilar haciendo que la puerta se abra.
-Entra, ahora!.
me pasa una bolsa de tres que lleva en la espalda.
-Entra todo el dinero que puedas en esa bolsa rápido.
Entro dinero en la bolsa tan rápido como me lo permiten mis temblorosas manos.
Pone su arma en el suelo para hacer lo mismo con sus bolsas, tal vez ya podría...no todavía no es tiempo.
Espero a que se concentre bien entrando dinero en las bolsas y antes de que él pueda reaccionar lo empujó y tomo su arma.
-Al suelo, ahora! -exclamo más alto de lo que el crea que podría.
El me mira incandose.
-Que estás haciendo? -pregunta ingenuamente.
Disparo a la cámara frente a mi y a la del pasillo con maestría.
-No. Que están haciendo tu y los demás aquí?, Ahh, verdad, planeaban traicionarme.
-La vedad compartir el dinero contigo nunca fue una opcion.
-Yo idee el plan, enserio llegué a confiar en ti.
-Mala idea.
-Supongo que tuve una mano amiga -exprese.
-Jeir -dijo entre dientes- maldito traidor, pensé que estaba muerto.
-El si sabía de qué lado estaba y obviamente está vivo.
Mire mi reloj tengo 15 minutos antes de que venga la policía.
-Acaso crees....
-No tengo tiempo para tus palabras ahorratelas.
El se acerca bruscamente a mi, intentando quitarme el arma pero lo detengo de un golpe seco en el cuello.
Cae adolorido en el suelo sujetándose la garganta.
-Me las vas a pagar maldita -se retuerce en el piso.
-No. Frank tu me las vas a pagar.
En ese instante aparecen Richard y Juan enmascarados trayendoo a los dos cómplices amarrados de este imbecil.
-Entrenlos y guarden el dinero.
Para cuando guardan todo el dinero todavía me sobra mucho tiempo.
-Maldita, te van a atrapar, te voy a delatar.
-De hecho hubo un gran cambio de planes, esto lo sabía desde hace tiempo. Ustedes serán mi tiempo, para cuando vengan por mi, digamos que no estaré aqui.
-Maldita -oigo que grita antes de decir- Cierren.
Después de encerrarlos en la bóveda me dirijo por el pasillo cargada hasta llegar al centro del banco mientras Richard y Juan me siguién con bolsas.
Hago una señal para que Alan y Ana también enmascarados quienes se mantenían con los rehenes busquen más bolsas en la puerta de la bobeda.
Ellos vienen rápidamente y se van con Richard y Juan a la camioneta, doy una última mirada al banco y me voy sin mirar a tras.
##
-Y así fue como di el golpe de mi vida, ahora me encuentro en las Maldivas tomando el sol.
Carlos no se cree lo que le digo lo cual digo ya que se encuentra aquí por eso, el se ha vuelto especial para mí estos años y creo que lo sabe.
Paso unos minutos despidiéndose de el y le ago prometer que me enseñe su colección de armas, finalmente se va y
Charl se acerca ami corriendo,
No puedo creer que ya han pasado 4 años.Lo abrazo y le beso pasándole su cubetita y su pala, sale corriendo a la arena para hacer el más grande castillo como me dijo.
Clara se acerca con unas bebidas.
No dudo en venir aquí medio año después de eso.
Debo admitir que ese traje de baño le queda muy bien.
-Clara, cómo estás?
-De maravilla.
Suelta una carcajada que se me contagia, sin duda la pasaremos bien.
Fin
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LOS QUINCE©
De Todo15 cortas historias de 15 personas diferentes pero iguales a la vez.