[CITRUS/ONE SHOT] PS: I like you

Dame una oportunidad

Era un día sábado como cualquier otro día, todo hacía parecer que sería un día normal, pero no, resulta que Matsuri me había enviado un mensaje de texto diciendo que quería verme, que pasáramos la tarde juntas, que ella invitaba, la verdad es que no tenía nada que hacer, ya que Yuzu había salido al centro comercial con su madre y la presidenta, Mei, me quedé pensando un momento en ella y en su nombre.

Ya era la hora de que nos juntáramos, iba un poco tarde debido a que me había quedado maquillando y arreglando como buena gyaru de fin de semana, ya que en la semana debía respetar las reglas de esa aburrida escuela.

- Al fin llegaste Taniguchi-san - dijo con ironía la pelirosa.

- Te he dicho que no me digas así, solo dime Harumin.- me miró de pies a cabeza.

- Vaya, la espera valió la pena.

- Que cosas dices, entremos - susurré mientras me abría paso a la cafetería, era bastante amplia, limpia e iluminada, nunca había venido aquí. Me senté y luego lo hizo Matsuri. Una joven nos vino a tomar la orden, pedí un café y Matsuri pidió una copa de helado, al poco rato después nos habían traído el pedido.

Noté lo callada que estaba , la verdad es que me había quedado pensando en aquella pelinegra.

- ¿Estas bien Harumin?

- Si, por qué lo preguntas...

- Has estado bastante callada.

- Soy callada - contesté cortante.

- Claro que no, con Yuzu sueles hablar bastante.

- Es por que es Yuzu.

- ¿Te gustaría que fuese Yuzu la que estuviera acá contigo?

- No dije eso - desvié la mirada.

- Claro que sí, te gustaría que ella estuviera aquí en vez de mí - se inclinó sobre la mesa y fijó sus ojos violeta en mí, sus ojos me recordaban a Mei, la única diferencia era que a Matsuri a veces se le tornaban un poco azulados.

- No, está bien que seas tú, si no hubiese querido no hubiese aceptado.

- Esta bien, te creeré eso, aunque realmente no puedo creer que estés del todo bien. Pero en fin, te dije que nos juntáramos para conversar.

- Muy bien, pues empieza, de qué quieres conversar.

- Quiero que nos conozcamos mejor, no te mentiré, tengo interés en ti - sentí como mis mejillas comenzaban a tomar un calor agradable, Matsuri me estaba coqueteando y la verdad hace mucho tiempo nadie lo hacía, inclusive yo no coqueteaba con nadie hace mucho tiempo.

- Vaya, no me esperaba una confesión de ese tipo.

- ¿Y qué dices? ¿crees que podamos conocernos mejor?

- Mmm, pues sí, supongo.

- Muy bien, comencemos, ¿puedes creer que antes me gustaba Yuzu?

- ¿Antes? Pero si aún la miras embobada.

- ¡Ay! eso no es cierto, es solo que admiro la belleza femenina - ambas reímos, aunque sentí un pequeño dolor en el corazón, rápidamente mi semblante cambio.

- ¿Estás bien?, te noto rara Harumin, ¿quieres contarme algo?

- Matsuri ya te dije, estoy bien, no hay nada que contar - dije algo molesta mientras le daba un sorbo a mi café. Resulta que la pelirosa intentaba acercarse a mí de una forma muy inusual, en lo único que acertó fue en invitarme a un café.